POLÍTICA

“Petro sabe hablar y comunicar, pero no sabe ejecutar”: Rodolfo Hernández

En entrevista con SEMANA, el candidato presidencial dice que es un defensor de los pobres, un candidato que si llega a la presidencia jurará en nombre de Dios y la Patria, un hombre rico que gasta menos de 60.000 pesos diarios y que se arrepintió en 2021 de ser cascarrabias.

24 de enero de 2022
RODOLFO HERNÁNDEZ SUAREZ
Registraduria General de la Nación liga de gobernantes anticorrupcion Candidato: RODOLFO HERNANDEZ SUAREZ entrega las firmas para la inscripción de su candidatura a la presidencia Foto Guillerm Torres | Foto: GUILLERMO TORRES

SEMANA: ¿quién es Rodolfo Hernández?

RODOLFO HERNÁNDEZ (R. H.): soy de Piedecuesta, Santander, un pueblito que queda a 19 kilómetros de Bucaramanga; estudié en la escuela pública, soy ingeniero civil en la Universidad Nacional, me gradué en el setenta y vengo trabajando en el sector privado al sol y al agua como le ha tocado al 99 % de los colombianos hace 51 años. Ahora, estoy dedicado a representar a los colombianos en la política.

SEMANA: llegó 2022, ¿cómo sostenerse en el segundo lugar de las encuestas y alcanzar el primero?

R. H.: muy fácil, siendo coherente como siempre he sido: coherente con el discurso, decir siempre la verdad y estar siempre enfocados a defender los intereses de todos los colombianos, especialmente de los más pobres del país. Hay 22 millones de colombianos aguantando hambre, eso tiene que cambiar.

SEMANA: ¿qué tiene usted como candidato que gusta tanto?

R. H.: seguramente la gente ve y analiza que yo debería estar descansando y tengo 76 años y estoy dedicado a representar a los colombianos. Me meteré de fondo a defenderlos, especialmente a los más pobres. Ese es el sentido del Gobierno: la generación de felicidad.

SEMANA: si gana la Presidencia, ¿qué será lo primero que hará?

R. H.: recoger las chequeras, acabar con el despilfarro, los lujos y la impunidad. Y la impunidad simplemente es modificar el Código de Procedimiento Penal en diez renglones: cambiar las formas en que dilatan los procesos y a, lo último, terminar con el fenecimiento de todas las acciones. Eso se va acabar.

SEMANA: si no llega a la segunda vuelta, ¿se une a Petro?

R. H.: yo no he considerado eso, es un caso hipotético, sé que voy a ganar en la primera vuelta. En qué me baso: en octubre tenía el 4 %, en diciembre, el 11 %, una semana después RCN hizo una encuesta y voy con el 13 %. Estoy creciendo en casi 50.000 votos diarios. Si eso es así, faltando cinco meses para las elecciones, vamos a tener 12 millones de votos que necesitamos para ganar.

SEMANA: pero le reitero, en el hipotético caso de que no llegue, ¿a quién respaldaría?

R. H.: tengo que ver quiénes llegan, tengo que ser responsable con mi voto porque ese voto seguramente lo van a seguir muchos millones de colombianos. Yo no soy de la derecha, ni de izquierda. El hambre, la desilusión, la desesperanza no es de derecha ni de izquierda.

SEMANA: ¿qué regiones del país le falta por conocer?

R. H.: todas, no he ido sino a Cali, Medellín, Barranquilla, Bucaramanga y Bogotá, de resto nada. Lo sorprendente es eso, que cuando no me conoce sino el 38 % de los colombianos, el 13 % está pensando en votar por mí. Necesito conseguir que me conozcan más, vamos a utilizar las redes, esta es una campaña más de medios que de tienda.

SEMANA: ¿usted siempre grita cuando está bravo?

R. H.: no, yo tengo fama de soberbio, de cascarrabia, pero la verdad soy jovial (ríe). Lo pueden preguntar en Bucaramanga, todos los que son amigos míos, yo soy muy amigo de los amigos, disfruto, echo cuentos, hay muchos jóvenes cercanos, de 18, 20 años que me apoyaran. Todos me quieren.

SEMANA: frente al coscorrón que le dio a su exconcejal, ¿era la primera vez que lo hacía?

R. H.: no lo volvería a hacer nunca, fue la primera vez, fue un acto mal hecho de mi parte, me sacó de casillas porque me fastidian las personas hipócritas. El concejal me pidió la cita para una cosa, pero apenas llegó llevó luces, cámara, acción y me cambió el tema, cuando la cita registrada en la Alcaldía era para hablar de cultura. Me fastidian las personas mentirosas, falsas y manipuladoras. No las soporto.

SEMANA: ¿qué hacer con los corruptos?

R. H.: les vamos a quitar la chequera. Y les cambiaremos de entrada el Código de Procedimiento Penal para que no los manden para el club El Nogal o el Club Campestre de Bucaramanga, sino que los metan en el peor patio de la cárcel. Ahora a los más pobres, si se roban el celular, los meten en el peor patio y a los ladrones de cuello blanco que se roban mil millones de dólares, en una suite; eso se acaba en mi Gobierno.

SEMANA: usted paga 7.000 millones de pesos en impuestos, ¿es un hombre rico?

R. H.: sí, eso puede tener varias interpretaciones, pero no lo puedo ocultar porque entraría a contradecirme y a no ser coherente, es decir, aparentar que no tengo ni un peso cuando sí tengo. A la gente lo que le gusta es la verdad, son 51 años trabajando al sol y al agua, eso no fue por decreto; nunca he tenido un cargo público aparte de la Alcaldía.

SEMANA: ¿cómo le entregará la presidencia Iván Duque si usted llega al poder?

R. H.: un desastre, peor imposible…

SEMANA: ¿ya pensó en quién puede ser su vicepresidente?

R. H.: una mujer que sea menor de 50 años y que sepa de medio ambiente y derechos humanos. Esa es la que me gusta, si fuera empresaria, que hubiera producido, pagado impuestos, mejor.

SEMANA: su mamá dijo que usted era un viejo loco, ¿es verdad?

R. H.: (ríe) ahí me ven, qué es lo loco que me califican los colombianos, ellos creen que esta batalla que estoy dando es inocua, que no era capaz, que era imposible derrotar una maquinaria corrompida, ladrona, atracadora, a la mafia politiquera que compra votos con la plata que les roban a los pobres y luego los traicionan. Miren dónde voy, colombianos.

SEMANA: ante la crisis de la pandemia, ¿cuáles serán las primeras medidas como presidente?

R. H.: terminar la vacunación y, como ahora hay diversas especies de covid-19, mirar a través de la OMS si hay una vacuna adicional y gastar la plata que se necesite, pero ya. Además, hacer una campaña de vacunación total, gratuita y poner al Ejército en eso, que nos ayude para no durar tres años inmunizando, sino tres meses.

SEMANA: ¿qué hará con los pobres?

R. H.: sacarlos de la pobreza, pero para sacarlos de la pobreza hay que quitar del copete todos esos privilegios que los politiqueros han diseñado para su beneficio. Hay 22 millones de pobres, de esos, 17 viven con dos dólares y cinco viven con uno. Se están muriendo de hambre, esos politiqueros los sacaron de los circuitos económicos. Yo les digo a los 22 millones de pobres: si ustedes se ponen de acuerdo y votan por el presidente que les puede mejorar esas condiciones de vida, no necesitan preguntarle a nadie, ustedes ponen el presidente.

SEMANA: ¿qué tanta paja habla Petro?

R. H.: mucha, cómo se le ocurre decir que al otro día de la posesión suspende toda la exploración y extracción petrolera sin mostrar una partida de ingresos que sea igual a la que produce el petróleo…

SEMANA: ¿le alcanzarán los cuatro años para todo lo que promete?

R. H.: eso no alcanza, pero como es tan largo lo que hay que hacer, vamos a hacer la cimentación de la transformación de Colombia. Nada se puede hacer sin transformación, sin cimentación.

SEMANA: ¿cree en Dios?

R. H.: mucho, no soy es practicante.

SEMANA: ¿usted encomendará al país al Sagrado Corazón de Jesús y jurará por Dios y la patria?

R. H.: yo digo que esos son estados del alma. Claro, juro por Dios y la patria cumplir fielmente, cumplir con la Constitución y la Ley (risa).

SEMANA: si no gana, ¿qué se pone a hacer?

R. H.: tengo dos nietos (risas).

SEMANA: ¿cuánto gastará en su campaña?

R. H.: entre diez y 12.000 millones de pesos, no le voy a recibir plata a nadie. Vamos a hacer una convocatoria nacional una vez tenga la resolución que me acredite como candidato. La idea es que me den 60.000 pesos o 30.000 en dos meses, o 60.000 en cuotas de diez mil. El que me quiera dar mil millones, 500 millones, no se los recibo. No quiero compromiso sino con los colombianos.

SEMANA: ¿qué carga Rodolfo Hernández en su billetera?

R. H.: cargo un billete para el bus. Mire, 52.000 pesos, yo no gasto plata. Los amigos me gastan, yo me voy al café y no sé qué es pagar un tinto (risas).

SEMANA: ¿no teme decisiones judiciales en su contra en medio de la campaña? En abril tiene audiencia por el escándalo de las basuras en Bucaramanga.

R. H.: me metieron 200 denuncias entre penales, administrativas y fiscales estos politiqueros que me querían sacar de la Alcaldía. Colombianos: de las 200 han archivado 162, tengo 32 andando; de ellas, una penal: un fiscal de Bucaramanga, Jorge Villamizar, me investiga por interés indebido de contratos en favor de terceros; es decir, que yo, supuestamente, violé el Código Penal para favorecer a un tercero contratista que no conocía para que se ganara 30 millones. Colombianos: si regalé todo el salario, los ingresos que tuve en la Alcaldía, ¿cómo entienden ustedes que estos politiqueros me armen un proceso porque, según ellos, permití que un señor que no conocía se ganará 30 millones? ¡No les cree ni la madre de ellos!

SEMANA: Federico Gutiérrez dice que usted es el candidato presidencial llamado a juicio por corrupción.

R. H.: no me preocupa en nada porque no me robé un centavo, al contrario, todo lo que gané (1.192 millones) lo entregué a diferentes apoyos de los niños más pobres, a los mejores estudiantes de bachilleratos de colegios públicos. ¿Cómo entender que por un lado me iba a robar 30 millones de pesos y por el otro, regalo 1.192 millones. Federico Gutiérrez está tratando de pasarme en las encuestas hablando falsedades que a él no le constan. Más bien debería estar preocupado por todo lo que se robaron en Hidroituango en la nariz de él.

SEMANA: ¿usted de qué se arrepintió en 2021?

R. H.: tal vez los dos actos violentos que hice, el del concejal y un cliente que llegó a la oficina a insultarme porque tenía una filtración en un baño. Se lo habían arreglado, pero siguió la filtración, él llegó violento a amenazarme y yo me salí de casillas. Esos actos violentos no los puedo repetir. En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, amén (risas).

SEMANA: por último, ¿cómo ve la campaña de Gustavo Petro?

SEMANA: Sergio Fajardo.

R. H.: tibio.

SEMANA: Óscar Iván Zuluaga.

R. H.: muy sesgado a la derecha.

SEMANA: Federico Gutiérrez.

R. H.: es un payaso que tienen los del Centro Democrático para que los represente. A lo último habrá una encuesta entre Óscar Iván Zuluaga y él, y escogerán a Fico.

SEMANA: Alejandro Gaviria.

R. H.: un científico, un filósofo, pero la gente no entiende lo que habla.