Nación
Plan pistola: ¿por qué en Atlántico, Magdalena y La Guajira no se han reportado hostigamientos? Expertos opinan
El plan pistola se está adelantando en las zonas de retaguardia estratégica del Clan del Golfo.
En lo que va de este año, un total de 36 uniformados adscritos a la Policía Nacional han fallecido mientras desempeñaban sus funciones en el país. De esa cifra, 11 han sido asesinados desde el pasado 22 de junio, cuando inició el tétrico y macabro plan pistola, perpetrado por el Clan del Golfo en contra de los miembros de esa institución.
Hasta el momento, los departamentos que se encuentran en máxima alerta son Chocó, Antioquia, Córdoba, Sucre, Bolívar y Cesar. En el Cauca también se han registrado momentos de tensión y angustia, específicamente en el municipio de El Tambo, donde en los últimos días el sonido de las balas mantuvo atemorizada a la población.
En lo que respecta a la región Caribe, llama la atención que los únicos territorios en donde no se han reportado hostigamientos contra la fuerza pública son el Atlántico, Magdalena y La Guajira.
Según una fuente de la Policía Nacional consultada por SEMANA, una explicación a ese panorama está relacionada “por el nivel de influencia y de grupos delincuenciales que tienen subcontratados”.
En palabras más sencillas, hay departamentos en los que el Clan del Golfo tiene mayor presencia militar, en comparación con otras zonas del país, donde delinquen y operan a través de pequeños grupos contratados por ellos.
Luis Fernando Trejos, profesor investigador de la Universidad del Norte en Barranquilla, habló con SEMANA y sostuvo que “el plan pistola se está adelantando en las zonas de retaguardia estratégica de ellos (Clan del Golfo) y en las mismas zonas donde se sintió con mayor fuerza el paro armado”. Además, puntualizó que quizá la violencia se ha acrecentado en los departamentos como Sucre, Córdoba, Bolívar y César, porque son territorios con mayor incidencia de estas estructuras criminales.
“No quiere decir que en el Atlántico, en el Magdalena o en La Guajira no tengan presencia. Pero allá la presencia es tercerizada. Es una presencia subcontratada”, añadió.
Una lectura similar comparte Gabriel Orozco, director del centro colombiano de políticas públicas y gobierno en la Simón Bolívar.
Orozco también enfatiza y reitera en que el accionar del Clan del Golfo es proporcional a la cantidad de estructuras que hacen presencia, explícitamente, en unos departamentos más que otros. Pero aclara que “aunque en el Atlántico, Magdalena y La Guajira no se evidencia un plan pistola abiertamente, el número de asesinatos selectivos en estos departamentos ha aumentado”. Explicó que una de las causas también está relacionada con el control de disputas por el acceso a las rutas del microtráfico.
No obstante, el escenario político también es un factor influyente en las manifestaciones violentas contra la fuerza pública. “En estos momentos hay una coyuntura, debido, por un lado, a la presión que han ejercido las autoridades, la Policía y las agencias antinarcóticos. Y por otro lado, es muy posible que los grupos criminales, concretamente el Clan del Golfo, estén viendo en la nueva dinámica política una especie de mayor llamado de atención y búsqueda de posicionamiento para un futuro posible acuerdo de sometimiento y de buscar una vía de salida a su actividad delictiva”, aseveró Gabriel Orozco.