Arranca la intensa campaña del plebiscito por la paz

Los presidentes del Senado y la Cámara, Mauricio Lizcano y Miguel Pinto, respectivamente, madrugarán este martes a la Casa de Nariño. Le llevarán al presidente Juan Manuel Santos el concepto favorable del Congreso a la convocatoria del plebiscito para refrendar los acuerdos de paz de La Habana.

Será más que un gesto simbólico. En ese momento se dará vía libre a unas campañas políticas sui generis que durarán 32 días, en la que a su término los colombianos adoptarán la decisión más importante en varias décadas. No se elegirán gobernantes, el país se debatirá entre dos opciones: el Sí o el No al acuerdo final para la terminación del conflicto, sellado el 24 de agosto por el Gobierno y la guerrilla de las FARC.

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Tan pronto como el presidente Santos reciba la aprobación del Congreso, tendrá vía libre para convocar el plebiscito. Para ello, firmará el decreto, que también irá acompañado de las firma de los ministros del gabinete, e incluso del vicepresidente Germán Vargas Lleras, quien el fin de semana se la jugó por el Sí, aunque hizo observaciones al capítulo de justicia de los acuerdos.

El presidente Santos, la semana pasada, tan pronto como se dio por cerrada la negociación de La Habana, le notificó a los colombianos que el domingo 2 de octubre será el día para acudir a las urnas. Por eso la convocatoria al plebiscito no será una novedad. La expectativa se concentra en cuál será la pregunta que se pondrá a consideración de los colombianos. Esta será anunciada al mismo momento de firmar el decreto.

Durante el debate del plebiscito, el senador Álvaro Uribe, el jefe del Centro Democrático, le recordó al presidente Santos que en aras del equilibrio y la imparcialidad no se puede redactar una pregunta inducida, y que la palabra “paz” no debe estar incluida en ese texto que se someterá a consideración de los ciudadanos.

Según el ministro del Interior, Juan Fernando Cristo, la pregunta no se saldrá del contendido de los acuerdos suscritos en La Habana, mientras que el senador y negociador Roy Barreras aseguró que la pregunta podría ser “¿apoya el Acuerdo Final para la terminación del conflicto y la construcción de una paz estable y duradera?” En otras palabras, el mismo título del documento de 297 páginas que desde hace varios días fue publicado tanto en páginas oficiales como en medios de comunicación.

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Una vez se conozca la pregunta, dijo el ministro Cristo, arrancarán formalmente las campañas por el Sí y por el No, por lo que comenzarán los 30 días de pedagogía de los acuerdos y de divulgación del texto de los mismos, que correrán desde el día posterior de la firma del decreto.

Y para regular la campaña, el Consejo Nacional Electoral expedirá la reglamentación, o las reglas de juego electorales. Dicha reglamentación garantizará el cumplimiento de los principios de la administración pública y la participación en condiciones de igualdad, equidad, proporcionalidad e imparcialidad, de las campañas por el Sí o por el No, para lo cual regulará el acceso a los medios de comunicación y demás disposiciones necesarias.

Salvo prohibición de la Constitución Política, los servidores públicos que deseen hacer campaña a favor o en contra podrán debatir, deliberar y expresar pública y libremente sus opiniones o posiciones frente al plebiscito. Queda prohibido utilizar bienes del Estado o recursos del Tesoro Público, distintos de aquellos que se ofrezcan en igualdad de condiciones a todos los servidores.

Antes del inicio formal de esta campaña, Uribe y el Centro Democrático afirmaron que la campaña es desigual, e incluso calificaron de trampa al plebiscito.

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Se quejan de que la Cámara de Representantes, por orden gubernamental, eliminó la disposición aprobada por el Senado en el sentido de que el Estado concurriría con publicidad tanto para la campaña del Sí como para la del No, y que a cambio, el Gobierno despliega toda su maquinaria y su aparato a favor del Sí. “Entregan una casa y dicen a quién recibe las llaves de votar por el Sí”, aseguró en el Senado. “No tenemos más armas que la palabra y caminar por las calles de Colombia”, advirtió.

En este mes se anticipan numerosos debates entre promotores del Sí y el No en distintos escenarios, a los cuales Uribe dijo que no iba rehusar.

Pero el que se advierte más trascendental es el que tendrá lugar en el Senado. Por propuesta de los senadores de La U Jimmy Chamorro y Armando Benedetti, la próxima semana los partidos y los negociadores debatirán alrededor del contenido de los acuerdos de La Habana.

Aunque Uribe está convencido de que habrá “plebiscito armado”, pues las FARC no habrán entregado las armas, el senador del Polo Iván Cepeda asegura que, por el contrario, la campaña trascurrirá sin armas, pues el jefe de las FARC, Timoleón Jiménez, aseguró que cumplirá el cese al fuego bilateral y definitivo que arrancó desde este lunes.

Por eso, Cepeda invitó a las partes a que el debate sea transparente, sereno y respetuoso sobre el contenido de los acuerdos. “No más mentiras, no más tergiversaciones, ni manipulación de miedos de los ciudadanos”, reclamó.

Otro senador del Polo, Jorge Robledo, aclaró que el plebiscito no será una consulta a favor del Gobierno, y que mucho menos por votar Sí al plebiscito se le esté dando respaldo al presidente Santos. “En el Polo estamos en el Sí al plebiscito y el No al presidente Santos”.

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Claudia López, senadora de la Alianza Verde, pidió juego limpio en la campaña, y señaló al uribismo de estar actuando “de manera sucia, mentirosa y engañosa, desde sus cuentas de redes sociales, tergiversan mis posiciones a favor de la paz”.

Carlos Fernando Galán, senador de Cambio Radical, aclaró que el partido del vicepresidente Germán Vargas Lleras, desde el minuto uno, ha estado firme respaldando el proceso de paz, cómo lo hará ahora en el plebiscito. Para la muestra, recordó el voto favorable a todas las iniciativas de paz aprobadas por el actual Congreso. Repitió tres veces el apoyo al Sí en el plebiscito, pero agregó que en esta campaña no guardarían silencio ante las inquietudes que generen los acuerdos de La Habana.

Por eso, este martes el presidente de la República, con un decreto, marcará la largada de la campaña por el plebiscito, un mes en los que un país polarizado se debatirá entre dos opciones. La campaña irá hasta el primero de octubre, 24 horas antes de la votación más decisiva de los colombianos en las últimas décadas.