Los audios de la discordia entre Néstor Humberto Martínez y Daniel Coronell

Dos de las voces más poderosas del país arrancaron el año con un duro enfrentamiento. El columnista de SEMANA  Daniel Coronell puso en jaque al fiscal general, Néstor Humberto Martínez, al afirmar que lo mencionaban en los famosos audios de la DEA que desataron el escándalo del cartel de la toga. En realidad eso era lo de menos. Lo más delicado vino cuando el periodista afirmó que el fiscal no había enviado las grabaciones completas “a la Corte Suprema de Justicia, que procesa a los políticos involucrados, ni a la Comisión de Acusación de la Cámara, que procesa a los magistrados y que tiene competencia sobre el propio fiscal general”. Y algo más: Coronell agregó que entre los fragmentos omitidos estaba el que hacía mención a Martínez Neira.

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La acusación era delicada y el fiscal reaccionó con prontitud y vehemencia. Primero que todo expidió un comunicado y luego grabó un corto video. En este explicó que el 15 de agosto de 2017 obtuvo del gobierno de Estados Unidos las grabaciones que la DEA hizo en Miami al entonces fiscal anticorrupción Gustavo Moreno, cuando este recibía una coima del exgobernador Alejandro Lyons, quien actuaba para ese momento como colaborador de esa agencia del Departamento de Justicia.

El fiscal general, Néstor Humberto Martínez, remitió a la Corte Suprema una selección de los audios de la DEA, incluidos los fragmentos en que lo mencionan.

Martínez señaló que el fiscal del caso seleccionó 13 fragmentos relevantes que remitieron con sus respectivas transcripciones a la Corte Suprema de Justicia. Esto porque allí los interlocutores mencionaban magistrados y congresistas, aforados que la Fiscalía no puede investigar. “Dentro de esos audios y esas transliteraciones estaba incluida la que se refería al fiscal general de la nación”, dijo Martínez, quien anunció que pediría rectificación pues no era cierto que hubiese “fragmento perdido” en relación con los audios de la DEA.

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A partir de ese momento se inició un intercambio de trinos y videos entre Martínez y Coronell, y cada cual reafirmó lo suyo. El columnista aseguró que el fiscal estaba tergiversando los términos exactos de su cuestionamiento e insistió en que Martínez no envió todo el compendio de audios y que la Fiscalía no remitió los fragmentos seleccionados a la Comisión de Acusación. El fiscal, por su parte, explicó que el acuerdo de cooperación judicial con Estados Unidos impide descubrir totalmente la evidencia en este y en todos los casos en que los elementos forman parte de un proceso federal activo.

Abogados que han tratado de acceder al cúmulo íntegro de los audios han cuestionado esa limitación legal, y los jueces la han confirmado al indicar que la Fiscalía está en lo correcto. Así mismo, con ese entendido la Corte Suprema de Justicia recibió los 13 fragmentos seleccionados y ambas entidades acordaron que los magistrados remitirían la evidencia a la Comisión de Acusación de la Cámara de Representantes. Cumplieron ese trámite al día siguiente, cuando remitieron el material que la Fiscalía hizo llegar al Palacio de Justicia. “Los dos audios compartidos por los Estados Unidos que aluden al fiscal general reposan en la Corte Suprema de Justicia desde el 15 de agosto de 2017 y en la Comisión de Acusaciones desde el 16 de agosto de 2017”, dijo Martínez en el último de una ráfaga de nueve trinos con los que documentó el trámite que le dio a los audios de la DEA.

En las próximas semanas la Comisión de Acusación dará a conocer el pliego de cargos contra el exmagistrado José Leonidas Bustos, y allí el país sabrá si compulsa copias contra otras personalidades. El periodista Daniel Coronell ratificó todo lo que ha escrito y aseguró que seguirá investigando sobre los fragmentos no compulsados.

Luego de esto la polémica tuvo un giro importante. Coronell aseguró que la evidencia completa abarca cerca de 100 páginas de transcripciones y que los fragmentos seleccionados por la Fiscalía cubren apenas 15 páginas y dejan por fuera amplia información en la que aparecen mencionadas personalidades de alto calibre. Tras esto Blu Radio divulgó un fragmento de audio que forma parte del material aportado por la DEA y no está entre el material compulsado a la Corte Suprema.  En ese aparte Leonardo Pinilla –el socio de Gustavo Moreno, a través del cual Lyons llegó al entonces fiscal anticorrupción– menciona al exvicepresidente Germán Vargas Lleras. De hecho, el tema es tratado en su columna del domingo en el que profundiza su investigación. 

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Fuentes de la Fiscalía explicaron a SEMANA que no remitieron ese fragmento porque el vicepresidente no es un aforado constitucional. También hay que tener en cuenta que no basta con que un delincuente mencione a una persona para que investiguen a esta. Los fiscales y magistrados requieren indicios relevantes y superar verificaciones preliminares para proceder de tal manera. Solo si superan esas exigencias mínimas pueden abrir una investigación formal o realizar una compulsa para que la autoridad competente lo haga.

De otra parte, el magistrado Luis Antonio Hernández, presidente de la Sala Penal de la Corte Suprema de Justicia, explicó que allí hicieron una investigación amplia que incluyó escuchar a Moreno y a Pinilla, y este último señaló que muchas de las afirmaciones que hizo ante Lyons (cuando era secretamente grabado por la DEA) no tenían fundamento alguno, sino que estaría simplemente cañando para impresionar a un potencial cliente.

Con el elemento inicial de los audios de la DEA, la corte abrió investigación y procesó a varios congresistas como Álvaro Ashton, Musa Besaile y Hernán Andrade, entre otros. Además compulsó copias contra los exmagistrados Francisco Ricaurte, Gustavo Malo y José Leonidas Bustos. El magistrado finalmente dejó en claro que las conclusiones de la corte son independientes de las que pueda tener la Comisión de Acusación: “Así como nosotros hicimos un estudio de ese material contrastado con labores investigativas propias, la Comisión también tiene la potestad de investigar y procesar a los aforados que considere”, dijo el magistrado Hernández.

Los audios de la DEA detonaron el escándalo del cartel de la toga. Allí quedó en evidencia cómo el fiscal Gustavo Moreno y su socio, Leonardo Pinilla, hacían parte de una telaraña de corrupción al más alto nivel de la justicia. Ambos salieron extraditados.

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De momento el balón quedó en la cancha de la Comisión de Acusación. Esta corporación ya formuló pliego de cargos contra el suspendido magistrado Gustavo Malo quien, ya vencido en el antejuicio político, ahora deberá enfrentar un proceso penal con alto riesgo de terminar tras las rejas.

Sin embargo, la Comisión de Acusación deberá adoptar la decisión más trascendental, programada para las próximas semanas: formular el pliego de cargos contra el expresidente de la Corte Suprema de Justicia, el exmagistrado José Leonidas Bustos, a quien señalan de ser protagonista clave del cartel de la toga, según los testimonios ratificados por su pupilo Gustavo Moreno, y otras evidencias.

Cuando la Comisión destape sus conclusiones al respecto, el país conocerá también otras imputaciones contra varias personalidades implicadas en el cartel de la toga. Ante el gran revuelo de esta semana cuando aparecieron fragmentos desconocidos de los audios de la DEA, el representante Edward Rodríguez, investigador del caso del cartel de la toga en la Comisión le confirmó a SEMANA que solicitará a la Fiscalía poner en conocimiento de esta instancia fragmentos que siguen en reserva. Por su parte Daniel Coronell anunció que seguirá hablando del tema. El debate por los audios de la DEA, evidentemente, aún está muy lejos de terminar.