Por el grave hacinamiento carcelario en Bogotá, Gobierno le cedió un predio a la Alcaldía para construir nueva cárcel

La Nación le cedió al Distrito un lote de tres hectáreas para construir una nueva cárcel para Bogotá, sería la segunda cárcel distrital de la capital del país. El lugar queda ubicado en una zona aledaña a la cárcel La Picota, en la localidad de Tunjuelito, en el sur de Bogotá.

El ministro de Justicia, Néstor Osuna, explicó que esto “es el compromiso conjunto de luchar contra la impunidad, la inseguridad y comprometernos en la resocialización con un castigo útil para la sociedad, pagado con condiciones dignas que le reporten beneficios a la sociedad en cuanto a disminución de reincidencia y criminalidad”.

El Gobierno destacó que la sesión de ese lote demuestra la armonía con la Alcaldía de Bogotá y con el entendimiento de los alcaldes municipales en el país. “Necesitamos ampliar cupos y estrategias para poder lograr esos cometidos, de tener una política penitenciaria más útil a la sociedad para poder superar el estado de cosas inconstitucionales que la Corte Constitucional declaró hace algunos años”, manifestó Osuna.

El lote de la Nación se cedió con una firma del coronel Daniel Gutiérrez, director del Inpec; y el alcalde de Bogotá, Carlos Fernando Galán. Este último manifestó que este proceso llevaba tres años buscando la fórmula para ampliar la capacidad carcelaria en la ciudad.

El alcalde Galán calificó la cesión del predio como “un avance muy importante que va a dar Bogotá en el marco del cumplimiento que ha estipulado la Corte Constitucional frente al sistema carcelario. La cárcel Distrital ha tenido unas particularidades y esta es la oportunidad para avanzar en un centro de resocialización”.

Con el lote en la mano, la Alcaldía de Bogotá espera avanzar este año en la contratación de estudios y diseños para empezar la construcción de la cárcel en 2025, pero el objetivo principal es que en los próximos tres años ya quede completamente terminada la nueva prisión.

“Este paso que se da hoy va a ser muy importante para dar una respuesta a esa inquietud de esa situación que hay de privados de la libertad en Bogotá, que generan muchos riesgos, pero también afectan los derechos de los detenidos”, indicó Galán.

En medio de la cesión del predio, el ministro de Justicia, Néstor Osuna, reconoció que las cuatro cárceles que tiene la capital del país - La Picota, Modelo, Distrital y Buen Pastor - hay una insuficiencia en el sistema que está generando riesgos para la capacidad carcelaria, la resocialización y combatir la inseguridad.

Este nuevo centro penitenciario tendría una capacidad para albergar entre 2.000 a 2.500 presos, ayudando a enfrentar con esos cupos la grave crisis de hacinamiento que hay en las cárceles de la ciudad, en los Centros de Traslado y Protección, y en las estaciones de Policía, donde se ha evidenciado una grave crisis humanitaria para quienes permanecen detenidos en esas zonas.

El Distrito ha venido alertando que localidades como Kennedy, Bosa y Usaquén son de las más afectadas por esa problemática, pero con este nuevo proyecto se amplían los cupos carcelarios y se fortalecen los programas de resocialización con educación y capacitación laboral a los presos para que salgan preparados cuando retornen a la sociedad.

La puja de más de tres años entre el Gobierno y la Alcaldía de Bogotá por la cesión de ese predio, por fin llegó a su fin con la entrega del lote, pero ahora la gran expectativa es que para el año 2028 ese proyecto ya este hecho realidad.