¿Por qué Deyanira Gómez podría ser el eslabón perdido del origen del caso contra Uribe?

Deyanira Gómez es quizá una de las piezas clave del caso que enfrenta el expresidente Álvaro Uribe y que lo llevó a estar preso por orden de la Sala de Instrucción de la Corte Suprema de Justicia. Otros la llaman el eslabón perdido.

Ella fue pareja sentimental de Juan Guillermo Monsalve, el testigo estrella contra el exmandatario. Su camino desde 2006 se ha cruzado directa o indirectamente con las Farc, según inteligencia militar; Juan Manuel Santos, como ministro de Defensa; el testigo Monsalve; el exmagistrado José Luis Barceló; el senador Iván Cepeda, y el Coronel Juan Pablo Prado Torres.

Curiosamente, todos están relacionados jurídica o políticamente con el expresidente Uribe y el caso que enfrenta ante la justicia por supuesta manipulación de testigos y fraude procesal.

Deyanira ha tenido un papel activo en el proceso contra Uribe. Ella terminó grabando al abogado Diego Cadena (apoderado del expresidente) con autorización del entonces magistrado Barceló de la Corte. Por lo menos en las escrituras es dueña, con la madre de Monsalve, de la polémica finca La Veranera, en proceso de extinción de dominio, avaluada en unos $ 560 millones.

Deyanira salió del país con la ayuda de José Miguel Vivanco de la organización no gubernamental dedicada a la investigación, defensa y promoción de los derechos humanos Human Rights Watch (HRW), entre otros, al denunciar amenazas. Y ahora acaba de ser reconocida provisionalmente como víctima dentro del expediente Uribe.

Hasta ahora, Deyanira era vista simplemente como la expareja de Monsalve, condenado a 40 años de cárcel por secuestro extorsivo, concierto para delinquir y porte ilegal de armas. Pero la historia de esta médica de profesión dio un giro inesperado. Más de 15 informes de inteligencia y contrainteligencia militar realizados entre 2006 y 2008 la enredan con las Farc.

Los documentos permanecieron bajo estricta reserva y en ellos se asegura que Deyanira habría sido “médica de las Farc”, que supuestamente visitaba los campamentos de los terroristas, que atendía heridos y toda clase de enfermos, y que habría intentado infiltrarse en el Ejército en el área médica en Fusagasugá. Igualmente, habría intentado -aparentemente- infiltrar a un hermano en la Fuerza Aérea.

Pero tal vez lo que más inquietó en ese momento a las autoridades fue su relación de pareja con Elver Penagos Tavera, alias ‘Arley’ o ‘Pitbull’, un guerrillero señalado de ser el cabecilla del frente 21 de las Farc. Hace 15 años, Penagos ya tenía en su contra dos órdenes de captura por homicidio agravado, terrorismo y fabricación, tráfico, y porte ilegal de armas.

A finales de 2006, cuando fue capturado, Deyanira estaba junto a él y con su padre, Luis Hernando. El primero en dar a conocer la versión sobre la expareja de Deyanira perteneciente a las Farc fue su anterior abogado, Héctor Romero.

¿Cómo fue que esta mujer terminó uniéndose sentimentalmente a Monsalve, el principal testigo contra Uribe?, ¿cómo surgió su relación con el congresista Iván Cepeda, clave en el proceso de paz entre Santos y las Farc en La Habana, y quien la ha defendido públicamente?, ¿qué papel jugó Deyanira frente al magistrado Barceló y el coronel Juan Pablo Prado Torres?

Según Deyanira, ella se conoció con Monsalve en 2013. Entonces, ya había sido objeto de un seguimiento detallado por parte de inteligencia militar, por lo menos durante dos años seguidos y el primer testimonio de Monsalve ya había sido visibilizado por Cepeda en el Congreso.

“Yo lo conozco en 2013 (a Monsalve). A pesar de que estaba detenido, era un ser humano como cualquier otro. Comenzamos a hablar. Entablamos una amistad. Después decidimos cambiar la relación (...) Yo no me enamoré de un delincuente. Yo me enamoré de un ser humano. No fue una relación pasajera. No fue una relación de un día”, dijo Deyanira en Semana en vivo el año pasado.

Juan Manuel Santos, el mayor enemigo político de Álvaro Uribe, llegó en julio de 2006 al Ministerio de Defensa en el gobierno Uribe. Según informes de inteligencia, en noviembre de ese año empezaron los seguimientos militares a Deyanira, a quien identificaban como alias ‘La Chiqui’, y terminaron en 2008. Santos renunció en mayo de 2009. No se sabe si estuvo al tanto de esa operación o no.

En los documentos también aparece seguido por contrainteligencia y relacionado con ella, el coronel, en esa época con grado de capitán, Juan Pablo Prado Torres. Este oficial estuvo en inteligencia, fue protagonista en el escándalo de Andrómeda y poco tiempo después negoció una propiedad con Deyanira que al parecer terminó siendo el inmueble donde funcionaba el taller del padre de la misma, Luis Hernando Gómez.

Prado salió de la institución en medio de las denuncias por los llamados perfilamientos por parte del Ejército. Si hay algo que no se entiende es por qué nunca fueron judicializados dichos informes de inteligencia tan contundentes. ¿Serán judicializados ahora por la Fiscalía?

En cuanto al exmagistrado Barceló, SEMANA reveló un documento por medio del cual se pudo comprobar que fue él quien autorizó a Deyanira Gómez para que grabara al abogado Cadena.

“Con fundamento en lo dispuesto en el artículo 243 de la Ley 600 que rige este asunto, se dispone coordinar con el Cuerpo Técnico de Investigaciones de la Fiscalía para que, con la colaboración de la señora Deyanira Gómez, se registre en audio el encuentro que esta tiene programado con el abogado Diego Javier Cadena, el día de mañana en los alrededores del Palacio de Justicia”, dice el documento firmado por José Luis Barceló, Fernando Castro y Luis Hernández el 4 de abril de 2018. Al día siguiente, Deyanira cumplió la misión que le puso la Corte.

Deyanira también es protagonista en el polémico caso de la finca La Veranera. Su nombre al lado del de la madre de Monsalve apareció en las escrituras pocos meses después de que este declarara contra el expresidente Álvaro Uribe en la Corte Suprema. Aunque asegura que la compró con dinero producto de su modesto trabajo como médica y con una herencia, esta transacción no es clara.

Más aún cuando decenas de chats demuestran que el testigo Monsalve fue quien dirigió el proceso de escrituración desde la cárcel, utilizando el nombre falso de Tavo Molina. ¿Cuál es la verdad de la finca La Veranera? ¿Está relacionada con el caso contra Uribe?

Por supuestas amenazas, Deyanira fue sacada del país y permanece protegida, después de llevar una relación sentimental por años con un comandante de las Farc y luego haber sido la esposa de Monsalve, hijo del mayordomo de Guacharacas, la finca que por años fue de los Uribe. Monsalve ha dicho que es paramilitar, pero ni Justicia y Paz ni la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) lo reconocieron como tal.

A raíz del pasado de esta mujer, el expresidente Uribe, en su cuenta en Twitter, publicó el pasado 31 de marzo un artículo en el que señaló: “Deyanira, instrumento de Santos-Barceló-Farc”. De esa manera, abrió el interrogante sobre un supuesto complot en su contra que tendría posiblemente a varios protagonistas. Lo cierto hoy es que hay muchos interrogantes al respecto y sobre esta mujer.

¿En qué momento se juntaron todos estos personajes en el proceso contra Uribe, el mayor enemigo de las Farc y el presidente que más golpes militares les propinó? El país hasta ahora empieza a conocer la historia de esta mujer, protagonista de primera línea en la investigación contra Uribe. ¿Víctima o victimaria?