NACIÓN
¿Por qué lo mataron? Timochenko revela quién ordenó el crimen de Álvaro Gómez
El jefe del partido Farc indicó que el crimen no tuvo razones personales, sino políticas.
Luego de que la JEP asumiera la competencia en la investigación por el homicidio del líder conservador Álvaro Gómez Hurtado en 1995, y la confesión de exmiembros del secretariado de las Farc, el jefe del partido de la desmovilizada guerrilla, Rodrigo Londoño, reveló las razones del grupo para ejecutar el crimen.
“La responsabilidad es del antiguo secretariado”, dijo Timochenko, quien fue citado por la Fiscalía para declarar junto a Carlos Antonio Lozada, lo que calificó como algo “contrario al acuerdo de paz”.
En entrevista con el diario El Tiempo, explicó que el grupo tardó más de dos décadas en aceptar su responsabilidad en el magnicidio de Gómez Hurtado porque “los hechos de la guerrilla no se conocían inmediatamente”, por lo que tuvieron que reconstruir los hechos y hace un par de meses decidieron confesar la verdad.
“Hace unos meses y teniendo los resultados de esa investigación y reconstrucción de nuestra propia historia, se decidió que asumiríamos la responsabilidad por los errores cometidos y, para ello, lo primero es reconocer verdad”, dijo.
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Londoño también aseveró que la decisión de contar su versión del homicidio “ha sido un proceso en el que hemos venido reflexionando colectivamente y que nos ha sensibilizado cada vez más. Nosotros tenemos un compromiso con las víctimas y lo estamos cumpliendo”.
Aseguró que como colectividad política seguirán participando en los procesos que adelanta la JEP “con víctimas, con otros actores del conflicto y seguiremos aportando verdad al país para reconstruir la historia trágica, pero también para repensar un país con justicia social y garantías para vida digna”.
Luego de que Carlos Antonio Lozada se atribuyera la autoría del hecho, han surgido cuestionamientos sobre de dónde vino realmente la orden. Según el actual senador, fue el Mono Jojoy quien lo decidió, pero Timochenko reconoció que “las decisiones de esta índole las tomaba el secretariado. Esas órdenes no son individuales, ni producto de un deseo personal”.
“Es importante que el país sepa que se hacían evaluaciones políticas y militares antes de establecer un objetivo (…) Otra cosa es la transmisión de la orden, en ese sentido es muy militar y quien fuera el comandante de la zona era el encargado de asignar esas funciones o tareas a sus subalternos”, reconoció.
Además, dijo que, aunque Carlos Antonio esté asumiendo ahora la responsabilidad por el “operativo como comandante”, insistió en que ninguna decisión de ese tipo fue personal y que, de hecho, el crimen tuvo “razones políticas, no razones personales. La responsabilidad es del antiguo secretariado”.
Así mismo, Rodrigo Londoño respondió en la entrevista si el cartel del norte del Valle tuvo alguna participación en el magnicidio.
“Siempre se ha especulado sobre el tema, pero eso no es cierto (…) Las dudas son válidas, pero dudemos también de quien con la duda quiere negar la posibilidad del acceso a la verdad”, expuso.
El desmovilizado aprovechó para pedir un “perdón sincero a la familia, entendemos sus dudas y los invitamos a encontrarnos para dialogar” y extendió esa solicitud de perdón “a todos y todas las afectadas y al país entero”.
Sin embargo, criticó a la justicia y los avances en la investigación durante 25 años. “Nosotros somos responsables del asesinato, el Estado es responsable de lo que ocurrió a partir de allí y de las víctimas judiciales”.
Finalmente, Timochenko se refirió a la citación de la Fiscalía para que, junto a Carlos Antonio Lozada, declare en la investigación de los hechos, calificando el llamado del ente acusador como “contrario al acuerdo de paz”.
“Recibimos la citación de la Fiscalía con tranquilidad. Creo que el fiscal Barbosa está instrumentalizando nuevamente la Fiscalía para servir a los intereses del Gobierno Duque”, criticó.
Dijo también que “semejante citación es absolutamente contraria al acuerdo, a los actos legislativos, leyes y sentencias de la Corte Constitucional. Constituye una flagrante violación de los más elementales principios jurídicos y de procedimiento. Todo el mundo sabe que los procesos judiciales deben cumplirse ante el funcionario competente. Y ese funcionario es la JEP”.