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Juan Vallejo y Gabriel Vallejo
Juan Vallejo y Gabriel Vallejo | Foto: Fotomontaje: SEMANA.

POLÍTICA

Por una patada que le propinaron, el asesino del policía Juan Vallejo quedó en libertad

SEMANA conoció que cuando capturaron a Sebastián Medina Jaimes, asesino de un policía en Bogotá, un uniformado le lanzó una patada. Un juez consideró que le violaron los derechos humanos y lo dejó en libertad. La decisión generó rechazo.

11 de octubre de 2021

La familia del congresista Gabriel Jaime Vallejo no sale del asombro. Sebastián Medina Jaimes, uno de los hombres que participó en el asesinato de su hermano Juan Vallejo, el viernes en horas de la tarde, en la Avenida Circunvalación de Bogotá, fue capturado, pero según el juez 30 penal municipal de la capital se le violaron los derechos humanos durante su detención y por tanto la orden de detención es ilegal.

Aunque el capturado quedó herido tras el cruce de disparos y permanece en una unidad de cuidados intensivos en una clínica en Bogotá, no está capturado. Y si estuviera en óptimas condiciones, estaría libre por las calles de la ciudad.

De acuerdo con lo que le informaron preliminarmente al congresista, en el momento de la captura al homicida de su hermano le propinaron una patada en el rostro, un hecho que, según el juez que lleva el caso, es motivo suficiente para determinar que le violaron los derechos humanos.

“Es muy triste”, resumió el congresista. “Es muy doloroso, es el pan de cada día, el día a día de Colombia. No entiendo a algunos jueces, no sé qué están pensando, es parte de la explicación de estos niveles de impunidad en el país”, agregó el representante, quien siempre ha sido respetuoso de la justicia. “Es una mezcla de tantas emociones que se me revuelcan”, añadió.

El subintendente Juan Vallejo llegó hasta los cerros orientales de Bogotá para atender una diligencia con un fiscal que pretendía investigar constantes atracos en esta zona de la ciudad y fue sorprendido por un grupo de atracadores que empezó a disparar y le causaron la muerte. “Duele el alma, duele el corazón, duele la patria. Descansa en paz, hermano mío”, dijo Vallejo tan pronto conoció la noticia.

Este hecho le ha generado a Vallejo distintas reflexiones sobre la realidad de la delincuencia y la inseguridad en el país. “A este país no le cabe una ley más. Ahora viene una reforma a la Policía que creemos será una herramienta muy importante para fortalecer a la institución, pero se requiere una reforma estructural a la justicia colombiana”.

La ausencia de justicia –cree Vallejo– es el principal problema de este país. “Creemos que es el narcotráfico, la corrupción, la falta de empleo… hoy la falta de justicia está amenazando a la democracia colombiana. Aquí estamos llegando a unos niveles de anarquía, donde todo el mundo hace lo que se le da la gana: desde matar hasta robar. Esa es la realidad”, dijo. Mientras tanto, Óscar Iván Zuluaga, precandidato presidencial por el Centro Democrático, aseguró: “Basta de esta desconexión entre la seguridad y la Justicia. Con la impunidad crece reincidencia y el miedo en la población. Urge una reforma para impedir que los delincuentes se salgan con la suya una y otra vez”.

Este domingo, en medio de una multitudinaria asistencia, Juan Vallejo fue despedido con honores por parte de la institución. “Era un ser amoroso, noble, espiritual, un hombre de valores inmensos”, lo recordó su familia. “Mi hermano se sentía absolutamente orgulloso de ser policía. Cuando él iba al Congreso, lo recuerdo cuando llegaba con su chaqueta. Era un policía excepcional, amaba esa carrera”, recordó Vallejo en entrevista con Vicky Dávila, en SEMANA.

En mayo pasado, en medio de las protestas en Colombia, el uniformado estaba agotado físicamente, llevaba un mes sin descansar y aún así logró desarticular una de las bandas más peligrosas del país: Los Pascuales. “Él, por primera vez, me expresa preocupación por su vida y se logra filtrar en una interceptación de la Fiscalía de que en retaliación le habían puesto precio a su cabeza. Él sintió mucha angustia, él fue trasladado de Usaquén a otro sector de Bogotá”, detalló el representante.

El fiscal que acompañaba a Vallejo en el momento del asesinato y quien resultó herido, ya fue dado de alta y acompañó al subintendente en su despedida.