Otra vez, los puentes peatonales en Bogotá, víctimas de la delincuencia
Si bien es cierto que los puentes peatonales en Bogotá han sido víctimas de la delincuencia, la Personería alertó que más del 50 % de puentes peatonales y vehiculares están en mal estado. Imagen de referencia. | Foto: Semana - Cesar Flechas

Bogotá

Preocupante: más del 50 % de puentes peatonales y vehiculares en Bogotá están en mal estado

Así lo advirtió la Personería de Bogotá, al mismo tiempo que le pidió a la administración distrital priorizar intervenciones.

31 de agosto de 2022

La Personería de Bogotá lanzó una fuerte alerta sobre el mal estado de muchos de los puentes peatonales y vehiculares en la ciudad, revelando que más del 50 % están en regular o mal estado.

El pronunciamiento se conoce luego de la revisión mediante un ejercicio de vigilancia y control que hizo el órgano al inventario de 448 puentes peatonales y 608 vehiculares que reporta el Instituto de Desarrollo Urbano (IDU), donde se evidenció que 618 se encuentran en mal y regular estado o no está actualizado, lo que equivale a un 58,85 % del total.

El personero destacó la necesidad de priorizar la intervención de los puentes que presentan fallas estructurales, agrietamientos, vandalismo, algunas barandas y pasamanos que presentan óxido, situaciones que ponen en riesgo la seguridad y la vida de quienes se movilizan en la ciudad.

De igual manera, Malagón se refirió a la importancia de instalar señales en puentes vehiculares que indiquen que la altura máxima es de 5,5 metros, para evitar accidentes como los registrados en la Autopista Norte con 116, debido a que algunos automotores superaban la altura permitida.

Encontramos que 127 puentes no cuentan con la altura reglamentaria de 5,5 metros, lo que requiere reforzar las señales y tomar otras medidas para evitar cualquier accidente, pues no a de ser que pase un vehículo con una altura superior”, comentó Pinilla Malagón.

También explicó que se solicitó a las autoridades distritales actualizar la información del inventario de puentes vehiculares y peatonales en la capital principalmente en relación con 46 puentes vehiculares que no cuentan con información del estado de servicio.

“Como garante de los derechos de los Bogotanos, la Personería reitera la importancia de realizar el respectivo mantenimiento a los puentes para que los ciudadanos tengan calidad de vida, mejoren la movilidad y accedan al transporte público en condiciones de seguridad y accesibilidad”, agregó el funcionario.

Recientemente, el IDU afirmó que entre el primero de enero y el 30 de junio de este año han sido vandalizados 32 puentes peatonales de Bogotá. La atención a estas emergencias le ha costado a la ciudad más de 96 millones de pesos, a los que se suma el tiempo y la logística para atender cada caso en el menor tiempo posible, inicialmente con soluciones temporales para asegurar el paso a los peatones, mientras se hace el arreglo definitivo de cada puente, cuyo tiempo puede tomar hasta 24 horas, dependiendo de la disponibilidad de materiales, factores climáticos y demás elementos que intervienen en el proceso.

Los puentes más afectados los de la NQS entre las localidades de Mártires, Puente Aranda y Teusaquillo, específicamente en los puentes denominados: Estación Comuneros, calle 6 con NQS costado oriental, calle 6 con NQS costado occidental y CAD por el costado sur.

La inversión total estimada para este año en el cambio de pisos en puentes peatonales asciende a 3.872 millones de pesos, de los cuales ya se ejecutaron de 1.275 millones de pesos, en el costado oriental del puente de la carrera 30 con calle Sexta, donde fue renovado el 100 % del piso.

El viernes primero de julio fue cerrado el puente peatonal de la estación CAD, acceso por el costado sur en la carrera 30 con calle 22 C para hacer lo propio y posteriormente se trabajará en la estación Comuneros en la calle 5 con carrera 30 y en el puente peatonal de la calle 6 con carrera 30 costado occidental.

Es importante aclarar que en cada una de las estructuras los trabajos pueden tardar entre 60 y 90 días, dependiendo de las condiciones climáticas. Las láminas de aluminio que se van retirando de los puentes serán usadas para atender las emergencias que se presenten y para el mantenimiento de otras estructuras.