Presidente de la CGT fue hospitalizado por coronavirus

Por complicaciones derivadas del coronavirus, el presidente de la Confederación General del Trabajo, CGT, Julio Roberto Gómez, fue hospitalizado en la clínica Cafam de Bogotá.

“La Confederación General del Trabajo informa al país que el presidente de la CGT, Julio Roberto Gómez, ha sido hospitalizado en la clínica Cafam, por covid-19”, señaló la CGT en un mensaje a través de Twitter.

“Agradecemos al equipo médico y profesional su excelente atención. Oramos a Dios para que esté pronto entre nosotros”, agregó.

De acuerdo con directivos de la CGT, Gómez fue trasladado de forma preventiva al centro hospitalario luego de que el pasado domingo empezara a manifestar síntomas de la enfermedad. Según informaron se encuentra internado en una unidad de cuidados Intermedios donde permanece estable.

El líder sindical hace parte de las negociaciones para la conciliación del salario mínimo de 2021. Hace unos días habló con SEMANA de la propuesta de las centrales obreras de que se aumente en un 14 por ciento. Gómez manifestó ser consciente de que el incremento no va a ser de esa magnitud, pero defendió la propuesta. “El aumento no va a ser del 2 % ni va a ser del 14 %”, dijo. “Pero hay que tener en cuenta que el 14 % no es un aumento alto, sería llevar el salario mínimo a un millón de pesos, una cifra que aún no resuelve los principales problemas del país”.

También invitó tanto a los sectores empresariales como al Gobierno a asumir una postura de escucha, de comprensión a la situación de los trabajadores y de negociación.

Adicionalmente, cuestionó la propuesta de los empresarios de fijar el aumento del mínimo en un 2%. Dicha propuesta lo elevaría en 18.000 pesos mensuales para llegar a a $895.000. O, para ponerlo en términos más simples, un aumento de 600 pesos diarios.

“600 pesos diarios alcanzan para muy poco. Son apenas tres monedas”, dijo Gómez, presidente de la CGT. “Son 18.000 pesos más en el bolsillo empobrecido del trabajador que no alcanzan para nada. Mi pregunta a los empresarios que hacen esta propuesta es: ¿se han puesto en los zapatos de un trabajador sabiendo que 18.000 pesos es lo que dan de propina cuando van a un restaurante el fin de semana?”.

El salario mínimo, tal como está definido en Colombia, debe tener dos características: que sea vital y que sea móvil. La segunda significa que no se puede estancar, pero la primera lleva a pensar que debería alcanzar, al menos, para adquirir la canasta familiar, que en Colombia, según Gómez, cuesta 1.750.000. “Un aumento de esa magnitud, es un insulto”, dijo.