“Ha sido un éxito”, Duque tras una semana del decreto de dosis mínima

A pesar de las numerosas críticas recibidas tras la expedición del decreto que permite a la Policía confiscar cualquier cantidad de droga, incluso la dosis mínima, despenalizada por sentencias de la Corte Constitucional, el presidente de Colombia Iván Duque calificó la aplicación de la norma como todo un éxito.

Desde la ciudada de Arauca, donde presidió un consejo de seguridad en la tarde del jueves, Duque reveló algunos resultados de la aplicación del decreto que denominó “primero los niños”, pues hace parte de la política oficial para enfrentar el consumo de estupefacientes principalmente entre la niñez y la juventud.

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La medida cumple su primera semana de ejecución ya que el pasado 2 de octubre fue firmada por el presidente y los ministros de Defensa, Justicia e Interior.

Desde ese día, dijo el presidente de la república, se han recuperado 136 parques en todo el país,  y 172 entornos educativos han sido “liberados de las garras del narcotráfico”.

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Desde la aplicación del decreto, señaló el presidente Duque, se han atendido 5.600 incidentes de cooperación ciudadana para desmontar estructuras del microtráfico en las ciudades del país.

También reveló el mandatario que desde el pasado 7 de agosto, día en que arrancó su mandato, más de 10 toneladas de drogas ilícitas han sido  incautadas en el territorio colombiano. La cifra incluye las que se han confiscado desde la aplicación del decreto.

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“Estos son éxitos”, dijo Duque al defender el decreto. Tras el consejo de seguridad aseguró que la norma ha sido muy valorada por los alcaldes del departamento de Arauca y que ha tenido efectividad y una “gran receptividad” entre la ciudadanía.

Críticas de Petro 

Gustavo Petro, quien  fue contradictor de Duque en la pasada campaña presidencial, controvirtió la afirmación del presidente en el sentido que el decreto no cumple con el propósito de acabar con los jíbaros ni con el microtráfico. Tras una semana de su implementación, calificó la norma de “populista”.

“Estoy de acuerdo que no puede haber consumo en lugares públicos -dice Petro-. La Policía debe tener la fortaleza de no permitirlo”.

Sin embargo consideró que el decreto de Duque es prohibicionista y que en la práctica lo  que conduce es a empoderar a la mafia y al jíbaro: “adquiere más recursos porque le suben al precio de la droga”.

Para el senador, muchas ciudades han encontrado en el consumo controlado y regulado por el estado como una fórmula más efectiva para acabar con el jíbaro y enfrentar el consumo como un asunto de salud pública. “El decreto fortalece al jíbaro y por tanto su poder corruptor sobre la juventud”.