Presidente Duque calificó de mezquinos y politiqueros a quienes atacan a la Policía

El presidente de la República, Iván Duque, arremetió en contra de las personas y figuras públicas que en sus discursos han pretendido atacar a la Policía Nacional, al señalar que ese tipo de actitudes son propias de las personas mezquinas y de una estrategia politiquera.

Así mismo, el jefe de Estado, en medio del evento sobre la sanción de la leyes que transformarán a la Policía Nacional con un estándar más apegado a los derechos humanos, indicó que los cambios en la institución permitirán fortalecer la confianza con el ciudadano.

“Hay una motivación de la fuerza pública, con presencia de los líderes sociales, la presencia de la acción comunal, la presencia de los líderes de barrio, que sabe que la Policía Nacional todos los días protege a los colombianos; cuando uno escucha esos discursos politiqueros en contra de la Policía Nacional que tratan de generalizar y afectar la moral de sus miembros, uno se da cuenta que ahí solo puede haber un interés de mezquindad”, sostuvo Duque.

Y agregó: “Hubo un apoyo estruendoso a la Policía Nacional como una institución que tiene 130 años sirviéndole a Colombia, aquí tenemos un nuevo estatuto disciplinario que endurece sanciones que además tiene mayores exigencias y sobre todo que busca en el diario comportamiento del policía que se esté mejorando el servicio con la ciudadanía”.

También dijo en su discurso: “Esta es la reforma más importante que se le hace a la Policía Nacional en casi 50 años, pero viene acompañada de algo muy importante que es el estatuto del patrullero, bienestar, remuneración, con una bonificación para la familia, pero siempre con el más alto estándar de excelencia”.

Sobre las leyes que modifican a la Policía Nacional están ampliamente relacionadas con el régimen especial de carrera del personal uniformado de esa institución, y las cuales fortalecen la profesionalización para el servicio público.

“Este proceso de transformación policial se ha caracterizado porque involucra actividades permanentes de cambio a corto, mediano y largo plazo; implica cambios en la estructura y las funciones del cuerpo de Policía y sus vínculos con otros sectores del Estado; e incluye las dimensiones del cambio organizacional, cultural, educativo, entre otras, exigiendo cambios en el modelo de servicio de Policía”, explicó el Gobierno nacional.

Medidas más drásticas para quien asesine a integrantes de la Policía

Esta semana, el presidente de la República, Iván Duque, sancionó en la Casa de Nariño la nueva Ley de seguridad ciudadana, la cual contempla, entre otros aspectos, un castigo penal más drástico para quienes cometan asesinatos en contra de integrantes de la fuerza pública y líderes de derechos humanos.

Según lo establecido en la normativa, de ahora en adelante en Colombia, quien sea hallado culpable de cometer el delito de homicidio en contra de un uniformado de la Policía Nacional, podrá ser condenado a la máxima pena que contempla esa conducta, que supera los 58 años de prisión.

Además, el Gobierno nacional fue más allá y advirtió que la misma pena la pueden recibir quienes asesinen a un menor de edad o a un periodista en el país. La norma les brinda a las autoridades los instrumentos jurídicos y recursos económicos necesarios para contrarrestar la delincuencia, especialmente en las ciudades del país.

“La Ley de Seguridad Ciudadana, cuya aprobación fue impulsada en el Congreso de la República por los ministerios de Justicia y del Derecho, del Interior y de Defensa, contiene reformas al Código Penal, al Código de Procedimiento Penal, al Código Nacional de Seguridad y Convivencia Ciudadana, y al Código de Extinción de Dominio”, detalló la Presidencia de la República.

Sumado a ello, se habla en esa normativa de la respectiva regulación de armas, elementos y dispositivos menos letales, al igual que la sostenibilidad del registro de identificación balística.

Sin embargo, el ministro del Interior, Daniel Palacios, señaló que el espíritu de la ley de seguridad ciudadana está enfocado en responder a las necesidades y angustias del ciudadano de a pie.

“El ciudadano que sale a coger TransMilenio, el ciudadano que sale a coger un bus público para desplazarse a su casa o trabajo, el ciudadano al que le roban el celular, el ciudadano que todos los días es víctima de un delito, brindando mayores herramientas a los jueces para sancionar a los violentos que perturban su tranquilidad”, insistió Palacios.