Presidente Duque condenó lo sucedido con el joven Lucas Villa, atacado a tiros en Pereira

Los ocho días de marchas en Colombia han dejado miedo y zozobra en el país. Las protestas, que en principio fueron convocadas de manera pacífica –y que así han tratado de mantenerse– han dado un giro de 180 grados en algunos rincones del territorio colombiano, dejando decenas de muertos y cientos de heridos.

Lucas Villa, un estudiante de la Universidad Tecnológica de Pereira, es hoy una de las tantas víctimas que dejan la ola de violencia que se tomó las calles del país. El joven, que se manifestaba de manera pacífica en el marco del paro nacional con demostraciones de arte, fue baleado en la noche de este miércoles, 5 de mayo, en el viaducto César Gaviria, que comunica a la capital de Risaralda con el municipio vecino de Dosquebradas.

En la mañana de este lunes, el presidente de la república, Iván Duque Márquez, condenó lo sucedido en Pereira que atentó contra la vida de Lucas Villa y otros jóvenes más. “Condenamos lo sucedido en Pereira con el joven Lucas Villa y sus compañeros mientras marchaban pacíficamente en el viaducto. Director de la Policía Vargas, tenemos que dar con el paradero de culpables y llevarlos ante la Justicia. No toleramos estos actos de violencia y los rechazamos”, escribió el mandatario a través de su cuenta oficial de Twitter.

El estudiante de 37 años recibió ocho impactos de bala a quemarropa de un arma que, al parecer, habría sido accionada desde un vehículo que se movilizaba por ese punto de la capital de Risaralda, así lo afirmaron los testigos que presenciaron este nuevo crimen que enluta al país.

Los hechos son materia de investigación por parte de las autoridades competentes para esclarecer qué ocurrió en esa zona y qué habría provocado esta acción por parte de unos terceros.

Tras lo sucedido, el joven fue ingresado al Hospital Universitario San Jorge cuando el reloj marcaba las 7:59 de la noche. El establecimiento de salud afirmó que Lucas Villa ingresó con traumatismos por proyectil de arma de fuego en cráneo, cuello, tórax y miembro inferior derecho, por lo que de manera inmediata recibió la atención requerida.

“El paciente fue valorado por el equipo de neurocirugía, quienes diagnosticaron que, por el tipo de lesión éste no es candidato a procedimiento quirúrgico e inmediatamente pasó a manejo multidisciplinario en la unidad de cuidados intensivos, en donde aún permanece en condición crítica y pronóstico reservado”, informó el Hospital Universitario San Jorge mediante un comunicado.

En diálogo con SEMANA, Juan Carlos Restrepo, gerente del centro de salud, explicó que Lucas “está siendo manejado por Neurocirugía, Neurología clínica e intensivistas. El paciente inmediatamente fue intubado y trasladado a la unidad de cuidados intensivos”.

De acuerdo con el galeno, el diagnóstico del estudiante de la UTP es totalmente reservado y que aún es muy temprano para diagnosticar la muerte cerebral del joven. Afirmó que deben esperar la evolución del estado de salud del estudiante en las próximas 24 horas. Después del tratamiento que están adelantando con Lucas, los especialistas, a través de la junta médica, darán el parte médico al que haya lugar.

Por su parte Carlos Maya, alcalde de Pereira, rechazó los hechos ocurridos en la noche del miércoles contra este grupo de manifestantes y ofreció una recompensa hasta por 50 millones de pesos para quien dé información a las autoridades que permitan dar con el paradero de los responsables de este crimen.

“Exijo a la Policía dar con los autores materiales e intelectuales del atentado que sufrieron jóvenes hoy en el viaducto de Pereira. No vamos a descansar hasta capturar a los responsables. El Gobierno de la Ciudad ofrece hasta 50 millones por información para dar con su paradero”, publicó el mandatario de los pereiranos a través de su cuenta en Twitter.

A la par, la Fundación Internacional de Derechos Humanos, condenó el acto de violencia que involucró la vida del joven, haciendo alusión a la forma cómo se le había visto protestando en las calles de a capital risaraldense.

“Lucas Villa Vásques fue objeto de un asesinato selectivo, no fruto del azar ni de violencia aleatoria. (...) El joven estudiante de Ciencias del Deporte en la UTP fue baleado por desconocidos, desde un vehículo a motor, en la zona del Viaducto de César Gaviria, en Pereira (Colombia) tras una intensa jornada de protesta en la que destacó por su gran actividad y valentía, se le pudo ver gritando consignas y bailando alegremente, a modo de pacífica reivindicación”, afirmó la Fundación Internacional de Derechos Humanos a través de su cuenta de Twitter.

La ONG agregó que la condición de líder natural de Lucas Villa “habría sido el factor que le habría convertido en objetivo de los violentos, quienes dispondrían de infiltrados entre los manifestantes”.