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“Presidente Duque es racista y por eso no viaja a Buenaventura”: Alexander López

El senador del Polo Democrático indicó que frente a la difícil situación de violencia que vive Buenaventura el presidente de la República debería hacer presencia en el territorio, pero según él su racismo no lo deja.

7 de febrero de 2021
Duque Buenaventura
Presidente Iván Duque. | Foto: SEMANA

“El presidente es racista“, es una de las frases que más utilizó el senador del Polo Democrático, Alexander López, en entrevista con Semana Noticias, argumentado que: “Iván Duque prometió hace más de un año que va a ir a Buenaventura y no lo hace. Le ha dado la espalda al Pacífico”.

Uno de los puntos que cuestionó el congresista es: “El presidente Iván Duque se reúne casi todos los días con los gremios, con los bancos, con el sector financiero. Se reúne con los sectores económicos de Colombia, pero no puede ir a Buenaventura a encontrarse con la comunidad. ¿Qué tiene de distinto un pueblo que históricamente ha sido abandonado?”, se preguntó.

López recalcó que las últimas mediciones revelan que los niveles de pobreza e indigencia tras la pandemia es del 80 por ciento en ese territorio, y los niveles de informalidad más altos a nivel nacional se presentan en Buenaventura. “A Buenaventura, Quibdó y Tumaco los compara con países africanos que están en condiciones de absoluto subdesarrollo”, dijo

Advirtió que el comité del paro cívico y las comunidades están planteando reiniciar el paro, porque en 2017 fue suspendido, pero los dirigentes aseguraron que en el momento que se incumpliesen los acuerdos se retomaba. “Precisamente ese incumplimiento es el que esta poniendo a merced de los grupos delincuenciales a la población”.

Esta semana dos hombres fueron sorprendidos por la policía cuando caminaban por las calles de Buenaventura con una Ak-47 y una mini uzi. La inseguridad es incontrolable en el puerto.

Indicó que toda la riqueza que gestiona Buenaventura, desde el puerto más importante del país, no es coherente con la desigualdad y el miedo que viven sus pobladores: “¿Cómo Iván Duque garantiza la seguridad, o la dinámica portuaria y comercial, pero no les garantiza la vida a la población?. No atiende a la comunidad”.

“A diario ingresan a los puertos de Buenaventura 4.000 tractomulas, llevando el comercio exterior y soportando la economía de nuestro país”, explicó, y agregó que más del 60 por ciento de las importaciones que llegan a Colombia por vía marítima pasan por Buenaventura.

Señaló que gran parte de los enfrentamientos entre bandas criminales en Buenaventura se debe a la disputa de control del territorio, debido a que han encontrado en los empresarios una buena fuente de financiación. También dijo tener conocimiento de que los niveles de extorción a muleros y empresarios se ha disparado.

Así como el Puerto de Buenaventura funciona las 24 horas del día con plena seguridad, con agua potable, con energía, con condiciones sanitarias plenas, debería funcionar todo en el resto de la comunidad”, exigió López.

El senador de la oposición indicó que más de 400 mil personas se están viendo afectadas por la falta de intervención oportuna del gobierno nacional, que permite que la desigualdad socioeconómica gane espacio en la violencia.

Cabe recordar que con la ola de violencia salió a relucir una discusión entre el exministro del Interior y el actual jefe de la cartera política.

Casi cuatro años después de las protestas que paralizaron a ese puerto sobre el Pacífico, que comenzaron el 16 de mayo de 2017 y se extendieron por 22 días, el exministro Rivera lanzó pullas al Gobierno Nacional al recordar que cuando “se resolvió el paro, el principal compromiso fue tramitar una ley que ordenara un plan de desarrollo especial para el puerto”.

Según dijo en redes sociales, esa ley se tramitó en el gobierno de Juan Manuel Santos y la hoja de ruta quedó diseñada, por lo que pidió al Gobierno Duque “cumplirla para resolver la crítica situación de hoy”.

Rivera hace referencia a la crítica situación que se vive en esa ciudad del Valle del Cauca, que en los últimos días ha visto alterado el orden público, mientras los enfrentamientos entre bandas delincuenciales no cesan.