La negociación entre el Gobierno y el ELN arranca el 7 de febrero

Después de meses empantanados en conversaciones y recriminaciones que no parecían conducir a ninguna parte, el Gobierno y el ELN vislumbran tierra firme en el horizonte con la instalación de la Mesa de diálogo que anunciaron este miércoles desde Quito (Ecuador).

Después de 295 días desde la publicación de la agenda que encarrilará el proceso de paz con la segunda guerrilla del país, las partes fijaron el 7 de febrero como la fecha perentoria que dará rienda suelta a la discusión.

"Hemos acordado instalar en Quito la mesa pública que da inicio a la fase formal de los diálogos para la paz", informaron este miércoles las partes negociadoras.

Le puede interesar: Correa, el ‘viejo mejor amigo’ de Santos que acoge los diálogos con el ELN

Acompañados de los delegados de los países garantes Venezuela, Noruega, Cuba, Chile y Brasil, tanto el ELN como el Gobierno se comprometieron a que el 2 de febrero quedará libre el excongresista chocoano Odín Sánchez Montes de Oca. Y, este mismo día, "se harán efectivos los indultos a dos integrantes del ELN".

Así las cosas, el Gobierno y la guerrilla habrían logrado zanjar las diferencias frente a uno de los temas que había provocado la postergación de la discusión por casi un año.

"Vamos a iniciar un camino que debe conducirnos a redondear la paz de Colombia, a lo que el presidente Santos ha denominado "la paz completa", dijo el jefe del equipo negociador del Gobierno, Juan Camilo Restrepo. Contrario a otros frustrados anuncios que han hecho de manera individual, esta vez manifestaron que ya están listos los protocolos de liberación y solicitarán la participación al Comité Internacional de la Cruz Roja.

También puede ver: Saravena, corazón del conflicto que no se apaga en Colombia

Esta decisión era fundamental para el proceso de paz, ya que ambas partes condicionaban el avance del diálogo a la liberación y los indultos.

Por su parte, el vocero de la guerrilla Pablo Beltrán aseguró que "el acuerdo que logramos nos permite iniciar agenda de seis puntos, cuyo proposito es superar el conflicto armado y crear condiciones para las transformaciones, que dignifiquen a la sociedad".

Desde Davos, más temprano, el presidente Juan Manuel Santos había confirmado que su gobierno y el ELN alcanzaron un entendimiento para iniciar los diálogos de paz. "Les puedo decir que hemos llegado a un acuerdo", dijo en rueda de prensa el mandatario, Nobel de Paz, al informar que "ya fue acordado" el punto sobre la liberación de Odín Sánchez.

Destrabar la mesa no fue nada fácil, y en ello la Iglesia católica jugó un papel clave. Incluso, como parte del acompañamiento que vienen haciendo, la semana pasada propusieron la creación de una comisión humanitaria.

La fase secreta inició en enero del 2014. Para octubre pasado estaba previsto el lanzamiento de los diálogos en Quito, pero se suspendió por la negativa de liberar al excongresista, en poder de la guerrilla desde abril de 2016, una condición inamovible para el Gobierno que tenía en stand by el siguiente paso.

Le recomendamos: "¿Nos quiere entregar el ELN un cadáver de Odín?"

Comienza la búsqueda de la paz completa. La guerrilla decidió subirse al tren que conduce al silenciamiento definitivo de los fusiles tras más de 50 años de confrontaciones. Ahora que empezó la cuenta regresiva para la desmovilización de las FARC, por su parte el ELN inicia su tránsito por el espinoso camino que implica un proceso de paz.

De acuerdo con fuentes militares, el ELN tiene fuerte influencia en Arauca, Norte de Santander, Nariño, Casanare, Boyacá, sur de Bolívar, Chocó y Cauca.