Procuraduría investigará a dos generales por bombazo en la Escuela General Santander

A una semana de cumplirse el aniversario del atentado a la Escuela General Santander, que dejó 22 víctimas fatales y marcó un punto de no retorno en las negociaciones de paz con el ELN, la Procuraduría hizo un anuncio sorpresivo. El Ministerio Público acaba de abrir investigación disciplinaria en contra de dos generales con el fin de esclarecer si adelantaron las gestiones necesarias para salvaguardar la seguridad del personal en las instalaciones de la Escuela de Cadetes de la Policía General Santander.

Los oficiales investigados son el mayor general Carlos Enrique Rodríguez González y la brigadier general Juliette Giomar Kure Parra, en su condición de director Nacional de Escuelas y de directora de la Escuela de Cadetes en Bogotá, respectivamente. El Ministerio Público intentará establecer si existió o no una conducta que pueda ser reprochada disciplinariamente de parte de los oficiales.

En contexto: 

El 17 de enero de hace un año, el terrorismo dio un golpe sin antecedentes en el corazón de la Policía. A las 9:32 a.m. una camioneta Nissan Patrol cargada de explosivos logró colarse al interior de las instalaciones de la Escuela y fue detonada cerca al lugar donde se acababa de terminar una ceremonia de graduación a la que asistían más de 200 personas. Veintiún cadetes y el conductor del vehículo murieron.

Desde que se conocieron los videos de las cámaras de seguridad, la vigilancia de la Escuela quedó en entredicho. En las imágenes se ve cómo el vehículo bomba recorre por tres minutos y medio las calles internas del lugar. Lo hace despacio y sin ningún obstáculo aparente que le impida continuar.

Aunque las versiones de los testigos señalan que el conductor, José Aldemar Rojas, ingresó a la fuerza cuando un camión y unas motos salían de la Escuela de Cadetes, lo que se alcanza a captar de su tenso recorrido es que la camioneta blindada no es supervisada por ningún agente.

Después de conducir sin rumbo se ve cómo el vehículo queda inmóvil durante varios segundos frente a un segundo acceso a la Escuela. En este momento en que José Aldemar Rojas habría echado reversa al parecer después de que un agente que le ordenara detenerse; esta es la escena que testigos describen como el preámbulo a la detonación.

En contexto: 

Una vez se inició la investigación interna en la Policía, la Procuraduría Delegada para la Fuerza Pública y Policía Judicial se dispuso a ejercer vigilancia administrativa. Pero el 20 de agosto del 2019, la Inspección General de la Policía ordenó remitir las diligencias al Procurador General que acaba de pronunciarse frente a la apertura de la investigación contra los oficiales.