BOGOTÁ

Polémica por tala de árboles: críticos dicen que se talarán 34.000, pero la alcaldía responde que se han sembrado 200.000

Las obras en el parque Japón, al norte de la ciudad, encendieron un debate en la capital del país. Concejales y vecinos rechazan la decisión que tomó la Alcaldía y aseguran que se ha gastado 17.000 millones en esta. La administración responde.

22 de enero de 2019
foto Esteban Vega

Este martes decenas de bogotanos se reunieron en el parque El Japón de Bogotá, ubicado en el barrio La Cabrera. La escena era bastante inusual para ese sector capitalino. Los vecinos todos agrupados alrededor del complejo verde para exigirle a la Alcaldía de Bogotá que "deje de talar árboles". Con pancartas que decían "Abracemos nuestros árboles" y "Participación no es imposición" hicieron un llamado a la administación para que esta decisión se detengan o sea concertadas con la comunidad.

Esta marcha se dio después de una tala de seis árboles que hubo en ese parque la semana pasada y en la que llegaron decenas de agentes de la policía y del Esmad a acompañar la actividad, lo que fue interpretado por la comunidad como un abuso de autoridad contra quienes se oponían a la tala. "Estamos en contra de la forma autoritaria como se están haciendo estas talas. Los vecinos del parque no queremos canchas sintéticas", dijo Sebastián Rojas, uno de los líderes de la marcha.

El ecólogo Jaime Caicedo, por su parte, señaló que la administración no ha tenido en cuenta la voz de los ciudadanos y está repitiendo los mismos errores que con los árboles del Virrey y de la Novena: "No nos oponemos a las talas porque sí, pero deben de hacerse de una forma concertada. Y, por otro lado, es necesario que se tengan en cuenta las recomendaciones que les hemos hecho. Por ejemplo, que no se planten unas pocas especies porque eso va en contra de la diversidad de los parques y atenta contra las aves migratorias".

En el caso del Parque el Japón, la alcaldía respondió la semana pasada que se realizará allí una obra que tiene como fin dotar ese espacio de elementos para niños, senderos, mesas de ajedrez, así como construir una cancha de fútbol 5 que pueda ser usada por los vecinos del barrio. Dicen que un espacio público con esta posibilidad se encuentra a más de tres kilometros de distancia.

Esa decisión fue la que causó malestar pues implica talar de allí frondosos árboles que han estado por décadas en ese parque. La administración responde a eso que de los 98 árboles del lugar, se talarán seis y en compensación se sembrarán 10. Algunos vecinos, por su parte, consideran que la adecuación de elementos distintos no es necesaria y no amerita sacrificarlos. La zona fue acordonada para poder realizar las obras y en las lonas se pueden ver decenas de cartas de los habitantes del barrio pidiendo que no se talen esos ejemplares. 

La medida se ha desarrollado en medio de una fuerte puja que se vive por decisiones similares que se han tomado en otras zonas de Bogotá, como la carrera 9. La concejal María Fernanda Rojas, quien ha sido una de las principales voceras de ese malestar, dijo que a noviembre de 2018 el alcalde de Bogotá autorizó 34.000 talas, de las que 11.394 ya fueron ejecutadas y que suman 3.068 millones de pesos. Según señaló Rojas talar un árbol le cuesta a la ciudad 501.341 pesos. Según ella, de ejecutarse todas las talas aprobadas hasta ahora, la Administración se gastaría 17.361 millones de pesos. Según explicó la concejal del Partido Alianza Verde, de todas las talas autorizadas 16.240 son de manejo silvicultural. Esto incluye un rango amplio y difuso de motivos que van desde “nuevo diseño paisajístico” hasta enfermedades fitosanitarias, y diferentes riesgos de volcamiento.

Las localidades donde más talas han sido autorizadas son Suba (7.136), Usaquén (5.303), Fontibón (3.590) y Engativá (3.549). Las especies con más talas reportadas son diversas variedades de acacias (8.208), eucaliptos (4.114) y cipreses (3.095). 

Recomendamos: "Amo los árboles": Peñalosa responde las críticas por tala en Chapinero

De todos los grupos de talas el más grande está relacionado con las obras del aeropuerto El Dorado (1.835). Le siguen en tamaño todas las talas autorizadas para el sector de las áreas protegidas del humedal y el canal Córdoba. La Concejal lamentó que "directamente dentro del humedal hay autorización de derribar 744 árboles y otros 359 en el recorrido del canal, lo que da un total de 1.103 árboles menos para la ciudad. La mayoría de estos árboles corresponden a la construcción de una ciclorruta panorámica dentro de la zona de recreación pasiva del humedal".

La alcaldía publicó un comunicado en el que asegura que se han plantado más de 200.000 árboles. “Si se tala un árbol, tiene que compensarse, y hoy en Bogotá por cada árbol que se ha talado, ocho se han sembrado”, explicó el secretario de Ambiente.Francisco Cruz. Entre las especies que se han sembrado están robles, nogales, guayacanes, liquidámbar y cedro. La razón que da la secretaría para elegirlas es que tienen una gran resistencia y tolerancia al estrés urbano y  que representan, a largo plazo, menos riesgo de volcamiento.

Recomendamos: Los últimos árboles de la Amazonia

El secretario Cruz también aseguró que muchos otros árboles que no están en inminente caída presentan problemas de enfermedades, problemas de inclinación o raíces expuestas, lo que hace que se haga su reemplazo inmediato por árboles más robustos y que se adapten a la zona climática de Bogotá donde van a ser plantados, ya que las condiciones climáticas no son iguales en toda la ciudad.

Desde el Jardín Botánico se señaló que le han realizado tratamientos para manejo de plagas y enfermedades a cerca de 60.500 árboles, con el fin de evitar que pongan en riesgo a la ciudadanía.

Sugerimos: “La última opción es talar”

Por su parte, el director del Instituto Distrital para la Recreación y el Deporte, IDRD, Orlando Molano, aclaró que en el caso del parque Japón, no está siendo visitado masivamente por los residentes de la localidad. Y que lo que busca el Distrito es incentivar la visita de todos los ciudadanos a los parques.

“Los niños y jóvenes tienen derecho a disfrutar. Este parque va a tener una zona de juegos infantiles de última generación, va a tener andenes y senderos para caminar… Es un parque para todos los bogotanos y no solo para algunos vecinos que no quieren el parque”, agregó Molano.

Laura Mantilla, directora del Jardín Botánico, explicó que la tala de árboles se da en algunas ocasiones porque estos presentan enfemedades y pueden llegar a representar un peligro para los bogotanos, en caso de caerse. Aclaró que en la decisión de talarlos se toman muchas consideraciones. “Depende de la altura, del tamaño y de las condiciones del lugar. Los árboles que el Jardín Botánico está talando son árboles enfermos, malformados, con crecimiento deficiente, por exposición de raíces y las especies que más sufren volcamiento en Bogotá, como eucaliptos, acacias y cipreses”, agregó.