POLÍTICA
¿Qué va a pasar con el metro de Bogotá? Los precandidatos a la alcaldía muestran sus propuestas
El magaproyecto se ha convertido en una carta política en esta carrera por llegar al palacio Liévano. Como el gobierno distrital ha aplazado en varias ocasiones la adjudicación, está por verse aún si en este periodo se alcanzará a dejar contratada.
Después de que empezó la carrera política para llegar a la Alcaldía de Bogotá una de las obras de las que más han hablado los precandidatos es la de la primera línea del Metro Elevado de Bogotá. Se trata de una obra que costaría más de 13 billones de pesos, que tendría 24 kilómetros, 16 estaciones y 28 edificios de acceso. La ruta inicia en el sector El Corzo, al suroccidente de la ciudad, donde se ubicará el Patio Taller. Avanzará hasta el Portal Américas, seguirá su recorrido por la avenida Villavicencio y avenida Primero de Mayo. Girará levemente hacia el nororiente a la altura de la avenida NQS para tomar la calle 8 sur y la calle 1 para girar al norte por la avenida Caracas hasta llegar a la calle 78. Se espera que para 2023 ya esté funcionando la primera fase.
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Aunque parece que la obra es prácticamente un hecho, y así lo ha reiterado una y otra vez el gerente del metro de Bogotá, Andrés Escobar, en este momento está en curso una demanda instaurada por concejales de Bogotá del Polo que no ha sido admitida por el Consejo de Estado, pero que de prosperar podría demorar la adjudicación. Esto pone en riesgo que Peñalosa despida su gobierno sin dejar asegurada una de sus obras insignia. En paralelo otro elemento que le juega en contra a la alcaldía es el hecho de que la administración distrital ha tenido que aplazar la licitación en diferentes oportunidades e incluso en el Concejo de Bogotá varios cabildantes, incluidos los que apoyan al alcalde, se preguntan si la obra quedará adjudicada.
Ante el panorama, los candidatos han tomado posición con respecto a lo que harían. La obra sigue generando polarización entre quienes prefieren el proyecto del metro subterráneo y los que apoyan una estructura elevada. SEMANA, en una serie de entrevistas, ha venido conversando con los aspirantes a la alcaldía y esto es lo que han dicho con respecto a la megaobra. Todos, a excepción de Hollman Morris, han asegurado que si la obra es adjudicada le darían continuidad, pues de lo contrario, aseguran, sería un detrimento patrimonial y se pasarían toda la alcaldía resolviendo demandas.
Ángela Garzón: Candidata oficial del Centro Democrático
La concejal de Bogotá fue una de las primeras en afirmar que el proyecto de la primera línea del metro elevado es serio y que por eso ella votó a favor de la financiación del proyecto en el Concejo. Dijo además que ha estado un poco preocupada de que la obra no se haya adjudicado todavía porque este gobierno ha tenido todo para sacar adelante la primera línea del metro, pero no ha cumplido. “No podrá Peñalosa decir que es por falta de recursos, de apoyo del gobierno o del Concejo porque ha tenido todo para dejar contratada esa obra. Es más, este año ya debía haber iniciado la construcción. Pero si no lo deja adjudicado, de ser alcaldesa, lo primero que haría sería contratar ese proyecto”.
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Miguel Uribe Turbay está seguro de que el gobierno va a cumplir
El exsecretario de gobierno de Peñalosa dice que está seguro de que el proyecto se va a adjudicar y está convencido de que el gobierno va a cumplir. Sin embargo, de no llegar a ser adjudicado el metro, lo primero que él haría en su gobierno sería contratarlo. “Yo estuve en este gobierno y no tengo que llegar a adelantarme o a revisar nada porque conozco ese proceso. No perdería un solo día para adjudicar el metro. La gente dice que es muy fácil de modificar ese proyecto, pero si se modifica una sola coma, los bogotanos no vamos a tener metro”.
María Andrea Nieto: es hora de que Bogotá tenga metro
Le aseguró a SEMANA que Bogotá no podía estar cambiando de planes cada cuatro años y que ya era hora de que la capital tuviera metro. “Lo que yo haría es revisar que todo estuviera en orden. Eso no me tomaría más de tres meses y adjudicaría la obra. De encontrar algo que se tenga que corregir pondría a un equipo técnico y haríamos todo el esfuerzo para trabajar en el tema y adjudicar cuanto antes”.
Claudia López: lo que le interesa es el trazado
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La propuesta de la excongresista es modificar el metro. Según le dijo a SEMANA a ella no le interesa tanto si es el metro es subterráneo o elevado. Lo que le interesa es el trazado. “A mí no me gusta el medio metro de Peñalosa, pero si lo dejan contratado no pienso hacer la peñalosada de botarlo a la caneca porque creo que sufre más la ciudad. Trataremos de mitigar los impactos que creo que van a ser muy negativos sobre todo en el centro. Pero si no lo deja contratado, mi primera apuesta como alcaldesa va a ser ampliar el metro para que vaya desde la Primero de Mayo hasta Suba y Engativá”, dijo.
Antonio Navarro haría más líneas
El exalcalde de Pasto dijo que Bogotá no podía estar mirando para atrás todo el tiempo. “Si volvemos a empezar no vamos a tener metro”. Aseguró que prefería el metro subterráneo, pero que no reversaría el proyecto sino que le haría algunas modificaciones. Una de ellas es que el metro no iría hasta la calle 72, lo llevaría hasta la 100 o más al norte. Lo otro que haría sería hacer una segunda línea de metro que empiece en Suba y pase por Engativá, Barrios Unidos, Chapinero, Centro, Rafael Uribe y Usme.
Jorge Rojas: es preferible hacer una obra que perdure
El exsecretario de gobierno de Gustavo Petro dijo que de no ser adjudicado el metro lo que haría sería retomar los estudios del metro subterráneo y adjudicar la obra. Sin embargo, este proyecto tendría que pasar de nuevo por el Concejo de Bogotá y ser financiado por el Gobierno nacional. Eso tomaría algún tiempo. “Pero es preferible demorarnos un poco más y hacer una obra que perdure en los años para la ciudad. Ojalá incumpla en septiembre y podamos retomar el proyecto del metro subterráneo, que sí tiene estudios”.
Celio Nieves: demandó el proyecto elevado
El concejal de Bogotá del Polo fue uno de los que instauró la demanda contra el proyecto del metro elevado con tres argumentos: que el trazado no corresponde al POT vigente, irregularidades en la declaratoria de importancia estratégica y que no había estudios de factibilidad en el momento de ser aprobada por el Concejo de Bogotá. Espera que esta acción tenga efecto para retomar el metro subterráneo. Si llegara al Palacio Liévano lo primero que haría sería “estudiar el estado del arte y retomar el metro que quedó en la alcaldía de Gustavo Petro”.
Hollman Morris: no llevaría a cabo la obra de Peñalosa
Es el único que aunque la obra fuera adjudicada no la llevaría a cabo. Como Petro condicionó su apoyo al candidato que hiciera el metro subterráneo parece que va a ser el único que contaría con su bendición. “A mí no me podrán decir que construya sobre lo ilegal como es el metro elevado o la troncal de la Séptima de la que tengo muchas dudas”, dijo. Reiteró que al día de hoy no tiene los estudios de patio taller del metro, y si no existe eso todavía no pueden decirle a Bogotá cuánto vale el metro.
Luis Eduardo Garzón: en cuanto al metro, construir sobre lo construido
El exalcalde de Bogotá dijo que su lema era “Construir sobre lo construido” precisamente porque la ciudad no puede estar cambiando las obras de administración en administración. Por esa razón le daría continuidad al proceso que dejó Peñalosa, pero revisaría tres asuntos que le preocupan: Una de ellas es la financiación. El dinero aprobado por el Concejo y el Gobierno es de 12,9 billones y el proyecto ya cuesta casi un billón más. Otro punto que lo trasnocha es que el metro vaya solo hasta la calle 72. “Buscaría que el complemento a ese metro sea Suba y Engativá, que son 2 millones de personas y el nuevo POT tiene que mirar eso”. De no ser posible esa modificación, haría un nuevo proceso de licitación de una obra que complementara ese tramo del metro.
Luis Ernesto Gómez: una consulta para que los bogotanos decidan
Asegura que TransMilenio por la Séptima es complementaria del metro elevado. Lo que haría sería no hacer esa troncal e invertir los recursos en un metro subterráneo, en sistemas multimodales y en mejorar lo que ya hay de TransMilenio. Para evitar la adjudicación del metro, Gómez propone que en la consulta interpartidista del 26 de mayo los ciudadanos incluyan una papeleta adicional dirigida al alcalde Enrique Peñalosa con la que los bogotanos le dicen si están de acuerdo o no TransMilenio por la Séptima y con el metro.
Lo que ha dicho el gerente del proyecto, Andrés Escobar, es que el proceso ha sido lento porque tuvieron que conformar la empresa metro, conseguir la financiación, aprobar los estudios, responder más de 560 preguntas y solicitudes, responder a la oposición, entre otras. Sin embargo, han asegurado que la obra sería adjudicada por tarde en octubre. Esa sería la única forma de mantener el proyecto. Mientras tanto, los candidatos seguirán sacando provecho de este caballo de batalla para llegar al segundo cargo más importante del país.