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Elecciones 2022: las diferencias de fondo entre los candidatos que quieren llegar a la Casa de Nariño
Más allá de izquierda, centro o derecha, hay aspectos o propuestas que diferencian claramente a los candidatos que podrían llegar a la Casa de Nariño el próximo 7 de agosto.
Aunque el surgimiento de la izquierda y la derecha con connotación política se remonta a un hecho casi anecdótico en la Asamblea Nacional del Tercer Estado, en la Revolución francesa, cuando los defensores del veto que el rey podía ejercer a las decisiones de la corporación se ubicaron a la derecha, y los opositores, a la izquierda en el recinto, los términos todavía se utilizan para identificar tipos de pensamiento político.
En el mundo de hoy, los defensores de la economía de mercado, del orden, del capital, de la fe son vistos como de derecha, y quienes se ponen en la otra orilla son identificados a menudo como de izquierda.
Los dos conceptos tampoco tienen unos linderos rígidos, pues en algunos casos unos y otros suelen cruzar sus fronteras para adentrarse en los predios ideológicos del contradictor y hacer suyas algunas partes de sus ideas.
En el caso colombiano, los competidores por la Presidencia este 2022 se ubican, como en la anécdota de la Asamblea Nacional en la Revolución francesa, en la izquierda, en el centro y en la derecha. Esta vez el alinderamiento ideológico que representa cada postura es mucho más claro en el debate político por la Presidencia y el Congreso.
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La izquierda se declara abiertamente defensora de ponerle límites a la economía de mercado; el centro tiene una gran identidad con la defensa e implementación del acuerdo de paz de La Habana, la educación, la generación de empleo, la lucha contra la corrupción; y por los lados de la derecha hay una defensa ahincada de la seguridad, el orden, las libertades y del capital.
La izquierda
Pocos dudan, por ejemplo, del carácter izquierdista del candidato presidencial Gustavo Petro, que él niega profesar.
Petro nació en la política como integrante del movimiento guerrillero M-19, que se alzó en armas contra el Estado colombiano, y aunque en teoría alega profesar más una línea de pensamiento “progresista”, para los entendidos simplemente es de izquierda. En su coalición del Pacto Histórico, hay fuerzas con clara ascendencia de izquierda como el partido Comunes (antiguas Farc) o el Polo Democrático y lo que queda de los comunistas.
En esa coalición Petro es ‘amo y señor’. Aunque hay líderes de otras corrientes que irán a la consulta interna para definir quién será el candidato oficial de la izquierda, lo único que hoy se sabe en la política colombiana es que Petro será el ganador de esa medición.
¿Qué representa Petro?
A Petro hay por lo menos tres ideas suyas que lo dejan irremediablemente en la izquierda que representa. Si Gustavo Petro es presidente de Colombia, intentará ampliar las fronteras del estatismo con algún costo para el papel del sector privado en la producción de bienes y servicios. El candidato de la Colombia Humana comulga con la idea de un papel más intervencionista del Estado en la economía y en la sociedad en general.
Cuando fue alcalde de Bogotá, Petro pretendió, por ejemplo, reducir el espacio de los privados en la prestación del servicio de manejo de basuras para pasárselo al Estado. También es crítico del papel que los privados tienen hoy en la prestación del servicio de salud.
De manera cotidiana acusa a los privados de actuar con criterio “mafioso” en su rol en dichos servicios. Petro ha dicho que uno de los primeros decretos que firmaría si llega a ser presidente es suspender la contratación para la exploración de combustibles fósiles.
“La primera decisión que voy a tomar es el cese de la contratación de exploración de petróleo en Colombia. Es un mensaje claro: vamos hacia una economía productiva, no extractivista (...) Hay que hacer una transición hacia las energías limpias”, dijo Petro recientemente. En reiteradas ocasiones ha dicho que si es elegido presidente de Colombia les comprará tierras a grandes “terratenientes” para entregárselas a los pobres que produzcan comida.
Se ha referido de manera puntual a las tierras de los ingenios azucareros del Valle y a las de su opositor, el expresidente Álvaro Uribe Vélez. Petro no ha hablado de expropiar literalmente, pero sus contradictores consideran que detrás de la figura de compra se esconde un espíritu expropiador, y lo han comparado con lo que han hecho Hugo Chávez y Nicolás Maduro, en Venezuela.
La derecha
Todos los precandidatos de la centroderecha congregados en la coalición Equipo por Colombia (Alejandro Char, Enrique Peñalosa, David Barguil, Federico Gutiérrez y Aydeé Lizarazo) representan casi al unísono la defensa de la economía de mercado, las libertades, el orden, la institucionalidad, las Fuerzas Armadas y la fe cristiana.
Federico Gutiérrez es uno de los más caracterizados defensores de la seguridad, en esta alianza. Su recia postura en este sentido le ha costado que Alejandro Gaviria, precandidato del Centro Esperanza, lo llame “facho”. “A partir del 7 de agosto, como presidente de la República, recuperaré el orden y la tranquilidad de los colombianos.
Perseguiremos a todos los criminales como ya lo he hecho, y por eso para los bandidos una cárcel o una tumba”, dijo Gutiérrez este jueves durante una visita a Arauca, zona donde las estructuras del narcotráfico libran una guerra a muerte.
“Representamos la defensa de la democracia, de las libertades, de la seguridad, de las oportunidades, de poner orden, de darles importancia a la familia y a los jóvenes”, le dijo Gutiérrez, a SEMANA. David Barguil, el candidato que representa al Partido Conservador en la coalición, es otro claro defensor de la seguridad. Y no le teme a autocalificarse de “derecha”.
Este jueves, al celebrar la llegada de la candidata presidencial del Mira a la coalición, Aydeé Lizarazo, Barguil dijo que la “derecha unida” debe trabajar para entregarle al país un presidente que “resguarde la seguridad”.
“La seguridad tiene que ser la prioridad de las ciudades colombianas para que haya calidad de vida e inversión. Para eso hay que apoyar, motivar y liderar a nuestros policías”, dijo Peñalosa a través de su cuenta de Twitter.
El centro
Sergio Fajardo, el más destacado de los líderes de Centro Esperanza, la coalición que representa el centro del espectro político, tiene entre sus propuestas más significativas la defensa de la educación y de la generación de empleo. Ha sido un discurso sistemático suyo. A Juan Fernando Cristo, también precandidato de esta alianza, se le identifica por la defensa del acuerdo de paz de La Habana y de las víctimas del conflicto armado.
Si Juan Manuel Galán llega a la Presidencia del país, estaría más cerca de la legalización de las drogas. Eso ha dicho sin explicar muy bien cuál sería el camino. “Es hora de terminarla, legalizando todas las drogas a través de su regulación por parte del Estado”, dijo Galán por medio de su cuenta de Twitter.
En el mismo centro está Alejandro Gaviria, un intelectual, defensor de la eutanasia, ateo y partidario de que el Estado entregue un ingreso mínimo de 400.000 pesos mensuales a todos los adultos mayores. Gaviria también haría un gobierno con énfasis en la protección de la educación.
Los solitarios
Óscar Iván Zuluaga, candidato del Centro Democrático, y quien hasta ahora no forma parte de ninguna de las coaliciones, representa al uribismo, partido que en los últimos años ha tenido una gran influencia pública en todo el país. Si es presidente, Zuluaga replicaría muchas de las cosas de los gobiernos de Álvaro Uribe, pero por encima de todo seguridad. En el centro de las propuestas de Zuluaga están la seguridad, la generación de empleo, la reactivación económica y la recuperación del campo.
El exalcalde Rodolfo Hernández, quien irá en solitario a primera vuelta, ha enfocado su discurso contra la corrupción. Hernández es un empresario muy hábil en construir riqueza y generar empleo. Un eventual gobierno suyo estaría marcado por apoyo al campo y al sector productivo para generar empleo.