¿Qué pasó con los agentes del CTI secuestrados en el Cauca? Las disidencias de las Farc dicen que no responden por su “seguridad”

Bethy Amanda Mage y Gerzón René Rivera fueron secuestrados por las disidencias de las Farc en el departamento del Cauca. Los dos trabajaban en la unidad de exhumaciones en ese departamento, desenterrando la verdad para las víctimas y las disidencias decidieron convertirlos en supuestos integrantes de la “inteligencia”.

Los criminales redactaron comunicados para confirmar que tenían en su poder, secuestrados, a los dos funcionarios de la Fiscalía. Dijeron que los encontraron armados y en una zona “bajo control” de las disidencias de las Farc. Los delincuentes se atrevieron a asegurar que los agentes estaba en labores de inteligencia en una zona cercana a la capital del departamento de Cauca.

“En un punto de control y registro del Frente Dagoberto Ramos del Bloque Occidental, fueron sorprendidos transitando dos funcionarios de la Fiscalía General de la Nación, identificados como Gerzon Rivera y Betty Amanda Mage, uno de ellos técnico investigador con funciones de policía judicial, además de su acompañante María Yeni Ruiz”, señala un documento que se conoció y firmado por el grupo criminal.

Después de una semana las disidencias de la Farc no daban razón de los funcionarios secuestrados, luego salieron con una “perla” encima de una exigencia para liberar a los agentes del CTI. Según pudo establecer SEMANA, las disidencias pidieron despejar cinco municipios para definir la forma y el cómo concretar la liberación.

Se trataba de una clara extorsión al Gobierno para conseguir el despeje de los municipios y en contrapresión liberar a los funcionarios. El Gobierno rechazó la exigencia y negaron cualquier posibilidad de despeje en los municipios, al contrario, pidió la libertad inmediata de los funcionarios.

“Como vemos, la ruptura al cese al fuego pone en riesgo a militares, policías y demás funcionarios del Estado que transitan dentro de las áreas que están bajo control político y militar de las Farc EP y muchas veces cumplen tareas de la inteligencia no solo contra las Farc EP sino contra los liderazgos sociales y comunitarios”, señala el comunicado de las disidencias.

Ahora y de forma más descarada, de acuerdo con las versiones que pudo conocer SEMANA, las disidencias de las Farc culpan a las fuerzas militares por lo que pueda ocurrir a los agentes del CTI. Aseguraron que los constantes operativos en la zona ponen en riesgo a los funcionarios, así las cosas “no pueden garantizar la seguridad de los agentes”, señaló una fuente a SEMANA.

La Fiscalía en su momento rechazó de manera tajante el secuestro de los funcionarios y al mismo tiempo expresó apoyo a los familiares mientras pidieron a sus captores la libertad inmediata. Se abrió una investigación formal y luego se conoció que los responsables del secuestro eran justamente las disidencias de las Farc.

“La Fiscalía General de la Nación rechaza el secuestro de los servidores del CTI Bethy Amanda Mage Imbachi y Gerzón Rene Rivera Fernández, pide respeto por su vida e integridad física, y exige su liberación inmediata a las disidencias de las FARC Gaor Dagoberto Ramos”, dijo la Fiscalía.

Se trata del mismo grupo criminal que advierte, de manera reiterada, estar en disposición y alcanzar un acuerdo una negociación con el Gobierno Nacional, pero que al mismo tiempo mantiene operaciones criminales en el departamento del Cauca, atacando la fuerza pública y controlando el tráfico de estupefacientes.

La preocupación es obvia entre los compañeros de los agentes del CTI secuestrados en el departamento de Cauca, pues ahora los criminales tratan de dejar la responsabilidad en la fuerza pública que mantiene los operativos de control en la zona. Hasta el momento no han entregado ninguna prueba de supervivencia de los Funcionarios.