ISLA DE PROVIDENCIA, COLOMBIA - 22 DE NOVIEMBRE: Vista de una casa destruida en el puerto el 22 de noviembre de 2020 en Providencia, Colombia. Las islas de San Andrés, Providencia y Santa Catalina fueron azotadas por el huracán Iota en la madrugada del lunes 16 como tormenta de categoría 5, la más fuerte en afectar al país desde que se mantienen registros. La economía de las islas depende de la industria del turismo que ha estado sufriendo debido a las restricciones del coronavirus desde marzo. Según fuentes oficiales, el 98% de la infraestructura de la isla de Providencia fue destruida por los vientos de Iota. El presidente Duque se comunicó con el gobierno de los Estados Unidos en busca de ayuda humanitaria y asistencia en el manejo de crisis de huracanes durante su visita a Providencia y la isla de San Andrés la semana pasada. (Foto de Diego Cuevas / Getty Images)
Imagen de referencia. Daños en una vivienda en San Andrés causados por el huracán Iota, en 2020. | Foto: Getty Images

Nación

¿Qué se debe hacer antes, durante y después de un huracán?

En el Caribe colombiano hay alerta máxima por un posible huracán durante el fin de semana.

7 de octubre de 2022

El Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales (Ideam) reportó que la depresión tropical que está afectando las playas del país puede incrementar su intensidad durante el fin de semana hasta convertirse en huracán.

“Se pronostica que la depresión se convierta en una tormenta tropical en las próximas horas, hoy viernes en la mañana, y posteriormente se fortalezca hasta convertirse en huracán el sábado en la noche, mientras se acerca a las islas de San Andrés, Providencia y Santa Catalina”, indicó el Instituto.

Adicionalmente, ante los riesgos que pueda presentar para las playas del país, el Ideam indicó que se acordó “emitir una vigilancia de huracán para el archipiélago de San Andrés, Providencia y Santa Catalina, lo cual significa que condiciones de huracán son posibles dentro del área bajo vigilancia”.

Cumpliendo el pronóstico inicial, el Ideam informó que la depresión tropical # 13 ahora es la tormenta tropical Julia, por lo que solicitó a las comunidades estar atentas a las indicaciones de las autoridades.

Hemos tomado medidas, tenemos maquinaria disponible. Los bomberos están atendiendo podas de árboles y demás. Estamos haciendo las sugerencias que debemos hacer para poder sortear este fenómeno en las horas que nos quedan”, indicó el gobernado de San Andrés, Everth Hawkins.

Ante la alerta máxima presente en el Caribe colombiano, es importante que los habitantes de estas zonas se preparen para un eventual huracán o tormenta tropical que pueda afectar el territorio durante este fin de semana.

Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC, por sus siglas en inglés) elaboraron una guía para que las personas se preparen adecuadamente ante los retos que supone un huracán.

En primer lugar, es fundamental tener a la mano los números de emergencia (policía, bomberos, ambulancias, control de desastres, etc.). Ante una situación de riesgo, el tiempo se convierte en un potencial enemigo, así que reaccionar con prontitud puede marcar la diferencia.

Otra recomendación tiene que ver con la preparación de un kit con suministros de emergencia: pilas o baterías de repuesto, silbato para pedir ayuda, mascarilla para ayudar a filtrar el aire contaminado, una lona plástica y cinta adhesiva para armar un refugio en el lugar, una radio que opere con baterías o a manivela, kit de primeros auxilios, entre otros.

Los CDC también sugieren ubicar un refugio cercano y planificar diferentes rutas para llegar. Este punto también aplica para los propietarios de mascotas, a quienes se les recomienda remitir a los animales a una zona segura para que no corran peligro durante una eventual evacuación.

Abastecerse con suministros de emergencia

En medio de un huracán, el pánico colectivo puede derivar en que las personas acudan masivamente a los mercados para comprar alimentos. Al mismo tiempo, las condiciones agrestes del clima pueden obstaculizar la cadena de abastecimiento y transporte, bloqueando o inundando las calles. Los huracanes también pueden interrumpir el suministro de agua y electricidad.

Por esta razón, lo mejor es estar preparado y abastecerse de los productos necesarios oportunamente:

  1. Una reserva de alimentos y agua de emergencia.
  2. Una reserva de medicamentos de emergencia.
  3. Fuentes de energía de emergencia, como linternas.
  4. Artículos de seguridad y personales.
  5. Documentos importantes, incluidos documentos médicos, testamentos, pasaportes y de identificación personal.
  6. Un extintor de incendios (crucial saber cómo usarlo).

Adecuaciones en el hogar

Los CDC recomiendan:

  • Despejar el jardín. Asegurarse de que no haya nada que pueda salir volando durante la tormenta y dañar la casa. Guardar las bicicletas, los muebles de jardín, las parrillas, los cilindros de gas y el material de construcción adentro o en un lugar resguardado.
  • Cubrir las puertas y ventanas. Cerrar las persianas contra tormentas o clavar planchas de madera contrachapada sobre los marcos exteriores de las ventanas para protegerlas.
  • Estar preparado para cortar la electricidad en los siguientes casos: si se inunda la casa, si hay cables del tendido eléctrico caídos o si se debe evacuar.
  • Llenar recipientes limpios con agua potable. Se recomienda hacerlo por si se corta el suministro de agua durante la tormenta.
  • Mantener el kit de suministros de emergencia en un sitio de fácil acceso.
  • Escuchar la radio, ver la televisión o verificar las redes sociales para mantenerse informado sobre el huracán (evitando caer en noticias falsas).
  • Mantenerse dentro de la vivienda aunque se vea tranquilo el exterior. Hay que esperar hasta que se escuche o vea un mensaje oficial que diga que el huracán ha pasado. A veces, el tiempo se calma en el medio de la tormenta, pero vuelve a ponerse severo rápidamente.
  • Mantenerse alejado de las ventanas para evitar lastimarse con los pedazos de vidrio roto o escombros que el viento levante durante la tormenta.
  • Estar preparado para abandonar el lugar si las autoridades de emergencia ordenan evacuar o la casa presenta daños.