NACIÓN
¿Quién es el “particular” que fue capturado por las chuzadas a Marelbys Meza? Esta es su relación con la operación ilegal
La Fiscalía confirmó que cuatro policías de la Dijín fueron capturados en un operativo en el marco de la investigación por las interceptaciones ilegales a la exniñera de Laura Sarabia.
Los cuatro uniformados, que hacen parte de un grupo especial de la dirección investigación criminal de la Policía-Dijín, fueron capturados en las últimas horas, luego de una solicitud que hizo un fiscal de la Unidad Contra la Corrupción ante los jueces de control de garantías. Entre los capturados también hay un civil, un hombre, que resultó metido en toda la investigación.
La Fiscalía informó este jueves que efectivamente se cumplieron con las diligencias de captura en contra de los uniformados y que, como parte de la investigación, las órdenes de detención incluyeron a un civil que, según conoció SEMANA era la fuente principal de los policías, cuando redactaron los informes para involucrar a Marelbyz Meza con el Clan del Golfo.
#ATENCIÓN | Comunicado oficial de la #Fiscalía General de la Nación. pic.twitter.com/reoz19kZOD
— Fiscalía Colombia (@FiscaliaCol) August 31, 2023
“Como parte de la investigación relacionada con las interceptaciones ilegales a las comunicaciones de las exempleadas de la exjefe de Gabinete de la Presidencia de la República, Laura Camila Sarabia Torres, fueron capturados cuatro integrantes de la Policía Nacional y un particular”, dijo la Fiscalía tras confirmar las capturas.
De acuerdo con la investigación, los investigadores de la Dijín recopilaron datos entregados supuestamente por una fuente de información que, de acuerdo con las primeras versiones, desapareció del radar de las mismas autoridades, sin embargo, la Fiscalía encontró a esa “fuente” ahora capturada en el marco de las diligencias.
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“Las diligencias están en curso y son realizadas por funcionarios del CTI, con apoyo de la Policía Nacional, en distintos puntos de Bogotá. Corresponden al cumplimiento de órdenes de captura emitidas por un juez de control de garantías solicitadas por el fiscal titular del caso, quien bajo su autonomía e independencia hizo la petición al juez y este las expidió”, advirtieron desde el ente acusador.
Con los informes de policía judicial que redactaron los uniformados, ahora capturados, con la información entregada al parecer por esa “fuente” fue que lograron las órdenes de interceptación a los teléfonos de Marelvis Meza y Fabiola, la empleada de servicio de Laura Sarabia. Luego de algunos días, advirtieron que la información no era contundente y desactivaron la interceptación.
Este civil capturado por la Fiscalía, en el marco de los procedimientos y las investigaciones por las interceptaciones ilegales ordenadas desde la Dijín y en contra de la exniñera de Laura Sarabia, será procesado por el delito de falso testimonio, puesto que entregó datos al ente acusador que no correspondían a la realidad. En las próximas horas, junto a los policías serán presentados ante los jueces de control de garantías de Bogotá.
La historia de chuzadas
Luego de que el fiscal general, Francisco Barbosa, revelara la grave situación que vivió Marelbys Meza, la exniñera del hijo de la jefe de gabinete del Gobierno, Laura Sarabia, cuya línea telefónica fue interceptada por agentes de la Dijín, la Policía Nacional confirmó este jueves que un investigador de esa institución solicitó que sumaran dos líneas en el marco de una investigación contra el Clan del Golfo.
Sin embargo, 72 horas después de que inició la intercepción, el investigador pidió cancelar la actividad argumentando que “no correspondía a la motivación fundada”.
Policía Nacional confirma que un investigador de la Dijin sí pidió sumar dos líneas telefónicas a una investigación contra el Clan del Golfo, pero el proceso fue frenado 72 horas después. Una de las líneas era de la exempleada de Laura Sanabria. pic.twitter.com/qSd4m8R7Vi
— Javier Contreras 🎙 (@jcontrerasa) June 1, 2023
En un comunicado de la Policía se señala que el pasado miércoles 31 de mayo un analista de la Dijín rindió una declaración juramentada ante la Fiscalía.
“El analista informó que ese requerimiento obedecía a su actuación dentro de una investigación que un fiscal había autorizado, el 26 de enero de 2023, mediante la cual se ordenó ingresar dos líneas telefónicas al proceso investigativo contra una organización criminal, con base en solicitud realizada por un investigador de la Dijín”, señala el texto.
“Tras verificar la información, se determinó que efectivamente en la fecha en mención se autorizó dicha actividad, la cual comenzó a implementarse el 30 de enero, pero que 72 horas después el analista solicitó, ante la autoridad competente, cancelar la línea del proceso investigativo, argumentando que no correspondía a la motivación fundada”, subraya el comunicado en el que la Policía manifiesta que su dirección general dispuso que se realizaran las investigaciones de rigor.
“Ante estas informaciones suministradas por el Director de la Dijín, la Dirección General dispuso que la Inspección General adelantara las actuaciones de rigor”, concluye el texto.
“Las chuzadas volvieron a Colombia”.
En rueda de prensa, el fiscal general, Francisco Barbosa, calificó de “aberrante” las interceptaciones a Marelbys Meza. El jefe del ente acusador señaló que se revive en uno de los peores escenarios históricos de Colombia en violación de derechos humanos, haciendo referencia a las acciones que adelantó el F-2 del Comando de Inteligencia y Contrainteligencia durante la década de los ochenta y, más recientemente, el DAS, lo que llevó a que se ordenara su cierre.
“Es un día lamentable para el Estado Social del Derecho”, aseveró el jefe del ente investigador. Las acciones estuvieron dirigidas a manipular varios informes con el fin de lograr interceptar las líneas celulares de la niñera y de otra persona que trabajaba en la casa de Laura Sarabia.
“Se inventan un informe de Policía Judicial de la Dijín, las convierten en miembros del Clan del Golfo y las escuchan y posteriormente en la tarde, como si estuviéramos en la Gestapo en Colombia, la trasladan en un carro, le hacen el polígrafo que no tienen nada que ver con su seguridad nacional”, agregó Barbosa.
Por estos hechos, en los próximos días serán citados a interrogatorio las personas que estuvieron involucradas en estos seguimientos e interceptaciones ilegales. En la investigación ya se pudo establecer que fueron agentes judiciales de la Policía Nacional los que adulteraron la información para que un fiscal de crimen organizado interceptara dos líneas celulares. “No puede admitirse, desde ningún punto de vista, que la violación de los derechos fundamentales de los colombianos sean aceptadas”.
“Es un caso aberrante desde el punto de vista judicial y que nos pone de nuevo en el peor escenario histórico de Colombia, que es la violación de derecho humanos incluso previo a la Constitución de 1991″, aseguró el jefe del ente investigador. “Todo está evidenciado, tenemos los documentos, todo con trazabilidad judicial, hemos trabajado en los últimos cinco días con todo el equipo técnico e investigativo, hay documentos”.
El asunto es de extrema gravedad y así lo informó en detalle el fiscal, que reveló toda la trazabilidad de los hechos, que no son nuevos, y hasta ahora se empieza conocer la magnitud de las irregularidades.
Las chuzadas habrían empezado desde el 30 de enero, el día mismo en el que Laura Sarabia presentó la denuncia por el robo de dinero.
En ese momento, trataron de iniciar las chuzadas, pero ante la negativa del fiscal del caso que actuó con independencia, la Policía Judicial produjo un informe, a todas luces irregular, que justificaba las interceptaciones a Marelbys Meza y a otra persona que iba continuamente a la casa de Sarabia, y que era quien les hacía las labores domésticas por días, llamada Fabiola.
“Se inventan un informe de Policía Judicial, meten a estas dos personas, y se lo entregan a un fiscal de Chocó que está investigando todo lo relacionado con el Clan del Golfo, esto con la excusa de que Meza era la cocinera de alias Siopas”, contó el fiscal Barbosa en rueda de prensa desde el búnker de la Fiscalía General.
Para entender el hecho y por qué resultó para el fiscal de Chocó importante cumplir con la orden, es que Siopas es un objetivo de alto valor, uno de los cabecillas de la organización criminal del Clan del Golfo, y uno de los herederos del poderoso narcotraficante extraditado a Estados Unidos, alias Otoniel.
Pero, además, como confirmó el fiscal Barbosa, en la orden de trabajo señalaban, engañando a la justicia, que la fuente que entregaba la información y justificaba las chuzadas era de altísima credibilidad.