Nación
¿Quién es Gabriel González, el presunto asesino del niño encontrado en Melgar?
El hombre tiene cerca de 50 años y el asesinato fue premeditado. Las autoridades lo buscan por todo el centro del país.
Este martes 4 de octubre Colombia se despertó con una terrible noticia: otro menor de tan solo cinco años había muerto, al parecer, a manos de su propio padre. Esto se supo luego de que hubiera sido reportado como desaparecido en Tocancipá, pero finalmente su cuerpo fue hallado sin vida en Melgar, a dos horas de Bogotá.
El hombre, que para las autoridades sería el presunto asesino de Gabriel Esteban, es Gabriel Enrique González Cubillos, un sujeto de 50 años quien residía en el municipio de Tocancipá, a 30 minutos de la capital del país y trabajaba como archivador en dicho lugar.
Lo que se sabe hasta el momento es que sostuvo una relación sentimental con la madre de Gabriel Esteban por cerca de seis años, pero tras intentar y hacer que funcionase en repetidas ocasiones sin éxito, tomaron la decisión de terminar la relación. Al hombre, al parecer, no le gustó la idea, y esa sería la causa de la muerte del menor; además de eso, tendría trastornos mentales.
Sumado a esto, el crimen del pequeño fue premeditado, pues González grabó dos videos en una memoria USB, uno en el que le reclamaba y reprochaba momentos de la relación a la madre del menor y del por qué había acabado su relación, y en el otro, anunciaba que mataría a su hijo.
El hombre dejó la USB en el baño de la casa de ella (en Usme) cuando fue a recoger a Gabriel Esteban y le pidió prestado el baño para hacer sus necesidades fisiológicas, pero ni ella ni su familia se dieron cuenta hasta que él le avisó a ella que al interior de su baño había una memoria, sobre las 10 p. m. del pasado 2 de octubre.
Sin que bastara lo anterior, Gabriel Enrique también le dejó una nota a su hermana. Sobre las 9 p. m. se comunicó con ella y le dijo que revisara unos papeles que él le había dejado en la moto que estaba en el barrio Castilla, en la localidad de Kennedy, al occidente de la capital. Allí había 8 millones de pesos y algunas sugerencias de lo que hiciera con sus pertenencias.
Él les avisó respectivamente a las mujeres, cuando estaba en Melgar, en el departamento del Tolima, y se encontraba en un hotel llamado El Rey, y a eso de las 5 de la mañana el padre del menor lo asesinó asfixiándolo. Se lo hizo saber a la madre, por un mensaje de WhatsApp y una fotografía del pequeño en la cama de hospedaje.
El presunto asesino escribió un incomprensible mensaje que encontraron las autoridades con el cuerpo sin vida del pequeño: “Ahora sí puede ser feliz”.
Mientras que Fabián Vidal, el dueño del Hotel del Rey, narró a SEMANA cómo fue la llegada del pequeño Gabriel junto a su padre a las instalaciones. En ese momento, según dijo, no notó nada extraño.
González Cubillos y su hijo, Gabriel Esteban, llegaron a las 10:50 p. m. del domingo 2 de octubre a las instalaciones. Un taxista que trabaja con ellos fue el encargado de traerlos, pues frecuenta la zona del terminal, recomienda el hotel y acerca a los huéspedes.
“Él muestra su cédula física y –no sé si sería verdadera o no–, coincidía con el registro del niño y con todos los apellidos”, dijo Vidal. En ese sentido, el presunto homicida se presentó en el hotel con su nombre real. A su llegada el domingo, González Cubillos solamente pidió una noche, aunque dijo que probablemente alargaría su estancia.
Durante el registro, Vidal contó el recepcionista que los atendió, no vio nada raro. Las cámaras de seguridad tampoco mostraron un comportamiento sospechoso por parte del sujeto. De hecho, coincidieron que en que se trataba de una relación entre padre e hijo completamente normal. Para ese momento, no se notó ningún indicio que pudiera alertar sobre la tragedia que estaba próxima a suceder.
Lo curioso fue que el hombre no entregó la habitación. En la mañana del lunes, el hombre saludó, dijo que iría a desayunar y se dirigió hacia la zona donde están los restaurantes. “Cuando en horas de la tarde nos percatamos de que la habitación no la habían entregado, mandamos a la camarera a golpear la habitación.
Ella golpea, no hay respuesta alguna, así que procedió a abrir la puerta. Desde ese ángulo no se alcanzó a ver el cuerpo del niño, ella vio que el equipaje, la ropa y todas sus cosas estaban encima del mueble, volvió y cerró”, contó Vidal. En tal virtud, el único pensamiento que pasó por el personal del hotel fue que se habían ido a disfrutar de algún atractivo turístico.
Fabián Vidal narró que les llegó un mensaje de WhatsApp preguntando por el logotipo, una corona. Efectivamente, se trataba de su hotel. En ese mismo instante recibió una llamada de las autoridades y no había colgado en el teléfono cuando uniformados de la Policía de Melgar ya habían llegado a su despacho.
Las autoridades le explicaron el caso y procedieron a realizar la inspección de la habitación. Lo que encontraron los dejó perplejos. “Abrimos la habitación y, desafortunadamente, encontramos el cuerpo sin vida. Estaba acostado en la cama, tapado con una sábana de pies a cabeza. Para mí fue muy impactante, yo lo que hice fue salir de la habitación (...). Es algo increíble, algo que uno nunca se imagina. Se veía una relación de padre e hijo normal. No había absolutamente nada anormal”, manifestó Vidal a SEMANA.
Así fue la captura
El capturado fue identificado como Gabriel Enrique Cubillos, un hombre de 50 años de edad y que sería el responsable de asesinar a su propio hijo, luego de llevárselo de Bogotá hasta el municipio de Melgar, en el Tolima, y dejar el cuerpo abandonado en un hotel.
La investigación de la Fiscalía, luego de la denuncia de la mamá del pequeño Gabriel Esteban, es que el hombre llegó a su vivienda, durante el fin de semana, y con la excusa de tener la custodia del niño durante estos días, se lo llevó hasta Melgar, donde, de acuerdo con la denuncia, lo asesinó y envió un aterrador mensaje a la mujer, informando que mató al niño como venganza.
En un operativo, la Policía y la Fiscalía trabajaron para dar con la captura de este hombre que finalmente fue encontrado, en un vehículo mientras se movilizaba entre los municipios de Melgar, escena del crimen, y Girardot, donde, al parecer, esperaba esconderse de las autoridades.
La Fiscalía confirmó la captura del hombre y el procedimiento que sigue con esta persona que será presentada ante jueces de Control de Garantías para imputar cargos por homicidio agravado. Los investigadores a cargo del proceso aseguraron que tienen todo el material probatorio para demostrar la presunta responsabilidad en el brutal crimen.
En audiencias de Control de Garantías, la Fiscalía presentará el material de prueba y solicitará, dada la gravedad de los hechos, una medida de aseguramiento en centro carcelario. El hombre tendrá la posibilidad de aceptar su responsabilidad en el macabro hecho y avanzar en una eventual condena en su contra.
Los investigadores tenían, desde que se denunciaron los hechos y la desaparición, la plena identidad del presunto asesino; incluso con nombres, apellidos y número de cédula. Todos estaban confiados en lograr la captura, que por fortuna se logró en las últimas horas, gracias al apoyo conjunto de todas las autoridades.
SEMANA llegó hasta la humilde vivienda que compartía el pequeño Gabriel con su mamá en la localidad de Ciudad Bolívar en el sur de Bogotá y allá los vecinos aseguraron que el ahora capturado sometía a graves maltratos verbales y a violencia psicológica al menor, al punto que debieron denunciar lo que estaba pasando.
“Llegaba acá, me saludaba, me abrazaba, jugábamos, hablábamos, lo que hace un niño, acababa de cumplir cinco años. El sábado por la mañana fue la última vez que lo vi, estaba alegre porque iba a estar el fin de semana con su papá y yo le dije que portara juicioso, que se acordara que la mamá lo esperaba”, dijo un vecino a SEMANA.
De acuerdo con lo que explicaron desde la Fiscalía, las audiencias preliminares de legalización de captura, imputación de cargos y solicitud de medida de aseguramiento se adelantarán en la capital del departamento de Tolima, por razones de jurisdicción. Es decir, en Ibagué, Gabriel Enrique Cubillos será presentado ante los jueces de Control de Garantías como el presunto asesino de su propio hijo.
Durante las audiencias, los investigadores presentarán elementos de prueba que incluyen documentos para advertir que, con anterioridad la mamá del pequeño Gabriel y algunos vecinos, anticiparon del riesgo que corría el menor cuando se encontraba al lado de su padre, será parte de la evidencia para insistir en una medida de aseguramiento.