Bogotá
Relato de cómo un policía atendió parto con hilo y una hoja de bisturí
El patrullero de la estación de carabineros de Ciudad Bolívar hizo hasta lo imposible para salvar a una recién nacida y a su madre.
El subintendente John Alexander Corredor Peña tuvo dentro de sus manos el milagro de la vida el pasado 26 de junio. Diez años lleva al servicio de la comunidad desde la Dirección de Carabineros y Protección Ambiental de la Policía Nacional. Mientras estaba de servicio en la localidad de Ciudad Bolívar en el sur de Bogotá recibió el llamado angustioso de un hombre que llegó hasta el fuerte policial.
El uniformado decidió atender el llamado de socorro, por cuanto a la ambulancia requerida le había sido imposible llegar al lugar de los hechos. Corredor Peña tiene entrenamiento como técnico en enfermería y con algo de nervios decidió iniciar las acciones necesarias para que la mujer pudiera dar a luz.
Así que corrió hasta la casa en la que estaba la madre de nacionalidad venezolana, una vivienda muy humilde. “Ingresé a la vivienda en donde se observa a la señora en la mitad del corredor”, dice el uniformado, al punto que no había tiempo de moverla. En ese momento la atendió.
Relata con minucia cada paso que siguió, estaba emocionado, sentía su corazón acelerado, pero mantuvo la calma, por esa razón describe el procedimiento para traer el nuevo ser: " se le prestan las atenciones pre hospitalarias en la atención del parto. Posteriormente se buscaron algunos elementos, pero como la familia es de escasos recursos, con lo único que se pudo contar fue con una jeringa, gasas y un bisturí”, indica que era consiente que esos elementos no eran suficientes para el procedimiento sin correr riesgo de infección, así que siguió buscando cómo avanzar sin generar mayor riesgo.
Encontró un hilo, que terminó siendo clave, “al cordón umbilical se le hizo la sujeción con el hilo para poder cortarlo, junto con una hojita de bisturí esterilizado”, fue una niña la que él le entregó a la mujer. Sin embargo, antes de pasarla a sus brazos, le dio un suave golpe para que la niña llorara, para así garantizar que estaba oxigenando bien. Le realizó la succión de vías nasales y orales, evitando la aspiración del líquido amniótico según explicó a SEMANA.
Aun estaba en el piso la madre cuando tuvo en sus brazos a la pequeña, “coloqué mis rodillas como base y recosté a la madre sobre mis piernas para que la madre pudiera apoyarse y a su vez enseñarle a amamantar a la menor, para evitar complicaciones”, indica que permaneció varios minutos arrodillado mientras la sostenía, hasta que llegó la ambulancia.
Cuando el paramédico recibió a los dos pacientes los trasladó al hospital más cercano, la menor presentaba desnutrición, hasta el momento aún permanece a una incubadora, mientras el subintendente John Alexander Corredor la visita cada vez que tiene un espacio libre y le lleva pañales, en este momento está organizando una donatón para que la menor tenga lo básico teniendo en cuenta que sus padres viven en condiciones vulnerables. Agradece a las personas que quieren colaborar acercarse al Fuerte de la Policía de Carabineros de Cuidad Bolívar. Espera que Dalymar, como llamaron a la pequeña se recupere pronto para que esté se reúna con sus padres.
El uniformado resume toda la jornada así: para mí es una experiencia nueva, sentí mucha adrenalina, pero también tuve mucha calma, porque sabía que tenía que darles seguridad y confianza tanto al bebe que venía en camino como a la mamá que se encontraba en trabajo de parto”.