Fuerte respuesta de De la Calle a Iván Márquez

Apenas horas antes de viajar a La Habana, el jefe del equipo negociador del gobierno, Humberto de la Calle, le hizo varios reproches a la guerrilla de las FARC, cuyos principales cabecillas llevan una semana desfilando por varios medios de comunicación pronunciando un discurso que ha generado mucha resistencia y hasta indignación en un mayoritario sector de la opinión pública colombiana.

De la Calle no fue indiferente a la situación y la rechazó con dureza. Consideró que los debates en radio, televisión, en los que han participado voceros de la guerrilla, a los que llamó “despliegue de las FARC en los medios de comunicación”  se pueden entenderse como un “entrenamiento” para que la guerrilla haga política sin armas. Pero calificó dichas intervenciones como altamente lesivas para el proceso de paz que ya cumple más de dos años.

“Sus intervenciones son llenas de excusas y esguinces. Reclamamos un reconocimiento real a sus víctimas. La actitud de las FARC es arrogante, reclamamos por lo menos un lenguaje más compasivo con las víctimas”.

Así lo dijo De la Calle en un conversatorio en el que alternó con el expresidente de Costa Rica y premio Nobel de Paz Óscar Arias. En su intervención, el jefe del equipo negociador también pareció enviarle un mensaje directo a alias ‘Iván Márquez’, quien el pasado fin de semana, en entrevista con Noticias UNO, dijo que las FARC no estaban dispuestas a pagar un solo día de cárcel.

El jefe negociador, primero, cuestionó la actitud de la guerrilla de haber rechazado el marco jurídico para la paz aprobado por el Congreso cuando ni siquiera se había iniciado los diálogos en Cuba. Y les aclaró que hoy el mundo no es como en el año 1991, que ya no se puede hablar de amnistías generales y que hay estándares internacionales que Colombia debe cumplir en materia de justicia. “Alguna parte de la pena alternativa tiene que ser efectiva, no va a ser un simulacro de pena”.

Sobre la justicia transicional, De la Calle volvió a elogiar la propuesta del expresidente César Gaviria, respecto a que se aplique también a no combatientes que tuvieron alguna responsabilidad con los actores del conflicto. Aclaró que la justicia transicional no es una versión ligera de justicia y que el objetivo de este proceso es que en Colombia se proscriba definitivamente el uso de las armas para hacer política. Además dijo que los acuerdos en esta materia están en manos de las FARC. “El balón de la justicia transicional está en su cancha (refiriéndose a las FARC)”.

De la Calle también dedicó algunas palabras a los más críticos del proceso de paz. Dijo que todas las críticas las está asumiendo como “tarjetas amarillas” que sirven como alertas para el desarrollo de las negociaciones. Y aunque admitió que el 76 % de los colombianos esté en contra de la participación en política de las FARC, luego de dejar las armas, aclaró que ese es uno de los puntos determinantes para firmar el acuerdo definitivo. También recalcó que la guerrilla dejará las armas tan pronto se firme el acuerdo definitivo y que no harán una vigilancia con fusiles del cumplimiento de los acuerdos.