Nación
Reunión de Policía, Embajada de Estados Unidos y Naciones Unidas, para profundizar la “seguridad humana”, no contó con presencia de MinDefensa
Uno de los temas que más ha dado de qué hablar desde que el presidente Gustavo Petro tomó posesión de su cargo es el fuerte giro que está planteando en las Fuerzas Militares y de Policía, con lo que ha denominado la “política de seguridad humana”, el concepto aún no es muy claro, pero poco a poco se han venido dando luces de la propuesta de mandatario. Primero, con la histórica barrida en la cúpula de Policía, que buscaba que asumieran como director de la Policía el general Henry Sanabria y como subdirectora la general Yackeline Navarro y que de paso, en voz del mismo presidente, generó la salida de miembros de la institución posiblemente involucrados en problemas de violaciones de derechos humanos.
Hoy se dio un encuentro de primer nivel para abordar este tema de frente y contó con la participación de el subsecretario de Asuntos Internacionales de Narcóticos de la Casa Blanca, la Embajada de EE. UU. en Colombia, Naciones Unidas y el director General de la Policía Nacional, quienes dieron a conocer el programa de asistencia técnica en Derechos Humanos. Sin embargo, en el encuentro hubo un gran ausente el ministro de Defensa, Iván Velásquez, encargado de aterrizar esta política en las tropas.
Pese a que su ausencia fue notable, en el evento se dieron importantes noticias, y quedó sobre el tapete que la tan mentada propuesta de eliminar el Escuadrón Móvil Antidisturbios (Esmad) no está tan cerca de desaparecer como se creía. En el encuentro fueron protagonistas, miembros de esta fuerza, quienes hasta compartieron tarima con el director de la Policía, general Henry Sanabria.
“Seis meses después del anuncio de un paquete de asistencia por ocho millones de dólares con proyección a dos años, el subsecretario de Asuntos Internacionales de Narcóticos y Aplicación de la Ley INL, Todd Robinson, anuncia la entrega de otros 3 millones 850 mil dólares para robustecer la asistencia técnica y establecer un Centro de Normas Policiales, encaminado a incorporar los estándares internacionales en derechos humanos y procurar que la formación de los policías se traduzca en un servicio más humano y cercano al ciudadano”, fueron algunos de los avances que se concretaron hoy.
Las propuestas no son de poca monta, plantean la incorporación de normas y estándares internacionales en derechos humanos para el servicio y la doctrina de la Policía Nacional; el diálogo constante entre la Policía y las organizaciones de la sociedad civil; el fortalecimiento de la justicia disciplinaria; asistencia a la Oficina del Comisionado de Derechos Humanos de la Policía.
Esta es justamente una de las noticias que se dio en el trascendental encuentro para aterrizar la política de “seguridad humana”, la Policía tendrá en adelante como fortaleza y complemento el Grupo Especial de Protección de los Derechos Humanos y la Paz.
Este anuncio trascendental de respaldo a la decisión del Gobierno del presidente Gustavo Petro y del Mando Institucional para dar un giro en favor de la vida, estuvo acompañado además por la representante de la Alta Comisionada de la ONU para los DDHH, Juliette Rivero; la representante del PNUD en Colombia, Sara Ferrer; el director de Usaid Colombia, Peter Natiello; el director de la Oficina de Control de Drogas de la Casa Blanca, Raúl Gupta; y el director de INL en Colombia, Brian Harris. El gran ausente fue el ministro de Defensa, Iván Velásquez.