Revelan cómo consiguió las ampolletas de fentanilo el hombre que pretendía venderlas en una zona de rumba en Bogotá

La Policía Nacional, por medio de la exitosa ‘Operación Bogotá’, logró la captura y detención de un hombre que tenía en su posesión nueve ampolletas del peligroso opioide sintético conocido como fentanilo. El arresto fue posible gracias a las unidades del Modelo Nacional de Vigilancia Comunitaria por Cuadrantes (MNVCC) que patrullaban la zona de bares de la localidad de Bosa.

En una rutina de patrullaje, el cuadrante de Policía recibió una alerta por parte de la comunidad sobre la presencia de una persona sospechosa en la calle 69 con carrera 77 sur. Al acercarse al individuo, este mostró signos de angustia e intentó evadir a los uniformados. Tras realizar una requisa, los agentes encontraron nueve ampolletas de citrato de fentanilo de 10 mililitros ocultas en el interior de su chaqueta.

De acuerdo con las investigaciones, el capturado pretendía distribuir el peligroso medicamento a quienes contactaba a través de redes sociales, manteniendo su identidad en el anonimato y acordando encuentros para la entrega del producto. El precio acordado para la transacción era de 450 mil pesos.

Las pesquisas revelaron que el sujeto trabajaba como operador en una bodega ubicada en la localidad de Fontibón, donde se almacenaban diversos fármacos controlados. Todo parece indicar que de ahí habría obtenido el fármaco.

“Trabajaba en unas bodegas en Fontibón encargadas del almacenamiento de medicamentos de alto costo, los cuales eran distribuidos posteriormente en la capital de la República y otros municipios aledaños. Esta persona aprovechaba que trabajaba en estas bodegas para sustraer el fentanilo para la comercialización en la parte externa”, detalló el coronel Javier Gallego, comandante Operativo de Policía Metropolitana de Bogotá.

Sorprendentemente, este individuo, de tan solo 23 años, cuenta con un historial delictivo que incluye anotaciones por hurto, lesiones personales y tráfico, fabricación o porte de estupefacientes.

La Policía Nacional subrayó la importancia de esta incautación, ya que con ella se han evitado potencialmente graves consecuencias para la salud de entre 90 y 100 personas. Como recordatorio, “una dosis de 2 miligramos de fentanilo puede arrebatar la vida del consumidor”.

¿Qué causa el fentanilo?

El fentanilo es un potente opioide (analgésico) sintético que tiene efectos significativos en el cuerpo y puede causar la muerte en situaciones de abuso, sobredosis o uso indebido. De acuerdo con los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de EE. UU., las causas de las muertes relacionadas con el fentanilo son:

• Depresión respiratoria: El fentanilo actúa sobre los receptores opioides en el sistema nervioso central, lo que puede conducir a una depresión grave del sistema respiratorio. Esto significa que la persona puede dejar de respirar o tener una respiración extremadamente lenta, lo que, en casos graves, puede resultar en falta de oxígeno y, en última instancia, la muerte.
• Sobredosis: El fentanilo es extremadamente potente, hasta 100 veces más que la morfina, lo que significa que incluso pequeñas cantidades pueden resultar en una sobredosis potencialmente letal. La sobredosis de fentanilo puede provocar la supresión del sistema respiratorio, la pérdida del conocimiento, convulsiones y la muerte.

• Tolerancia y dependencia: El uso continuado de fentanilo puede llevar a una mayor tolerancia, lo que significa que se necesita una dosis cada vez mayor para lograr el mismo efecto. Esto puede llevar a un ciclo de aumento del uso y aumentar el riesgo de sobredosis.
• Contaminación y falsificación: En ocasiones, el fentanilo se encuentra en drogas ilícitas de uso recreativo, como la heroína o las píldoras falsificadas. Los usuarios pueden no ser conscientes de que están consumiendo fentanilo, lo que aumenta el riesgo de sobredosis accidental.
• Interacción con otras sustancias: El fentanilo puede interactuar de manera peligrosa con otras sustancias, como alcohol u otros medicamentos, aumentando el riesgo de efectos secundarios graves.