Tres imputados más por reventa de boletas de partidos de la Selección

Tres personas más deberán responder ante la justicia por la jugosa reventa de boletas para juegos de la Selección Colombia de fútbol en las eliminatorias para la Copa Mundo Rusia 2018, con lo que las entradas alcanzaron valores que, incluso, triplicaban el original.

Se trata de los socios de TuTicketYa, firma que en su momento signó un contrato de participación con Ticket Shop, el operador oficial designado entonces por la Federación Colombiana de Futbol (FCF), para la venta de las boletas para los partidos que jugó el combinado nacional en Barranquilla como local.

En audiencia que se programó el vienes 5 de abril, la Fiscalía buscará imputar a Elías Yamhure Dacarett, como representante legal de TuTicketYa, y a sus socios Rodrigo de Jesús Rendón (también dueño del Real Cartagena) y Medardo Alberto Romero.

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Los cargos, según indicó un comunicado del ente acusador, son agiotaje (especulación para modificar los precios de los productos), concierto para delinquir y corrupción privada.

En los procedimiento de allanamientos iniciales, la Fiscalía halló un acta de TuTicketYa en la que sus tres socios establecieron los precios de reventa de lo boletos que habrían sido desviados a través suyo, así como comprobantes de entrega a otros distribuidores.

Mediante evidencia física y testimonial, los investigadores encontraron evidencia de 3.353 boletas que habrían habrían sido revendidas entre el 15 y el 24 de mayo de 2017. En total 952 boletas de la localidad occidental, 779 boletas de la localidad oriental y 1.622 boletas de las localidades norte y sur.

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Los aficionados que compraron en reventa las boletas de Norte y Sur pagaron entre 170.000 y 200.000 pesos por boletas que costaban originalmente 60.000 pesos. En oriental, los aficionados pagaron 400.000 pesos por boletas por la mitad de su valor. En occidental, en las boletas de 350.000, el incremento fue hasta de 800.000: el 229 por ciento.

Los que ya aceptaron

Durante la primera fase de la investigación, la Fiscalía imputó cargos a César Ronaldo Carreño Castañeda e Iván Darío Arce Gutiérrez, representante legal y gerente financiero de TicketShop (Comercializadora de franquicias S.A.), respectivamente, como presuntos responsables de los delitos de Agiotaje, concierto para delinquir y ofrecimiento engañoso de productos y servicios.

Ante los elementos materiales probatorios presentados por el ente acusador, los empresarios aceptaron su responsabilidad en los hechos.

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"El material recaudado indica que por las 3.353 boletas detectadas los encargados de la venta de las entradas obtuvieron $1.154’980.007, cuando en realidad el costo de la boletería era de $578’970.000. En pocas palabras, por la reventa, habrían logrado una utilidad de $576’010.007", indicó la Fiscalía General.

En su momento, TicketShop, encargada de la venta de las boletas, afirmó que había puesto a la venta 6.000 entradas en su página web y precisó que las restantes fueron entregadas a los abonados del partido de la eliminatoria que se jugó en Barranquilla el 5 de septiembre de 2017, en el que Colombia enfrentó a Bolivia.

Lo que halló la Súper

La Superintendencia de Industria y Comercio (SIC) pudo establecer que Ticketshop habría desviado más de 42.000 boletas con fines de reventa que fueron entregadas para tal propósito al autodenominado “Grupo / Socios Ticket Ya” (Elías José Yamhure Daccarett / Ticket Ya, Medardo Alberto Romero Riveros, Rodrigo Rendón Cano, Rodrigo Alejandro Rendón Ruiz, David Alberto Romero Vega y Roberto Saer Daccarett).

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La tercera fase está relacionada con la reventa a precios superiores a los de taquilla respecto de la boletería desviada por parte de los integrantes del autodenominado “Grupo / Socios Ticket Ya” con el conocimiento y autorización de la Federación Colombiana de Fútbol y sus altos directivos.

Sobre la ocurrencia de estos hechos, obran pruebas de las liquidaciones de algunas de las ventas al por mayor de boletería hechas a precios de hasta 350 por ciento superiores del precio de taquilla, realizadas en oficinas de TuTicketYa en Barranquilla, lo cual hace suponer que las boletas adquiridas por el público se adquirieron con sobreprecios incluso superiores. Así mismo, obran en poder de la Superintendencia, documentos titulados como “actas de socios” en los que se acordaron fijar los precios de reventa de la boletería por localidades, tal como si se tratara de precios oficiales.

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Adicionalmente, otras pruebas acreditan que la FCF, a través de sus más altos directivos, autorizó el desvío de la boletería e incluso estuvo informada de los cortes de cuentas entre el operador oficial de la boletería, TicketShop, y TuTicketYa.

Ahora, que llegó la hora de las responsabilidades penales, la justicia está pendiente deteminar la culpabilidad de los señalados en este segundo tramo de la investigación y aún queda preguntarse qué sucederá con las acusaciones sobre varias de las cabezas de la Federación, que han sido señaladas también de participar en este juego ilícito.