Homenaje
“César Rincón me dio por la cabeza”: Camilo Llinás
En entrevista con SEMANA, el empresario de la Santamaría de Bogotá explica el impacto económico que tuvo el triunfo de César Rincón en España.
Cuando Camilo Llinás asumió la empresa de la plaza de Santamaría de Bogotá, en 1986, le pagaba 8.000 dólares a César Rincón por corrida. Por eso, cuando el colombiano triunfó en Madrid, fue uno de los más preocupados. Tenía que sacar un dineral para garantizar la presencia de César en su plaza. Reveló que tuvo que pagarle hasta 100.000 dólares.
No solo eso. Rincón le decía qué ganaderías debía contratar, y los toreros que tenía que contratar. Pero César, ¿entonces usted se lleva toda la taquilla y me va a hacer los carteles?”, recuerda Llinás el reclamo que le hacía al torero y su apoderado. Pero no había nada qué hacer. Era la primera figura del toreo, y era bogotano. Había que aceptar las condiciones. “Tuvimos unas peloteras fenomenales, pero siempre llegamos a acuerdos. La Santamaría vivió sus años de oro”.