Nación

Sacerdote cucuteño fue asesinado en Angola

El padre Manuel Ubaldo Jáuregui Vega estaba en el país africado desde 2016. Pertenecía a los Misioneros de Yarumal.

9 de marzo de 2021
El padre Manuel Jáuregui estaba en Angola realizando trabajo junto a otros tres sacerdotes. Foto: Cortesía archivo particular
El padre Manuel Jáuregui estaba en Angola realizando trabajo junto a otros tres sacerdotes. Foto: Cortesía archivo particular | Foto: Padre Manuel Jáuregui

El padre Manuel Ubaldo Jáuregui Vega murió apuñalado este lunes en Angola, país africano al que llegó como misionero en 2016, con el ánimo de apoyar la labor de los Misioneros de Yarumal, congregación que hace presencia en el continente africano desde la década de los 80.

Jáuregui Vega, que tenía 36 años y era oriundo del barrio Cuberos Niño, Cúcuta (Norte de Santander), murió luego de que se presentara un incidente con el vehículo que conducía. El sacerdote, al parecer, golpeó una motocicleta y el dueño de esta fue quien lo mató después de apuñalarlo varias veces con un cuchillo.

El padre Hernán Pinilla, director de Comunicaciones de los Misioneros de Yarumal, le compartió a SEMANA que se ordenó como sacerdote en 2015, “y fue enviado al año siguiente a Angola. Allá atendemos una parroquia en un suburbio de Luanda (capital de Angola), tenemos un grupo de seis muchachos que se forman como seminaristas”. En esta ciudad, el sacerdote cucuteño realizaba sus labores religiosas con otros tres sacerdotes, dos colombianos y uno africano.

Según le dijo a Caracol Radio Luz Marina Vega, la madre de crianza del sacerdote, “siempre fue una buena persona, vivió para servir a la comunidad y nos duele su partida, y más en estas condiciones en donde está tan lejos, no sabemos qué va a pasar ahora y necesitamos la ayuda del Gobierno para poder traerlo hasta esta región de frontera”.

El padre Manuel Jáuregui se ordenó sacerdote en el 2015.
El padre Manuel Jáuregui se ordenó sacerdote en 2015. Foto: Cortesía archivo particular | Foto: Padre Manuel Jáuregui

La familia busca traer el cuerpo al país, una situación que representa un alto costo y que se puede dificultar por la situación de pandemia que se vive en el mundo. Desde la comunidad misionera, el padre Pinilla compartió que en la tradición que se ha extendido entre algunos sacerdotes es que sean sepultados en las comunidades donde prestaron sus servicios, aunque si las familias tienen otros deseos pueden adelantar el proceso.

Tras el ataque, el padre Manuel fue trasladado a un centro médico donde falleció por la gravedad de las heridas. El agresor fue capturado por las autoridades y permanece bajo custodia.

El padre Pinilla contó que los Misioneros de Yarumal realizan sus labores con comunidades en Latinoamérica y África, a este continente llegaron desde 1980 y solo tuvieron una situación de seguridad cuando secuestraron a uno de los misioneros. Posteriormente, los sacerdotes que estaban en Camerún tuvieron que dejar el país por la guerra civil que se presentó allí, pero fue una recomendación de los organismos de seguridad. En la actualidad cumplen con su labor misional en Angola, Costa de Marfil y Kenia.