San Andrés marchará por sus derechos

Hace más de dos años se dio a conocer una decisión trascendental de la Corte Internacional de Justicia de La Haya (CIJ). La CIJ entregó a Nicaragua 75.000 kilómetros de mar territorial cercano de San Andrés y que se disputaba con Colombia.

Las pretensiones expansionistas de Nicaragua son claras, incluso hay una segunda demanda para que La Haya trace nuevas fronteras, en las que Colombia se vería nuevamente afectada. San Andrés siente que el olvido del gobierno es grande: para ellos es inaudito que aún no exista una estrategia clara por parte de la Cancillería para defender la soberanía nacional.

Esto es solo una parte. En diciembre Nicaragua empezó la construcción de un Canal que conectará al Océano Atlántico con el Pacífico. Un proyecto que también tiene preocupado a San Andrés porque Noemí Sanín y Miguel Ceballos denunciaron en SEMANA que “los desechos de los dragados del canal, conformados por más de 81 millones de toneladas de fango y residuos sólidos serán vertidos en el Mar Caribe, a escasos kilómetros de nuestro territorio (…) Esta agresiva intervención, unida al tráfico de los gigantes buques tanqueros, militares y de carga, terminaría por destruir en pocos años los arrecifes coralinos de la reserva Seaflower”.

Los raizales sienten que la vulneración de sus derechos es pan de cada día. Por eso los pastores y líderes espirituales convocaron a los sanandresanos a salir a marchar este viernes.

San Andrés es un territorio culturalmente religioso. Basado, principalmente, en las escrituras y sus mandamientos. Es por eso que los líderes espirituales juegan un papel importante en la toma de decisiones y son ellos los que, en este caso, convocan a la marcha. Todos, a las 4:00 p. m., saldrán caminando en alabanza y oración desde el aeropuerto Gustavo Rojas Pinilla hasta la sede de la gobernación.

Semana.com habló con Corine Berverly, vocera del movimiento Amen SD (Archipelago Movement for Ethnic Native Self-Determination) y miembro de la Autoridad Provisional Raizal, para conocer las razones principales de la marcha.

Medio ambiente en riesgo: El canal de Nicaragua es uno de los motivos principales. Ellos sienten que la riqueza del territorio colombiano, como el Seaflower, se verá afectada.

Inseguridad: Según Corine, esto es una constante. “La gente ya no quiere salir de la casa debido al peligro. La delincuencia común y las bandas criminales están intimidando cada día más”, dijo.

Abusos: Los servicios públicos en la isla son, según Corine, un “abuso”. No solo por los altos costos de los recibos, sino también por la deficiencia. “El agua que utilizamos es de nuestra propia tierra raizal, y aun así a los raizales nos llega el agua una vez al mes y, tras de eso, hay que pagarla cara”. El agua no es lo único. Corine contó que solo el recibo de energía le llegaba de más de 500.000 pesos.

No hay trabajo: Los sanandresanos están desempleados. “En nuestra isla hay muchas empresas turísticas, como hoteles Caribe, Decameron, On Vacation, entre otras, en donde no trabajan raizales. No está circulando dinero en el territorio. Las empresas vienen, sacan dinero de acá, y a nosotros no nos queda nada, se lo ganan ellos”, dijo.

Salud: Los raizales también aseguran que los servicios médicos son nefastos. “En la isla hay un solo hospital y un centro de salud que es privado. Somos casi 150.000 habitantes en un territorio que es muy pequeño. No hay dónde atender a la gente”, explicó Corine.

Un caso de “indignación”: Así define Corine el caso de Débora Nelson, una mujer que trabajaba en la Oficina de Control de Circulación y Residencia (Occre) y que fue capturada por el CTI hace más de siete meses por hacer parte de una supuesta red de trata de blancas. Los raizales consideran que eso no es cierto. “Nosotros conocemos bien a Debora, ella no tiene nada que ver en los delitos que le imputan. El gobierno no dice nada”, aseguró. La marcha empezará en el aeropuerto, donde la capturaron. Los raizales quieren una respuesta frente al caso de esta mujer.