PREMIO NOBEL

Santos donará los 830.000 euros del Nobel a las víctimas

El presidente anunció en Bojayá que entregará el dinero del Premio Nobel para la reparación de las víctimas del conflicto.

9 de octubre de 2016
Foto: Cesar Carrión. Presidencia de la República. | Foto: Archivo particular.

El presidente Juan Manuel Santos se mostró conmovido durante una ceremonia litúrgica que se llevó a cabo en la iglesia de Bojayá (Chocó) en la que se les rindió homenaje a los ocho millones de víctimas que ha dejado un conflicto de 52 años entre el Estado colombiano y las FARC.

Después de la ceremonia, el mandatario anunció que donará los ocho millones de coronas suecas (unos 830.000 euros o 2.600 millones de pesos) que entrega el Premio Nobel para la reparación de las víctimas del conflicto. Santos aseguró que "el Nobel es un mandato del mundo" para que Colombia alcance la paz.

El jefe de Estado participó en la misa dominical, que se celebró en la iglesia San Pablo Apóstol, a la que asistieron varios de los sobrevivientes de la tragedia de hace 14 años, esa en la que murieron entre 74 y 119 civiles.

La eucaristía se constituyó en el primer acto púbico fuera de Bogotá al que acude Santos tras haber sido anunciado como el ganador del Nobel de Paz. "No voy a desfallecer ni un solo minuto para conseguir la paz", expresó el presidente después de la ceremononia.

Además, el mandatario hizo hincapié en lo que le han enseñado las víctimas en el último tiempo. Santos aseguró que “las víctimas quieren la paz” y que en el los últimos meses dimensionó que “el perdón y la reconciliación vencen al odio y la venganza”.

Después de la ceremonia, un grupo de familiares de las víctimas le hizo entrega al presidente de un Cristo mutilado, como símbolo de lo que ha ocurrido en Bojayá. Ante esto, Santos aseguró que esta figura es “tan importante como el Nobel”, y cerró con la frase: “nadie se olvidará del 2 de mayo de 2002”.

Al acto asistieron también los sacerdotes Sterlin Londoño, vicario de la pastoral de la Diócesis de Quibdó, capital delChocó, y el párroco del templo San Juan Apóstol, Álvaro Mosquera.

La masacre de Bojayá ocurrió el 2 de mayo del 2002, cuando un grupo de insurgentes de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) lanzó una bombona de gas contra la iglesia local en donde se refugiaban los lugareños para protegerse de un enfrentamiento entre esa guerrilla y un grupo paramilitar.