Sargento Dulce, un ‘Hombre de honor’ que el país no olvida

Pensar en que un hombre entrenado principalmente para afrontar el conflicto termine convertido en un actor, es una opción que podría sonar hasta descabellada, y que en su momento al entonces sargento primero Henry Dulce Dulce, no le gustó del todo. La orden estaba dada y debía ser cumplida al igual que cualquier otra misión.

Fue de esa forma que Dulce pasó a ser uno de los protagonistas de la recordada serie del Ejército Nacional de Colombia, Hombres de honor. A partir de ese momento conoció de su otra faceta, la actuación, la cual terminó por enamorarlo. En la serie era el cabo primero Gutiérrez y además el enfermero, como lo ha sido también en la vida real.

“Nos seleccionaron de diferentes unidades, para ese entonces era instructor de la Escuela de Lanceros en Tolemaida, acababa de llegar de un curso en los Estados Unidos y realmente no concebía cómo un comando pasara a la televisión de un momento a otro y siendo un instructor. Al principio para ser sincero, no me gustó mucho la idea, porque tenía otro rol dentro del Ejército”, dijo.

El proyecto que inició en 1995, duró dos años y hasta la fecha Hombres de Honor se sigue transmitiendo por el Canal Uno. Dulce actualmente con 28 años de servicio al Ejército ostenta el grado de Sargento Mayor de Comando, es decir el rango más alto al que puede llegar un suboficial. Cargo que desempeña en la Décimoquinta Brigada en Quibdó, Chocó.

Pero su vida en la televisión no terminó con Hombres de honor, después del cabo Gutiérrez vinieron otros proyectos. En Comandos hizo de productor y coordinador militar, en la telenovela la Viuda de la mafia tuvo el papel de comandante del Bloque Búsqueda, en la serie Francisco el matemático actuó como un sargento del Ejército, en Siguiendo el rastro participó en varios capítulos, a Padres e hijos llegó como un militar, en Fuego verde representó un escolta, en Se armó la gorda fue un taxista, en Solterita y a la orden hizo de portero y en La Caponera de mecánico.

No por dedicar un tiempo a la actuación su vida militar ha quedado de lado, el suboficial cuenta con una hoja de vida sobresaliente, con una amplia preparación académica en Colombia y en el exterior, además de diferentes reconocimientos a su labor.

Actualmente está alejado de las cámaras y dedicado al Ejército. Su popularidad sigue siendo la misma por lo que no se escapa a los autógrafos y las fotos de quienes lo recuerdan como el cabo Gutiérrez, ese militar que hizo parte de los 280 capítulos de la serie, que no solo se grabó en Colombia sino en varios países del mundo.

 “Es muy curioso porque la serie más o menos se acabó en 1998 y después de muchos años salgo a algún lado y la gente se queda mirándome, como diciendo a este señor lo he visto en alguna parte y finalmente aseguran: ‘claro usted de el de Hombres de honor’”, manifestó.

Junto al hoy sargento mayor actuaron reconocidos talentosos de la televisión colombiana, como es el caso de Juan Carlos Gutiérrez quien hizo el papel del capital Rivera, Andrés Juan Hernández uno de los soldado y hoy en día se dedica a la actuación, para ese entonces estaba prestando servicio militar en la vida real; Óscar Borda hacía del Sargento Benítez, Jorge López fue el sargento Rubiano, Carlos Vergara soldado Zapata, entre otros.

Pero la fama de Dulce no solo llega a la población civil, los soldados que visita en las guarniciones militares no aguantan la curiosidad de preguntarles si es el de Hombres de honor y parecen hasta incrédulos de que uno  de sus mandos haya pasado por la televisión como actor.

Al pensarle sobre el retiro de la vida militar dice que no contempla aún la posibilidad, pero que sabe que llegará el momento. Desde los 16 años está en el Ejército, justo cuando su padre, también sargento mayor, decidió volver a la vida civil, prácticamente hicieron un relevo generacional.

“He estado más en la institución que en la vida civil. Uno es consciente que el momento tiene que llegar y que no alcanza a estar preparado para ese día, porque esto es una pasión y una filosofía de vida. Aunque sé que está cerca aún no le he concebido”, indicó.

El suboficial es nacido en Bogotá, pero de origen pastuso, sus roles de militar y actor han sido combinados con el de padre y esposo. Se casó hace 23 años con Claudia Yaneth, sus hijos Angie Tatiana, Leidy Viviana y Juan Pablo, son su mayor orgullo.

Así como su vida en el Ejército está llena de buenos recuerdos, también ha tenido que vivir momentos difíciles, algunos han sido ver la muerte de sus compañeros en los más crudo de la guerra de la que no ha podido escapar, al igual que le sucede al resto de los miembros de la Fuerza Pública del país.

“La muerte en combate de un compañero precisamente en el Chocó, cuando yo era cabo del Ejército, me marcó para siempre. Él apenas llevaba un mes de casado, yo estuve en su matrimonio y durante seis horas que permaneció herido, estuve hablando todo el tiempo con él y verlo morir fue muy difícil”, dijo.

Aunque dice que no sabe a qué se dedicará después de su retiro, no descarta que si la actuación le ofrece una buena oportunidad vuelva a ponerse frente a las cámaras de televisión, por ahora su labor está encaminada a servir al Ejército, como lo viene haciendo hace casi tres décadas.