NACIÓN
Se agrava situación de movilidad en vía a Buenaventura: gigantes grietas obligaron al cierre total de la carretera
Organismos de socorro siguen atendiendo la difícil situación de los pobladores de Dagua, tras torrenciales lluvias.
En las últimas horas, se ha hecho viral un video en el que se pueden ver enormes grietas en la vía Cali-Buenaventura entre Loboguerrero y Dagua a la altura del kilómetro 59; lo que obligó a las autoridades a cerrar la carretera de manera definitiva.
“La administración municipal, en cabeza de la alcaldesa Ana María Sanclemente Jaramillo, informa a toda la opinión pública que la vía que conduce de Dagua-Buenaventura a la altura del kilómetro 59, se encuentra cerrada por afectaciones producidas por la ola invernal”, indicó la alcaldía del municipio de Dagua en un comunicado.
Las autoridades también alertaron que la vía alterna por el corregimiento de Atuncela que conduce de Loboguerrero no es apta para alto tráfico ni vehículos de carga pesada. “Hay dos puentes cuya infraestructura no soportaría el peso. Informamos que los vehículos que viajen de Cali a Buenaventura deben tomar la vía alterna por Buga y así evitar el incremento de la emergencia”, señaló el oficio.
Lamentablemente, la vía podría estar cerrada hasta inicios del próximo año; habitantes de la zona aseguran que las casas que están aledañas a la carretera están a punto de desplomarse, por lo que pobladores del sector tuvieron que abandonar sus hogares.
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Según el concepto del geólogo John Montaño: “El hundimiento progresivo, fractura desde la capa asfáltica, pérdida de compactación de la base y sub base del suelo aportante, se debe a presencia de agua en los suelos que componen el sub suelo en la vía; fenómeno de licuefacción y fracturas. De acuerdo al tipo de falla presente, se le puede dar vida a una inactiva falla geológica”, explicó.
De otro lado, la Alcaldía de Buenaventura manifestó que continuará el acompañamiento a todos los sectores afectados por la ola invernal, por lo que el alcalde (e), Orley Mauricio Aguirre, anunció la solicitud de ampliar la Calamidad Pública, lo que permite priorizar recursos para las familias y comunidades afectadas.
El equipo de la Oficina Coordinadora para la Prevención y Atención de Desastres (OCPAD), bajo el liderazgo del director Arbinton López Potes, inició un recorrido en la vía Cabal-Pombo, con el propósito de verificar el total de casas y familias afectadas que permitan informar a las autoridades a nivel nacional, departamental y distrital, el panorama que ya deja un número considerable de damnificados.
Hasta el momento se tiene un reporte de aproximadamente 4.000 personas afectadas tras los eventos naturales registrados en las últimas horas, por lo que desde la Alcaldía Distrital de Buenaventura se solicitará a la Unidad Nacional de Gestión del Riesgo, entre otras autoridades, adelantar medidas inmediatas que además de las primeras ayudas humanitarias, también permitan mitigar la crisis que hoy viven las familias damnificadas.
Según la alcaldesa de Dagua, Ana María Sanclemente Jaramillo, la creciente de los ríos destruyó 20 viviendas y dejó cuatro corregimientos incomunicados. Se necesitan alimentos no perecederos, artículos de aseo, colchones y frazadas.
“Hemos instalado un Puesto de Mando Unificado (PMU), entre las dos jurisdicciones, para atender a nuestras comunidades limítrofes que se encuentran en gran medida afectadas; más de 20 viviendas fueron arrasadas en el sector de Loboguerrero”, dijo y confirmó que hay comunidades que llevan dos días sin agua y sin energía.
Asimismo, Sanclemente mencionó que tuvieron una reunión con el equipo de Gestión del Riesgo de la Alcaldía de Buenaventura, la comunidad y los consejos comunitarios que representan la zona de Cisneros, zona limítrofe entre Buenaventura y Dagua; en la que coordinaron acciones para pronunciarse frente al gobierno nacional y que prioricen la cuenca del río Dagua con acciones que permitan la mitigación de riesgo para prevenir más desastres.
También hizo un llamado a los habitantes del municipio para que tengan precaución al transitar por las diferentes vías, pues hay deslizamientos de tierra y caída de piedras en varios puntos.