Policía, tras la pista de denuciante de la ‘Comunidad del anillo’

Absoluto desconcierto y muchas sospechas causó la desaparición del capitán de la Policía Ányelo Palacios, el mismo que denunció la llamada ‘Comunidad del anillo’, una supuesta red de prostitución masculina que supuestamente operaba dentro de ese organismo castrense. Sin embargo, la noticia sobre su desaparición ya puso alerta a los más altos mandos de la Policía.

Fuentes de la Fiscalía en Norte de Santander le confirmaron a Semana.com que fueron alertados sobre la interceptación del vehículo en el cual el oficial se trasportaba por la vía a Pamplona (Norte de Santander), cuando fue sorprendido por hombres en motocicletas que se lo llevaron. El director nacional de la Policía, Jorge Hernando Nieto ya se pronunció sobre el particular y anunció el traslado al lugar de los hechos de varios mandos de la institución.

Para el jefe de la entidad, la desaparición de Palacios reviste la mayor gravedad, y de ahí su decisión de disponer que las labores de búsqueda sean inspeccionadas directamente por por el subdirector de la institución, general Ricardo Alberto Restrepo y la del director de Antisecuestro y Antiextorsión, general Fabio Hernán López.

El capitán Palacio se hizo visible a ojos del país por ser el autor del video que tuvo en cuenta la Procuraduría para considerar que en la Policía sí funcionaba una red de prostitución masculina.

En la pieza audiovisual se pone en evidencia que programó un encuentro sexual con el en ese entonces senador Carlos Ferro, quien en el momento de conocerse los hechos fungía como viceministro del Interior.

Esa prueba fue tenida en cuenta para abrir una investigación disciplinaria formal contra quien hasta ese momento dirigía la Policía, el general (r) Rodolfo Palomino, y terminó costándole el puesto a Ferro, quien renunció a su cargo.

El director de la Policía y la periodista que más le siguió la pista a la ‘Comunidad del anillo’, Vicky Dávila, siguieron el ejemplo del exviceministro y renunciaron a sus puestos de trabajo.

Mientras tanto, la Fiscalía citó a Palacio para rindiera declaración sobre esos supuestos actos de proxenetismo que se estaban produciendo en la Policía, teniendo en cuenta que el agente ya le había contado cómo funcionaba la red, que ponía a efectivos de bajo rango al servicio de los deseos sexuales de altos oficiales y congresistas desde el 2008.

De ahí que todos los ojos estuvieran puestos sobre Palacios, quien parecía tener conocimiento de quiénes lideraban la comunidad. Por eso, la coincidencia entre su supuesto secuestro y la crisis que vive la Policía en su imagen ante la opinión hace que se piense que los hechos no están aislados de los testimonios que ofreció ante las autoridades.

Sin embargo, las autoridades no han establecido todavía una hipótesis sobre las causas y, por ahora, solo tratan de seguirle la pista a los captores.