JUSTICIA
Movistar, Claro y Tigo, sancionados con multa por $9.200 millones
Aunque las empresas están obligadas a separar los contratos de compra de teléfonos con los planes pospago, siguen amarrando una cosa con la otra.
En medio de una guerra con los operadores de telefonía celular, la Comisión de Regulación de Comunicaciones logró abolir en el 2014 de manera definitiva para los usuarios, el cobro de cláusulas de permanencia por compra de equipos.
Sin embargo, los tres principales operadores del país habrían encontrado la forma de hacerle el quite a la norma, lo cual les saldrá muy caro: la Superintendencia de Industria y Comercio (SIC) acaba de sancionar a Claro, Movistar y a Tigo pagar multas por 9.200 millones de pesos.
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Aunque a estas empresas se les había dejado clara la obligación de respetar la independencia entre el contrato de venta de equipos y el de prestación de servicios de comunicaciones, la Superindustria encontró que los operadores amarraban y condicionaban los beneficios para quienes compraran teléfonos con los planes de servicio de comunicaciones.
En una acción que resulta violatoria de las reglas de juego que estableció la CRC, Claro, Tigo y Movistar ofrecían entre seis y 12 cuotas gratis en la compra de un celular a cambio de que los usuarios firmaran un plan por un valor mínimo. No cumplir ciertas condiciones generaba la pérdida de las cuotas gratis.
Según el superintendente de Industria, Pablo Felipe Robledo, la norma establece que estos contratos se deben pactar de manera separada y además que su clausulado y condiciones no se pueden ver afectadas por lo que ocurra durante la ejecución del otro contrato. Sin embargo, después de analizar el contenido de piezas publicitarias, la entidad de control encontró que violaron esa interdependencia que debía existir entre el contrato de compraventa de equipo y el contrato de prestación de servicios para planes pospago.
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La entidad también concluyó que impedirle al usuario terminar el contrato de prestación de servicios de comunicaciones o cambiarse de pospago a prepago, so pena de perder unas cuotas gratis en la compra del teléfono, implicaba una violación a las normas vigentes de la CRC.
La sanción dictada por la la Superindustria obliga a Comcel S. A. (Claro) a pagar $4.832 millones; a Colombia Movil S.A. E.S.P. (Tigo) a pagar $1.057 millones y a Colombia Telecomunicaciones S. A. E.S.P. (Movistar) $3.331 millones. Se trata de una sanción en segunda instancia sobre la cual no proceden recursos.
Además de las millonarias multas, la Superintendencia ordenó a los operadores que eviten aplicar términos y condiciones que desconozcan la independencia de los contratos con los usuarios. Tampoco podrán emitir ofertas, promociones, estrategias comerciales o cualquier tipo de mensaje publicitario que implique condicionamientos, remisiones, subordinaciones o dependencias entre un contrato de compraventa de equipo con un contrato para adquirir un plan de servicio de comunicaciones.
Algunas piezas publicitarias que estudió la Superintendencia: