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Teniente habría obligado a soldados a comer cigarrillos tras descubrirlos fumando; fue judicializado por tortura
Las investigaciones de la Fiscalía revelaron que, al parecer, “también les ordenó comerse el vómito que les generaba la ingesta de tabaco”.
La Fiscalía General presentó ante un juez de control de garantías al teniente en retiro Alfred Leoman Aguirre Moreno, acusado de someter a tres soldados a actos degradantes, entre ellos, al parecer, haberlos obligado a comer cigarrillos.
Los hechos bajo investigación tuvieron lugar el 25 de marzo de 2012, en un batallón del Ejército Nacional ubicado en Tunja, Boyacá. De acuerdo con las pesquisas de la Fiscalía, tres soldados regulares abandonaron sin autorización el recinto militar durante la jornada de visitas y fueron descubiertos por un superior fumando.
Durante la formación nocturna, el entonces teniente Aguirre Moreno les habría reclamado a los tres soldados por considerar su comportamiento como un acto de indisciplina y, según los informes recopilados, supuestamente los forzó a ingerir al menos diez cigarrillos cada uno. No siendo suficiente, además, “también les ordenó comerse el vómito que les generaba la ingesta de tabaco y golpeó en el pecho a uno de los jóvenes que intentó resistirse”, según el ente acusador.
Las víctimas relataron que, tras la agresión frente a sus compañeros, el oficial los habría llevado a las duchas, donde fueron obligados a bañarse durante una hora con agua helada. Posteriormente, les habría indicado que debían secarse al aire libre, expuestos a las bajas temperaturas, antes de poder ir a descansar a los alojamientos.
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En vista de lo expuesto, un fiscal de la Dirección Especializada contra las Violaciones a los Derechos Humanos imputó al teniente en retiro Alfred Leoman Aguirre Moreno el delito de tortura agravada. No obstante, hasta el momento, el acusado no ha aceptado los cargos imputados en su contra.
Las investigaciones en el caso seguirán con el objetivo de esclarecer lo ocurrido en la noche de ese 25 de marzo.
Hermanos se hacían pasar por soldados para robar
Por otra parte, al descubierto quedaron dos hermanos extranjeros, al parecer venezolanos, que se hacían pasar por uniformados del Ejército Nacional para instalar retenes ilegales en la vía Puracé, Huila, y hurtar a vehículos particulares y camiones de carga.
De acuerdo con las investigaciones de las autoridades, los hermanos utilizaban tácticas intimidatorias para cometer una serie de robos. Disfrazados con uniformes del Ejército Nacional y portando armas de fuego de diverso calibre, los sindicados atacaban a conductores, pasajeros, transeúntes y habitantes de la zona, arrebatándoles dinero, teléfonos celulares y otros objetos de valor.
Los dos detenidos fueron capturados por el Cuerpo Técnico de Investigación (CTI) de la Fiscalía General, con el apoyo de la Guardia Nacional del Resguardo de Paleterá, agentes de la Estación de Policía de Coconuco, Huila, y unidades del Gaula Militar, durante un retén en la vía. Durante el operativo, se les confiscaron dos uniformes del Ejército, un chaleco con arnés, dos armas de fuego, munición, tres teléfonos celulares, una motocicleta con placas XNK 88F y dos maletines.
Un fiscal de la Estructura de Apoyo (EDA) logró obtener una orden de detención preventiva en un centro carcelario contra los dos extranjeros identificados como José Gregorio Martínez García y Abrahán José Martínez García. El juez penal del municipio de Puracé-Coconuco tomó la decisión luego de que el ente investigador presentara pruebas contundentes que los vinculan a los delitos.
Los imputados enfrentan cargos como presuntos coautores de fabricación, tráfico y porte de armas de fuego en concordancia con robos calificados y agravados, receptación y uso privativo de prendas pertenecientes a las Fuerzas Militares. Según el proceso penal en curso, ambos individuos formarían parte de una peligrosa banda conformada por seis personas.
En audiencias concentradas, los imputados se mantuvieron firmes en su postura de no aceptar los cargos presentados en su contra. A medida que el proceso judicial avance, se espera que se recojan más pruebas y testimonios para determinar la responsabilidad de los acusados.