Tres hombres asesinados, las nuevas víctimas de la violencia en Cáceres, Antioquia

La subregión del Bajo Cauca antioqueño sigue incrementando sus índices de violencia. En la noche del lunes se presentó un triple homicidio en la vereda Los Azules, municipio de Cáceres. Por el momento no está confirmada la identidad de las víctimas o las circunstancias en las que fueron asesinados los tres hombres que, se presume, eran mineros de la región.

Sin embargo, medios locales afirman que los autores del crimen se movilizaban en motocicleta cuando dispararon. La Policía de Caucasia confirmó que los cuerpos de dos de las víctimas fueron llevados a la morgue del hospital de Cáceres por sus propias familias y se espera el traslado de la tercera persona.

Mientras se esclarece este hecho, a pocos kilómetros, en la vereda la Isla de la Dulzura -antes conocida como Isla de la Amargura- del mismo municipio, aún no existe garantía de seguridad para 130 familias de campesinos afiliadas a la JAC y 58 familias indígenas zenú que tuvieron que abandonar sus tierras tras la incursión armada de grupos ilegales en la zona.

La población de casi 700 personas completa doce días de desplazamiento y, pese a que la Secretaría de Gobierno de Cáceres ha reiterado que la zona se encuentra militarizada, la comunidad no quiere regresar por temor a que las amenazas hechas por los violentos. En este punto del departamento hay una disputa clara entre Los Caparros y el Clan del Golfo.

La Defensoría del Pueblo emitió el pasado 31 de agosto una alerta temprana para seis municipios del Bajo Cauca antioqueño al poner en consideración que la ciudadanía está expuesta a extorsiones, toques de queda nocturnos impuestos y amenazas a líderes sociales y comunales.

“Para el año 2020 se observa un cambio sustancial en la dinámica de los actores armados ilegales, pues mientras en 2018 y 2019 esta se caracterizaba por la expansión hacia los territorios en donde tenían intereses económicos, para finales de 2019 y durante 2020 se observa el interés de atacar lo que se consideran las sedes de mando del enemigo, provocando masacres y desplazamientos forzados”, señaló la Defensoría en el documento.

El pasado 7 de septiembre se presentó la masacre de cinco mineros en el corregimiento El Pato del municipio de Zaragoza; punto ubicado a dos horas de Cáceres. El crimen ocurrió dentro de un billar y como resultado también fue asesinado el propietario del establecimiento.