Nación

Un domicilio de hamburguesas, la “duda” en el juicio de Aida Merlano

La Fiscalía indagó en los detalles de un domicilio que llegó al consultorio odontológico de donde se fugó la excongresista.

3 de noviembre de 2021
| Foto: Fotomontaje SEMANA

En el interrogatorio que adelantó la Fiscalía a una funcionaria del consultorio odontológico de donde se fugó la excongresista Aida Merlano en el norte de Bogotá, la Fiscalía preguntó por algunos detalles de ese primero de octubre de 2019. Algunas dudas fueron resueltas y otras, por oposición de la defensa, se quedaron embolatadas o sin respuesta. Por ejemplo, un episodio sobre la entrega de un domicilio de hamburguesas que recibió la hija de la excongresista.

  • Fiscal: ¿Sabe en cuántas oportunidades salió el hijo de Aida del consultorio?
  • Testigo: No señor.
  • Fiscal: ¿Y su hija Aida Victoria?
  • Testigo: No señor, solo una vez cuando salió a comprar algo para comer.
  • Fiscal: ¿Quién salió a comprar algo?
  • Testigo: La hija.

Tras la revelación de la testigo y de cómo salió la hija de Aida Merlano a comprar algo para comer, el fiscal trató de indagar sobre los detalles de ese momento, la hora, cómo llegaron las hamburguesas y en qué venían envueltas, pero los abogados se opusieron al interrogatorio.

  • Fiscal: ¿Qué salió a comprar?
  • Testigo: Unas hamburguesas
  • Fiscal: ¿A qué horas llegaron las hamburguesas al consultorio?
  • Testigo: Como a las dos de la tarde.
  • Fiscal: ¿Dónde recibió ellas las hamburguesas?
  • Abogado: Objeción, su señoría es una pregunta impertinente.
  • Fiscal: ¿Saben en qué estaban empacadas las hamburguesas?
  • Testigo: No señor.
  • Abogado: Objeción su señoría.
  • Juez: La requiero, señora, espere que si objetan la pregunta usted no debe responder.

“La guardiana le quita las esposas, luego saluda a los hijos y seguidamente me saludó a mi… ellos me preguntaron si podían ingresar al consultorio y se les permitió ingresar; la guardiana no ingresó, pero las veces anteriores siempre ingresaban al consultorio dos guardianas”, dijo la testigo.

  • Testigo: Nos dimos cuenta de una cuerda roja que estaba amarrada a un mueble y salía a hacia la calle.
  • Fiscal: ¿Sabe usted cómo ingresó la cuerda al consultorio?
  • Testigo: Ni idea, no sé.
  • Fiscal: ¿Observó que le entregaran elementos a la señora Aida?
  • Testigo: No señor.
  • Fiscal: ¿Sabe qué contenía el morral que llevaba el hijo de la señora Aida Merlano?
  • Testigo: No señor.