Nación
Un taxista quedó al descubierto cuando transportaba cargamento de coca en Caquetá; así fue cómo lo capturaron
El hombre pensó que al ser conductor de transporte público no sería descubierto por las autoridades.
Alexánder Charry Amaya, conductor de un taxi en Florencia, Caquetá, fue enviado a la cárcel tras ser sorprendido en flagrancia transportando 19.820 gramos de base de coca. El procesado llevaba camuflado en su vehículo de servicio público 10 paquetes de diferentes tamaños con la sustancia ilícita.
La captura de Charry Amaya se llevó a cabo en un retén en el sector Cachameras, en la vía Florencia – La Montañita, por servidores del Cuerpo Técnico de Investigación (CTI), la Sijín y tropas del Batallón de Infantería Guepi. Al inspeccionar el automotor, los uniformados se encontraron que en el capó venía camuflada la sustancia en bolsas plásticas de color negro.
Por estos hechos, el conductor del taxi fue imputado por un fiscal de la Unidad de Reacción Inmediata de la Seccional Caquetá por su presunta responsabilidad en el delito de tráfico, fabricación y porte de estupefacientes agravado
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El sindicado no aceptó los cargos imputados y deberá permanecer detenido mientras avanza el proceso judicial.
Red sacaba toneladas de coca por la frontera sur
En una acción conjunta entre la Fiscalía General de la Nación y la Policía Nacional, se logró identificar y capturar a nueve peligrosos individuos señalados de formar parte de una red narcotraficante de gran envergadura en el sur del país.
Esta organización ilegal estaba dedicada al procesamiento y transporte de toneladas de clorhidrato de cocaína desde el oriente de Colombia hacia las fronteras con Venezuela y Brasil, con el objetivo de enviarla posteriormente a Europa y Centroamérica.
Según las investigaciones que permitieron descubrirlos, este grupo delictivo adquiría pasta de base de coca en las regiones de Caquetá y Putumayo. Luego, camuflaban la droga en compartimentos especialmente acondicionados en vehículos y la transportaban por vía terrestre hacia laboratorios clandestinos ubicados en los departamentos de Meta y Guaviare. Una vez completada la fase de producción ilegal, movían el estupefaciente hacia las regiones de Vichada y Arauca, desde donde coordinaban su salida hacia destinos internacionales.
Adicionalmente, las autoridades descubrieron que esta estructura criminal contaba con pistas clandestinas y aeronaves en territorio venezolano para facilitar el transporte de los cargamentos hacia otros países.
El fiscal a cargo de la Dirección Especializada contra el Narcotráfico presentó a los nueve detenidos ante un juez de control de garantías, quienes ahora enfrentan graves cargos por tráfico, fabricación o porte de estupefacientes, tráfico de sustancias para el procesamiento de narcóticos, y concierto para delinquir agravado.
Los procesados no aceptaron los cargos y deberán cumplir medida de aseguramiento privativa de la libertad en centro carcelario. Los afectados con la decisión son:
- Edgar David Aguirre Montenegro, alias Bety, presunto cabecilla y financiador de la producción de cocaína.
- Alejandrina García Beltrán, compañera sentimental de alias Bety, y Deison Sánchez Marín, alias El Compa, señalados de dirigir los aspectos relacionados con la logística y financiación de la red ilegal.
- Adriana Sofía García Beltrán, alias La Flaca, posible coordinadora de la producción y transporte del estupefaciente.
- Heiner Fabián García Beltrán, alias Gato Seco; Rubén Darío Guapacha Guarín, alias Garganta; Kevin Mauricio Garzón García, alias Morrocoy; y Nelson Farid Bejarano García, alias Farilo, quienes serían los encargados de los laboratorios de producción de clorhidrato de cocaína.
- Yohnny Steiver Aguirre Castañeda, presunto responsable del acopio y preparación de los cargamentos.