NACIÓN
Un narcotraficante y tres alias
Por tercera vez el Gobierno se ve obligado a ‘rebautizar’ al grupo criminal más poderoso del país. ¿Por qué?
Darío Úsuga, alias ‘Otoniel’ y sus hombres se han convertido en un verdadero dolor de cabeza para el gobierno nacional. Con cerca de 3.000 integrantes y presencia en 20 departamentos, se han transformado en la banda criminal considerada el mayor desafío para el orden público del país (Lea también: Este el hombre que aterroriza a tres departamentos)
Aunque tan solo en lo corrido del 2016 más de 1.200 de sus integrantes han sido capturados en distintos rincones del país, los expertos en seguridad consideran que aún está lejos el momento de derrotar a este grupo. Sin embargo, más allá de los problemas que ha implicado la lucha contra esta banda criminal, el Gobierno se ha visto obligado a enfrentar otro que parece menor pero que no deja de llamar la atención: cómo llamarlos.
Hace seis años, cuando se comenzó a hablar de ‘Otoniel’ y sus lugartenientes, las autoridades empezaron a referirse a ese grupo como los ‘Urabeños’. Se trata de una referencia a la región de Urabá, en donde actuaba principalmente esa organización.
Durante varios años los habitantes de esa zona protestaron ante el Gobierno e, incluso, recurrieron a acciones de tutela para obligar a las autoridades a cambiar el nombre de la banda, pues consideraban que se estaba estigmatizando a todos los habitantes del Urabá.
Hace cerca de dos años, el Ministerio de Defensa, la Policía, el Ejército y demás autoridades acogieron la solicitud y empezaron a referirse a ese grupo narcotraficante como el ‘Clan Úsuga’. Se trataba de una referencia al apellido del principal jefe de esta organización.
Nuevamente vino una avalancha de solicitudes, reclamos y tutelas por parte de decenas de colombianos que tienen ese apellido y consideraban que, por cuenta de esa referencia, quedaban señalados y estigmatizados. Incluso, se conocieron historias de cómo algunas personas por el simple hecho de llevar ese apellido no les habían otorgado visas o eran objeto de constantes requisas por parte de las autoridades (Lea también: La antioqueña que pide que le cambien el nombre al ‘clan Úsuga’ )
Frente a todo lo anterior, una vez más el Gobierno se vio obligado a modificar la forma como se denominará a esta bacrim y sus integrantes. El nuevo nombre elegido es ‘Clan del golfo’. Falta ver si esta vez las autoridades sí le atinan a un nombre con el que no se vean forzadas a modificarla por tercera vez.
Lo cierto del caso es para la mayoría de los habitantes de algunas regiones y la opinión pública, el nombre más recordado de esta bacrim sigue siendo el de los ‘Urabeños’. Ahora el esfuerzo del Gobierno no sólo es capturar al jefe de esta banda y a sus hombres, sino posicionar el nuevo nombre.