Uribe defiende la prohibición de las drogas

En coincidencia con un nuevo debate internacional sobre la política de lucha contra el narcotráfico y otro nacional sobre la dosis personal, el expresidente Álvaro Uribe reiteró su postura sobre las drogas en una serie de catorce mensajes por su cuenta en Twitter.

Sin aludir de manera literal a nadie, Uribe se preguntó en uno de sus mensajes "cómo se pretende combatir al narcotráfico si la cúpula de la autoridad promueve la legalización".

"Entonces devolverán a los extraditados y los bienes confiscados", se interrogó también el expresidente, quien concedió la entrega de más un millar de narcotraficantes, mayoritariamente a Estados Unidos, durante los ochos años que estuvo en el poder.

Una eventual legalización de las drogas estimula la destrucción de recursos naturales, para "reemplazar por drogas", que "enajenan al ser humano", escribió Uribe.

"Tratamiento médico, aun con suministro decreciente no necesita legalizar", apuntó también, y advirtió de que "el consumo social es camino a la adicción".

En otro de sus mensajes, el exgobernante sostuvo que, según una encuesta de 2009, la despenalización de la dosis personal en su país dejó "más de 350 mil adictos y más de 1 millón 600 mil consumidores".

La norma

La legalización de la dosis personal, que en Colombia estuvo vigente de 1994 a 2009, por una sentencia de la Corte Constitucional que despenalizaba la dosis mínima de droga, fue levantada por iniciativa del Gobierno de Uribe y de sus mayorías parlamentarias en el Congreso, mediante una reforma constitucional que solo habilita el consumo por prescripción médica.

Además de restablecer la prohibición, la norma obliga al Estado a ofrecer medidas y establecer tratamientos rehabilitadores en favor de los adictos.

Con ella, Uribe puso fin a seis años de intentos de derogar este permiso, primero mediante un fracasado referendo celebrado en 2003 y, luego, con varios proyectos de ley que tampoco tuvieron éxito, con excepción del aprobado en 2009.

Hace solo cuatro días, el gobernante colombiano, Juan Manuel Santos, se reunió en Bogotá con el expresidente del Gobierno español Felipe González y los exmandatarios Fernando Henrique Cardoso, de Brasil, y Ricardo Lagos, de Chile, para "discutir nuevos ángulos en torno de la política mundial antinarcóticos".

Mientras, el Ejecutivo de Santos avanza en los últimos detalles de un borrador del estatuto nacional de drogas que establece, entre otras medidas, el restablecimiento de la dosis personal, aunque en menor cantidad.

La propuesta en ciernes baja a cinco gramos la cantidad de marihuana que una persona puede llevar y consumir, contra los veinte gramos de la antigua despenalización.