Nación
Uribe muestra su preocupación por la negación del castrochavismo y reclama “autoridad para derrotar la violencia y construir paz”
El exmandatario destacó que durante su Administración uno de los mayores logros fue desmontar el paramilitarismo.
El expresidente Álvaro Uribe respondió en una contundente declaración al discurso del presidente, Gustavo Petro, este 1 de mayo, con motivo del Día del Trabajador, en la que mostró su gran preocupación por lo que está ocurriendo en el país en materia de seguridad, la negación política del castrochavismo, “que se transforma” aunado a su reclamo de “autoridad para derrotar la violencia y construir paz”.
Uribe, quien realizó un en vivo a través de su cuenta de Instragram, tocó varios puntos debido a los señalamientos que hizo Petro en la Plaza de Bolívar al decirle que “se equivocó de cabo a rabo” con sus políticas y medidas.
El expresidente aprovechó para dirigirse a sus seguidores y explicar en qué consistió la Ley 100, la cual defendió, el sistema de salud y pensional y cómo la seguridad democrática trajo inversión y empleo al país.
En su intervención, el también exsenador dijo que con la seguridad democrática que impulsó en sus dos Gobiernos (2002-2010) “se redujo sustancialmente el asesinato de trabajadores y de maestros sindicalizados”.
“En efecto, en 2002, cuando empezaba nuestro Gobierno, fueron asesinados 200 de ellos. No pudimos llegar a cero casos, pero en 2010 este crimen bajo a 14 personas afiliadas a organizaciones de trabajadores. Los mejores testigos son los directivos de las Centrales Obreras y de Fecode, que no obstante las discrepancias conmigo, nos reuníamos cada mes en la Presidencia de la República para revisar la seguridad de los trabajadores”.
En esa línea, aseguró que el país “vivió momentos de paz” y le recordó a Petro que “mis opositores, como el actual mandatario, y otros gozaron de la misma seguridad que mis más cercanos colaboradores”.
El exmandatario destacó que durante su Administración uno de los mayores logros fue desmontar el paramilitarismo, y de nuevo le dijo a Petro que “políticos, como el actual Mandatario, no requirieron buscar nuevas citas para que no los asesinaran”.
Y también fue enfático en que el éxito de esa seguridad democrática fue reducir las guerrillas y el narcotráfico, pero también recalcó que “en nombre de la falsa paz, que viene desde el pacto de La Habana, y continúa, se han vuelto a apoderar de Colombia”.
Un tema que le preocupa, pues, reclama “autoridad para derrotar la violencia y construir paz”, además de no asignarle al actual mandatario “responsabilidad por el sinnúmero de masacres y el sistemático asesinato de líderes sociales”.
Además, envió un mensaje a quienes lo atacan: “entiendo a los conversos, comprendo su crueldad, hoy ponen de testigos contra mí a sus anteriores verdugos”, en medio del proceso que se adelanta en su contra, rumbo a un juicio por la supuesta compra de falsos testigos.
Otras de las grandes preocupaciones del exmandatario es lo relacionado con el auge que en el país está teniendo “la negación política del castrochavismo, se transforma en hechos que a diario lo ejecutan”.
Puntualizó que ante esa negación hoy el país debe abrir los ojos: “en el fondo aquí hay dos modelos: el neocomunismo que anula la inteligencia y la libertad que estimula la creatividad y la equidad”.