| Foto: EPM

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Arrancó funcionamiento del vertedero de Hidroituango

De acuerdo con EPM, la estructura evacuará el agua desde el embalse hasta el río Cauca, lo que garantiza la seguridad de la presa y evita que el agua embalsada rebose la estructura.

4 de noviembre de 2018

Al alcanzar la cota de 405 metros, el embalse del proyecto hidroeléctrico Hidroituango comenzó a verter agua, de forma segura y controlada, a través de una estructura diseñada para tal fin, según informó Empresas Públicas de Medellín (EPM).

Se trata de un vertedero: una estructura hidráulica que permite el paso libre o controlado de agua en las centrales de generación. Por esta construcción, con una longitud de 405 metros y cuatro compuertas radiales de 15,4 metros de ancho por 19,5 metros de alto, pasará el agua desde el embalse hasta caer a un pozo de aquietamiento, y luego al imponente y caudaloso río Cauca.

El vertedero, con un tamaño semejante a cuatro canchas de fútbol, permite rebozar el agua cuando el embalse llega a su máximo límite de capacidad, lo que garantiza una seguridad de la presa y evita que el agua embalsada rebose la estructura, según explicó la empresa a través de un comunicado de prensa.

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EPM anunció que desde este domingo las cuatro compuertas del vertedero, diseñado para transitar las crecientes del río, están habilitadas para operar, ya que cada uno de los canales está finalizado. Su elevación se encuentra en la cota 401 de la presa y comienza a verter en la cota 405.

Inicialmente, EPM puso en operación el canal izquierdo del vertedero, por donde evacúan 200 metros cúbicos de agua por segundo.

“Estos 200 metros cúbicos se suman a los 750 metros cúbicos de agua que fluyen por la casa de máquinas, para un total de 950 en promedio, un caudal inferior a los 1.200 y 1300 metros cúbicos por segundo que tiene el río Cauca en promedio para esta época del año”, dijo la Empresa a través de su comunicado.

De esta manera, añadió el comunicado, EPM asegura un caudal ecológico necesario para el hábitat del río Cauca, de mínimo 450 metros cúbicos de agua por segundo, y garantiza la seguridad de las comunidades que habitan en el área de influencia del proyecto.

Este vertedero no es a flujo libre, donde el agua llega y simplemente rebosa. Todo lo contrario, de acuerdo con el comunicado, EPM tiene forma de controlarlo con las compuertas, lo que le permite maniobrar y decidir cuánta cantidad de agua puede arrojar. “Con ello garantizamos que el río Cauca tenga el caudal que estipula la normatividad ambiental”.

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Jorge Londoño, gerente general de EPM, aseguró que este es un importante hito para la rehabilitación de la futura central de generación de energía. “Que el embalse esté vertiendo nos permite analizar otros factores para determinar cuándo será posible interrumpir el flujo de agua por la casa de máquinas”.

Londoño complementó que una de las condiciones para cerrar este paso es tener operando el vertedero, al igual que observar cómo se comporta la presa y el funcionamiento de las compuertas al cerrarlas a ese nivel del embalse, “decisiones que tomamos día a día para seguir adelante con el proyecto que aportará 17 por ciento de la energía que el país necesita”.

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