La montaña de los siete colores, en Perú, es hoy un sitio turístico, gracias en parte a Instagram. | Foto: Archivo particular

TURISMO

Viajes por una foto de Instagram

Los jóvenes de hoy atraviesan el mundo entero por conseguir una imagen de sus vacaciones con la cual presumir ante sus seguidores en las redes sociales. Así están innovando las tendencias de turismo. 

3 de junio de 2018

Los milennials están cambiando la manera de viajar. Gracias a su presencia casi permanente en la redes sociales para este grupo poblacional los destinos más interesantes no son los tradicionales sino aquellos en donde hay la posibilidad de tomar una foto espectacular para poder subirla a esta red y generar la envidia de todos sus seguidores.

Por la foto perfecta viajan al otro lado del mundo, caminan horas y hacen colas. Esto lo evidenció Olga, la madre de Karla, quien tuvo que ir a Bolivia para traer de vuelta una foto que ella quería en el salar de Uyuni. Aunque no desconoce que el viaje vale la pena, Olga cuenta que “fueron ocho horas de sufrimiento para lograr la imagen”.

Karla y su familia viajaron al salar de Uyuni con la expectativa de captar esta imagen. 

Según un sondeo hecho por Schofields, más de 40 por ciento de las personas entre 13 y 24 años le dan prioridad a la ‘instragramabilidad’ de sus viajes a la hora de escoger un destino.

El valor de las imágenes en un lugar particular pesa más que otros factores como el costo, el interés del lugar, o lo comida. "Yo soy de esas personas”, dice Karla. “Antes de definir el destino, busco fotos de otras personas en Instagram video en Vimeo y YouTube de los lugar para elegir el más fotogénico”, admite.

Tanto así que resolvió hacer un blog en Instagram con las fotos de sus viajes. “Las fotos deben ser instagrameables”. Otro estudio de la agencia de mercadeo Blitz mostró que para 84 por ciento de los millennials la influencia viene de las imágenes vistas en sitios como Facebook e Instagram. “Cuando los turistas quieren componer el selfi vacacional perfecto, ellos están creando más que envidia, están creando imitadores”, dicen los autores del trabajo.

Las agencias de viajes han tomado nota de esa tendencia y ahora ofrecen planes de vacaciones a este grupo de turistas a sitios diferentes en donde garantizan que podrán tomar fotos maravillosas para sus redes. Las llaman excursiones amigables con Instagram porque el foco está en ayudarles a tomar las imágenes perfectas de su viaje para esta red social.

Los expertos dicen que para ellos explorar e integrarse en las nuevas culturas no es suficiente sino que su mentalidad egocéntrica los lleva a compartir en sus redes cada paso que dan durante las vacaciones.

Según el diario The Times, Contiki una agencia de viajes dedicada a los jóvenes entre 18 y 35 años, mercadea un viaje a Canadá bajo la premisa de que las fotos de sus vacaciones serán espectaculares. Eso implica madrugar para capturar amaneceres, o esperar en una playa hasta el final de la tarde para capturar los mejores atardeceres o incluso ir de aventura en globo o escalar montañas.

Las posibilidades son enormes y a estos viajeros no les importa caminar bajo el sol o la lluvia por muchas horas si la foto que van a captar vale la pena. Algunos sitios, como las montañas de los Siete Colores, en Perú, han registrado recientemente un aumento en el flujo de turistas debido a que los millennials, con sus fotos, las han vuelto populares
en las redes sociales, al punto que este lugar hoy recibe 1.000 caminantes diarios.

Según la AFP, por ese motivo, un humedal tuvo que ser convertido en parqueadero para que los buses con turistas pudieran aparcar. Otro sitio que se ha vuelto congestionado es Trolltunga, la más famosa roca en los fiordos de Noruega. Para llegar allí, Tatiana, una joven ejecutiva, tuvo que aterrizar en Bergen, tomar un bus que lleva a Oda y luego una van que llega a un campamento base y por último una caminata de cinco horas en subida. “Uno logra la imagen perfecta solo en la piedra
pero lo curioso es que detrás hay una cola enorme para la misma imagen”, dice.  Las vacaciones para millenials se arman con un director de fotografía que puede dar consejos a los turistas. 


Tatiana en Trolltunga, Noruega, que traduce lengua de dragón, a donde llega llegó luego de una caminata de cinco horas para lograr esta foto. 

En 2017, Instagram reveló los sitios más ‘instagrameables’ del mundo y encabezando la lista estaba Nueva York, seguida de Moscú, Londres, Sao Paulo y París. En esas ciudades, las imágenes más publicadas son el palacio de Buckingham, la torre Eiffel, el Corcovado, pero siempre con enfoques novedosos. Para un millennial el reto es capturar un ángulo jamás visto. Como el que quieren tomarse todos ahora en la pirámide de cristal del museo del Louvre, que ya es tan común
que dejó de ser novedosa.

Para lograrlo las agencias de viajes proponen excursiones donde la compañía de un fotógrafo y la garantía de que tendrán imágenes envidiables resulta más importante que el hotel o si viajan con todo incluido. Según Karla, también se ha vuelto común viajar a lugares con culturas diferentes y tomarse fotos con ellos en sus trajes típicos. “Es algo muy instagrameable”, dice. Ella ha publicado estas fotos en su blog y en efecto, muchos de sus seguidores se antojan por ir a conocer personalmente estos lugares. No importa cuán lejos estén ni lo que haya que hacer para llegar allí. Lo importante es tomar la foto y subirla a Instagram.