Video | Indígenas tumban la estatua de Gonzalo Jiménez de Quesada en el centro de Bogotá

La estatua de Gonzalo Jiménez de Quesada ubicada en la plazoleta de la Universidad del Rosario fue derrumbada en la madrugada de este viernes por un grupo de indígenas perteneciente al Movimiento de Autoridades Indígenas del Sur Occidente-AISO, según mostró este grupo en un video publicado en su cuenta oficial de Facebook y que fue replicado por varios usuarios en redes sociales.

En un mensaje en su cuenta de Facebook, el movimiento indígena señala: “Desde el Movimiento AISO en Memoria de los hijos de Bachue, del pueblo Muisca, de los pueblos indígenas de Colombia y la memoria histórica de Nuestro Nu Pirø (América) hemos derribado la estatua de Gonzalo Jiménez de Quesada en la ciudad de Bogotá, seguimos nuestro mandato de desarrollar justicia histórica contra crímenes de lesa humanidad”.

Asimismo, esta comunidad indígena insiste en que sigue en “paro permanente”, por lo que convoca a una “huelga general en Colombia, una huelga capaz de enseñarle a los que nos han gobernado por más de 200 años que los gobiernos deben tenerle respeto al pueblo colombiano que construye poder colectivo y popular”.

En un comunicado, el movimiento de indígenas explicó el motivo por el que fue derribada esta estatua: “Hoy 7 de mayo, los pueblos originarios recuperamos uno más de nuestros espacios sagrados que fueron violados, perpetrados y despojados por los sicarios de la ‘Conquista y la Colonia española’”.

Dentro de los motivos, el movimiento indígena aseguró que Gonzalo Jiménez de Quesada “fue históricamente el más grande masacrador, torturador, ladrón y violador de nuestras mujeres e hijos. De él y su familia descienden familias élites de este país que han reproducido los grandes problemas que seguimos padeciendo”.

Otras estatuas que han derribado

En la jornada del paro nacional, el movimiento indígena también derrumbó la estatua de Sebastián de Belalcázar, fundador de Santiago de Cali, ubicada en el oeste de la ciudad.

En un video aficionado se ve cómo un puñado de personas se acercan al monumento, enlazan algunas cuerdas y hacen presión para derribarla. Contados segundos después, la estatua cae ante la celebración de quienes cometieron este acto que la administración municipal ha considerado como vandalismo.

¿Quiénes derribaron la estatua? No hay una explicación clara de las autoridades, pero extraoficialmente voceros de la comunidad indígena Misak, con sede en Cauca, señalaron que este acto hace parte de un proceso de limpieza histórica contra el genocidio.

Esa misma comunidad tumbó el monumento de Sebastián de Belalcázar en Popayán, capital del Cauca, el pasado 16 de septiembre de 2020. En aquella ocasión alegaron que se trataba de un juicio histórico contra el colonizador, a quien acusan de asesinatos, violaciones y genocidio.

“Este juicio lo enmarcamos dentro de un compromiso que tenemos frente a la memoria colectiva de nuestra sangre, razón por la cual estamos convocados a reescribir la historia liberándonos de toda huella producto de la colonialidad del saber”, señaló el comunicado de la comunidad Misak.

En otro caso aislado, un grupo de manifestantes, que no pertenecía al movimiento indígena, derrumbó la estatua de Antonio Nariño, ubicada en la plaza de Nariño, en Pasto, el sur del país.

En videos publicados por diferentes usuarios en redes sociales se observó cómo un grupo de manifestantes protestaron y colgaron varias cuerdas alrededor del monumento para tumbarlo, mientras llegan los policías al lugar.

El coronel José Sánchez Valderrama, comandante de la Policía de Pasto, rechazó los hechos. “Estos delincuentes arremetieron contra ellos (los agentes) con elementos contundentes, con rocas, y no bastando con ello les arrojaron fuego, causándoles lesiones y quemaduras a cinco de nuestros policías”, dijo.

El oficial anunció una recompensa de hasta 10 millones de pesos para quien entregue información que permita capturar a los responsables del hecho.