JUSTICIA

El barrio de lujo en Argentina que pone en líos al Chicho Serna y a la viuda de Escobar

El exfutbolista, María Isabel Santos y Juan Sebastián Marroquín fueron citados a indagatoria por una megaoperación de lavado de activos que estaría liderada por Jose Byron Piedrahíta, pedido en extradición. Un abogado se convirtió en la clave de la investigación.

20 de abril de 2018
| Foto: Fotomontaje Semana. Fondo: San Diego Country Club, tomada de wikimapia.org

Mateo Corvo Dolcet quedó en libertad el pasado mes de febrero, después de pagar una fianza de 10 millones de pesos en Argentina. Él es el abogado de José Byron Piedrahíta, el ganadero colombiano capturado en Caucasia por cargos de corrupción a un agente de Estados Unidos y solicitado en extradición por ese país. 

Mientras en Colombia se resuelve su envío, en Argentina avanza una investigación en su contra por el supuesto lavado de activos por 15 millones de dólares producto de dineros de narcotráfico.

La mano derecha de Piedrahíta en varios megaproyectos que pusieron a andar en ese país era el abogado Corvo Dolcet. Información recogida en su casa y declaraciones rendidas ante las autoridades llevaron a que el juez federal de Morón Néstor Barral llamara a indagatoria a María Isabel Santos Caballero y a Juan Sebastián Marroquín Santos, viuda e hijo del capo Pablo Escobar. Junto con ellos, también deberá comparecer Mauricio Serna, el exfutbolista colombiano. Todos señalados del presunto delito de lavado de dinero producto del narcotráfico. 

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Los detalles de esta historia que le ha dado la vuelta a los diarios argentinos y colombianos, comenzó con la captura de Corvo Dolcet el pasado mes de septiembre. Durante el operativo de allanamiento a su residencia, según lo reporta el diario argentino El Clarín, fue encontrada la que fue bautizada por la prensa como ‘la caja de Mateo‘.

Allí el abogado escondía varios documentos reveladores, entre ellos, una constancia firmada por él y la familia de Escobar en la que queda consignado un supuesto pacto para el pago de una comisión del 4,5 por ciento (unos 100.000 dólares) por presentar al abogado Corvet con José Byron Piedrahíta en el 2008. “La señora Maria Isabel Santos y Sebastián Marroquín, por una parte, y por otra Mateo Corvo Dolcet extienden el presente documento a efecto de dar por cumplidas promesas recíprocas resultantes de la presentación del señor José Piedrahita como inversor en el proyecto inmobiliario que Corvo Dolcet lleva adelante”, dice el documento incautado. 

Entre los proyectos de inversión, según se ha desprendido de la investigación, está el Hotel Faena y en el tradicional Café de los Angelitos, un histórico lugar de tango a pocos metros del Parlamento del Congreso, en Buenos Aires. Sin embargo, la verdadera joya de la corona era un proyecto de inversión para la construcción de un barrio de lujo de 200.000 metros cuadrados, con servicio de tren VIP. 

Piedrahíta como inversionista era el llamado a volver este lujoso megacondominio en una realidad. Sin embargo, antes de que pudiera lograrlo, el ganadero colombiano fue capturado en Caucasia con fines de extradición, como el supuesto responsable de un soborno a un agente federal en Estados Unidos, cometido en el año 2010. En la investigación que adelanta Argentina, Piedrahíta es considerado el jefe de esta operación de lavado de activos a gran escala, en la que también aparece mencionado el nombre del exfutbolista el Chicho Serna. 

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Fragmentos de la declaración de Corvet, revelados por El Clarín, aseguran que cuando Piedarahíta se fue para Argentina a mediados del 2008 lo contactó para ir a ver la tierra donde se levantaría el proyecto. Según Corvet, se entusiasmó tanto que en el siguiente viaje empezó a conversar formalmente de sus primeras inversiones. 

En total, el abogado asegura que se hicieron tres operaciones de compra de acciones, de las cuales la primera y la tercera fueron en efectivo y bancarizado por el mismo Piedrahíta. La segunda -dice el abogado- fue con propiedades.

"En cuanto a la operación de propiedades dijo que este le propuso hacer lo que los colombianos llaman un ‘cambalache‘, lo cual significaba que él al venir a Argentina intercambiaba propiedades suyas en Colombia, con propiedades en Argentina que tenía el Chicho Serna, por lo cual Piedrahíta recibió de parte del Chicho en camabaleche, una Land Cruiser último modelo, un Bora (automóvil), una casa amoblada en el Country San Diego por un valor superior a $ 1 millón de dólares, un departamento amoblado sobre la Av. Libertador, zona de Olivos o Vicente López nuevo y dos terrenos en un Country de Zona Oeste de nombre Terra Vista, más dinero en efectivo".

En el caso de la casa amoblada en el Country San Diego -dice el periodico argentino- fue adquirida por Piedrahita y fue vendida 15 días más tarde por el doble de precio a Corvo Dolcet. Esta operación despertó la sospecha de las autoridades argentinas, que la consideran una clara maniobra de lavado de activas.

Sobre estos hechos fueron llamados a responder los tres colombianos, que para las autoridades de Argentina, tenían pleno conocimiento de las sospechas y los cuestionamientos que recaían sobre Piedrahíta, considerado por la justicia estadounidense como un histórico de la mafia. Enfrentó una orden de captura como uno de los miembros del Cartel de Cali aliado con los hermanos Rodríguez Orejuela. Aunque para el 2006 se levantó una orden de captura internacional en su contra, estuvo prófugo hasta que en el 2011 le levantaron los cargos.