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El cabecilla con el alias de BB coordina, desde la cárcel La Modelo y por WhatsApp, los crímenes en la capital del país.
El cabecilla con el alias de BB coordina, desde la cárcel La Modelo y por WhatsApp, los crímenes en la capital del país. | Foto: Autor Anónimo

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“Vuelele el caspero a ese pirobo”, los descarados chats del “pluma” que ordena asesinatos desde la cárcel La Modelo, en Bogotá

El cabecilla con el alias de BB coordina, desde la cárcel y por WhatsApp, los crímenes en la capital del país.

Redacción Semana
6 de junio de 2024

Las conversaciones que sostiene un llamado “pluma” recluido en la cárcel La Modelo de Bogotá, con otros delincuentes en la calle, resultan descaradas, pero perturbadoras, no solo porque el cabecilla está en una celda con un celular dando indicaciones, sino porque las órdenes incluyen asesinar personas.

Así quedó en evidencia en los chats revelados por la Fiscalía contra un criminal conocido con el alias de BB, el “pluma” de un patio de la cárcel La Modelo. El hombre ordenó el asesinato de otra persona que acaba de salir en libertad, que compartía el espacio de reclusión, pero que, al parecer, se convirtió en su enemigo.

El cabecilla con el alias de BB coordina, desde la cárcel La Modelo y por WhatsApp, los crímenes en la capital del país.
El cabecilla con el alias de BB coordina, desde la cárcel La Modelo y por WhatsApp, los crímenes en la capital del país. | Foto: Autor Anónimo

Los chats indican, en detalle, el cuándo y la forma en que debía ser asesinada una persona. Pero, sin saberlo, quien recibía los mensajes estaba leyendo un plan para su propio asesinato. Así quedó en evidencia con las pruebas recaudadas por la Fiscalía. El llamado “pluma” explicaba los detalles de un asesinato, mientras en otra conversación coordinaba el crimen.

  • Alias BB: Trate de no dejármelo perder… pero sí vuele el caspero a ese pirobo.
  • Delincuente: No socio, ni por el Hpta… el problema es que el hijo de perra no responde
  • Alias BB: Socio, ya hablé con mis socios, para que lo recojan y la empecemos a armar.
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En las conversaciones, también alias BB le advierte al otro delincuente, que supuestamente tenía la misión de asesinar a un rival del llamado “pluma”, que le tiene lista un arma de fuego con silenciador y hasta le envía una foto del arma que le entregarían en un punto del sur de Bogotá.

  • Alias BB: Vea socio, este es el cacharro para apagar a ese sapo hp… toca que no se demore socio.
  • Delincuente: Listo pa… no le fallo, no le he fallado, ni le fallaré.
  • Alias BB: Llegue recógelo y usted ya mira como le hace la osadía a ese piro del Ojos.
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La conversación entre el llamado “pluma” del patio en la cárcel La Modelo y el delincuente que en la calle, supuestamente recibirá un arma de fuego para asesinar a un hombre conocido con el alias de Ojos, termina en un hecho completamente contrario. El cabecilla criminal estaba organizando una trampa para su interlocutor, lo quería asesinar.

Cuando el delincuente cumple la cita para recibir el arma de fuego, se percata de una situación particular. Varios hombres en un carro lo abordan y le dicen que se suba para recoger el arma. La futura víctima rechaza esa invitación y al contrario les dice que el intercambio lo hagan en los carros donde se movilizan. Es allí cuando ocurre un tiroteo que deja muertas a dos personas.

El cabecilla con el alias de BB coordina, desde la cárcel La Modelo y por WhatsApp, los crímenes en la capital del país.
El cabecilla con el alias de BB coordina, desde la cárcel La Modelo y por WhatsApp, los crímenes en la capital del país. | Foto: Autor Anónimo

La Fiscalía adelantó la investigación y concluyó que el responsable de ordenar el asesinato de las personas, era efectivamente alias BB, el “pluma” del patio en la cárcel La Modelo, por eso y como lo hizo desde su celda, los investigadores le imputaron nuevos cargos. Su condición de reo no impidió al fiscal del caso solicitar una nueva medida de aseguramiento por homicidio. Su valentía tras las rejas quedó reducida a un nuevo proceso que lo atornilla a la cárcel por un par de décadas más.