¿Ajuste de cuentas o un error? Masacre en el sur de Barranquilla dejó cuatro muertos

En Barranquilla aún no salen del asombro tras la masacre que dejó a cuatro hombres muertos y dos más heridos en el barrio El Carmen, sur de Barranquilla, la noche del viernes 22 de noviembre. Tras este hecho, todo un componente judicial de la Policía Metropolitana comenzó con las indagaciones para esclarecer este homicidio múltiple.

SEMANA conoció mediante fuentes judiciales que los investigadores de la Seccional de Investigación Judicial de la Policía tienen como principal hipótesis que se trate de un ajuste de cuentas por, al parecer, robos en medios electrónicos.

Además, que se encuentran recopilando la información necesaria para darle peso a esta hipótesis y comenzar a realizar las capturas de los responsables que están a punto de ser individualizados plenamente.

Otro de los análisis que realizan los investigadores judiciales es la presencia de un sujeto conocido con el alias de Mono Buitre en el lugar donde ocurrió esta masacre que agudiza la inseguridad en el Atlántico.

Las autoridades identificaron a las víctimas mortales como Andrés Felipe Berdugo De la Cruz, Edwin Horacio Pérez Plata, Felipe Andrés De las Salas y Víctor Daniel Olivera Martínez, quienes recibieron varios impactos de bala y quedaron sin vida en el lugar de los hechos.

En el mismo hecho terminaron heridos dos hombres que responden a los nombres de Jean Carlos Philips Celis y Jorge Luis Noguera Rivadeneira, quienes se encuentran recibiendo atención médica especializada.

Desde las afueras de Medicina Legal, en el sur de Barranquilla, Felipe De las Salas, papá de uno de los asesinados, sostuvo que todo se trató de un grave error porque su hijo solo se dedicaba a instalar televisores de alta gama, pero que no era, según él, delincuente.

“Mi hijo solo se dedicaba a instalar televisores de alta gama con sus accesorios, cámaras de seguridad, mantenimientos de aire y sonidos para carro. Estoy consternado con lo que les sucedió a los muchachos, especialmente a mi hijo. Les segaron la vida a unos jóvenes limpios, trabajadores, de buena familia y bien criados”, dijo el hombre en diálogo con El Heraldo.

Al tiempo, indicó: “Como padre les pido justicia a las autoridades, que ojalá se esclarezca esto para que la memoria de esos muchachos, en especial la de mi hijo, quede limpia y se den cuenta de que era sano. De pronto, mi hijo y sus amigos estaban en el lugar que no debían estar”.

El hombre, en medio del dolor, solo les pide a las autoridades que se pueda hacer justicia, porque lo que sienten es un dolor muy grande con el que van a tener que lidiar durante el resto de sus vidas.

“Lo único que pido es que por favor se haga justicia. Este es un dolor muy grande para toda la familia. Puede servir como ejemplo para los jóvenes, ya no se puede estar en grupo en una esquina, en estaderos, mejor es quedarse disfrutando dentro de las casas, aunque ni así sea seguro. Ya no se sabe quiénes son los amigos y los enemigos”, expresó.