La familia colombo-palestina en Barranquilla.
La familia colombo-palestina en Barranquilla. | Foto: SEMANA

Nación

Así fue como una familia colombo-palestina salió de Gaza y llegó a Barranquilla: pide ayuda porque no tiene casa ni dinero

Cuatro miembros de una familia adquirieron la nacionalidad colombiana y logaron huir de la guerra entre Hamás e Israel. Ahora, en Barranquilla, construirán una nueva vida.

Redacción Semana
1 de diciembre de 2023

El domingo 19 de noviembre permanecerá en los recuerdos de Basel Zaid El Sahli y su familia. Ese día, bajo todo pronóstico, sortearon los estragos de una guerra y, arrastrados por el pánico de una infamia, abandonaron su casa en la Franja de Gaza con rumbo a Barranquilla.

No fue fácil. Basel estaba en Egipto con su hijo mayor, donde se encontraban por un procedimiento médico. Pero a su esposa y a sus dos hijos menores la guerra los atrapó de cerca. Ellos se quedaron en Jan Yunis, al sur de la Franja, donde las bombas estallaban a escasos centímetros, sin perdonar género, condición ni edad.

Samaher Ali Zaiyd Almassiri
Samaher Ali Zaiyd Almassiri. | Foto: A.P.I

“Me puse en contacto con el cónsul de Tel Aviv (ciudad en Israel) y envié una apelación al presidente a través de la embajada. Él aceptó para salvar la vida de mi esposa y mis hijos”, relató el padre, en conversación con SEMANA.

Resulta que Basel Zaid El Sahli tiene doble nacionalidad porque es colombiano, pero emigró hacia Oriente Medio desde niño. Sus hijos también adquirieron la nacionalidad porque él la gestionó a temprana edad. Pero Samaher Ali Zaiyd, su esposa, era la única que faltaba.

Literalmente, un decreto les salvó la vida; en ese entonces, el presidente Gustavo Petro emitió una resolución que, en tiempo récord, logró concederle la nacionalidad colombiana a la mujer para iniciar el proceso de repatriación.

Por eso, el 19 de noviembre, ella y sus dos hijos, de nueve y once años, salieron de su casa, en la Franja de Gaza, y se dirigieron hacia una zona conocida como el cruce de Rafah. Desde allí, consiguieron llegar a El Cairo, en Egipto, para reencontrarse con su esposo y con su hijo mayor de 21 años.

“El camino hacia el cruce de Rafah es muy difícil, ya que no hay gasolina, ni combustible, ni automóviles para el transporte. Milagrosamente, ellos consiguieron uno de los únicos automóviles que había para transportarlos”, contó el hijo mayor, Mohammed Zaid Almassri.

De El Cairo viajaron hasta Estambul (Turquía), luego llegaron a Bogotá y finalmente arribaron a Barranquilla el viernes, 24 de noviembre. Un viaje bastante largo, pero que les permitió conciliar el sueño después de mucho tiempo sin poder dormir.

De izquierda derecha Mohammad; el hijo menor de la familia, Ali; la madre, Samaher Ali Zaiyd Almassiri; el padre, Basel Zaid El Sahli y el hijo Wesam.
De izquierda derecha Mohammad; el hijo menor de la familia, Ali; la madre, Samaher Ali Zaiyd Almassiri; el padre, Basel Zaid El Sahli y el hijo Wesam. | Foto: A.P.I

“En la Franja de Gaza no hay agua, ni electricidad, ni comida. Todos en la Franja de Gaza están inseguros. Todos están esperando el momento en que su casa sea bombardeada para poder morir. Allá no conozco el significado de seguridad, relata el hijo mayor, el único que cursaba una carrera profesional entre la familia, pero la Universidad Islámica de Franja de Gaza quedó completamente destruida.

“Espero que el señor presidente [Gustavo Petro] nos ayude a encontrar una casa primero, luego nos ayude a encontrar una oportunidad de trabajo o nos ayude a darle a mi padre un salario fijo porque él es mayor y tiene muchos problemas de salud, esperamos que haya ayuda para él”, solicita Wesam Zaid Almassri.

Desde Barranquilla, la familia colombo-palestina aprovecha el diálogo con SEMANA para agradecerle al “señor Paul”, quien los acogió en un prestigioso hotel de la ciudad con todo pago. Pero están preocupados: la hospitalidad solo dura 10 días y después no saben qué rumbo tomar.

Mientras tanto, intentan defenderse con sus clases de español. Papá, mamá e hijos se reúnen todas las tardes con una maestra en el segundo piso del hotel. Apenas iniciaron y ya saben saludar y agradecer.

Son conscientes de que se avecina un nuevo comienzo, todo desde cero. Llegaron a Colombia sin nada y ahora deben construir. Por eso, anhelan ser escuchados y visibilizados.

La familia en sus clases de español.
La familia en sus clases de español. | Foto: SEMANA

Wesam Zaid Almassri dice que tiene un montón de historias por contar y lo hará en sus redes sociales. Se creó una cuenta en X, antes Twitter. Allí aparece con el usuario MohammedBmasri y se autodescribe como un “Colombo Palestino, superviviente del genocidio israelí en Gaza, lucho por una Palestina sin ocupación y aparthied”.